Ganekogorta desde Alonsotegi por fuente del Oro y collado Gongeda. Ruta circular.

Se trata de una ruta relativamente larga (algo mas de 15 km) y bastante dura (1024 m de desnivel positivo acumulado), comprendidos sobre todo en los atajos que cogemos tras dejar atrás la fuente del Oro y en la ascensión al Ganeko desde el collado Gongeda.

Podemos dividir la ruta en cuatro tramos distintos: El primer tramo, de 4,6 km, transcurre casi enteramente dentro de un pinar, y consiste exclusivamente en el ascenso hasta la desviación hacia el Zamaia, que no cogeremos. Este primer tramo tiene una parte inicial desde el barrio de Azordoiaga hasta la Fuente del Oro de casi un km, que a pesar de unos pequeños repechos en su inicio transcurre muy llano por piso cementado con el arroyo Parakentxa a nuestra derecha. El segundo tramo se realiza enteramente por pista forestal en bastante buen estado, y desde la desviación hacia el Zamaia llega hasta el collado Gongeda. También su inmensa mayoría transcurre bajo un pinar. El tercer tramo es la propia ascensión al Ganeko desde el collado Gongeda, que es verdaderamente dura y por espacio casi totalmente desarbolado. Y el cuarto tramo es propiamente el descenso desde la cima del Ganeko hasta collado Gongeda y después hasta Azordoiaga bordeando las pequeñas cimas del cordal del Tontorra.

Debo decir que el objetivo primordial de la ruta de hoy es el Ganeko (son casi 7 km desde la salida), por lo que no ascenderemos a ninguna de las cimas adláteres. Así por tanto, obviamos en el ascenso el Zamaia y Gongeda, que los dejamos a nuestra derecha, y en el descenso tampoco ascendemos a ninguna de las discretas cimas que forman parte de la "Ruta de los seles": Pilipaondo, Larrazelai, Azpioleta y Tontorra. Si alguien desea seguir esta ruta por wikiloc verá que todos los caminos y desvíos los he señalizado con el bastón, por lo que no hay lugar para la duda en todos ellos.

Recomiendo también las siguientes rutas de wikiloc para el o la que esté interesado en coronar todas las cimas citadas, realizadas y descritas por el que suscribe. Son las siguientes: "Zamaia, Gongeda, Pilipaondo, Larrazelai y Tontorra desde Alonsotegi", "Zamaia y Gongeda desde La Quadra", "Ruta 27 Bilbao. Ascension al Ganekogorta desde Alonsotegi por el Zamaia y Gongeda", esta última similar a la de hoy pero bajando desde el Ganeko hasta Bilbao.

Pero vamos a la descripción más detallada de la ruta.

Dejamos el coche en el parking bajo las plataformas de la autopista junto a un centro escolar, unos centenares de metros antes del barrio de Azordoiaga. Llegamos hasta este pequeño barrio y enseguida vemos de frente una bifurcación señalizada: a la izqda. es el camino hacia el Pagasarri y la casa rural de Ordaola, pero nosotros vamos por la derecha, hacia la fuente del Oro. Tras andar casi un km llegamos a la zona recreativa homónima por amplio camino cementado y totalmente llano. Dicen que su nombre proviene del color naranja que adquieren las piedras de la fuente por su gran cantidad de hierro, ya que son aguas muy ferruginosas.

Nada más superar la zona recreativa comienza frente un amplio camino que empieza a ascender poco a poco. Este camino, siempre dentro de un enorme pinar, traza por su ruta normal unas amplias curvas y zigzags hasta llegar al desvío hacia el Zamaia, pero nosotros vamos a acortar las mismas por una serie de atajos usados por los ciclistas de montaña. Todos sabemos que "el atajo cuesta trabajo" y, en efecto, algunos atajos son bastante empinados, pero al menos nos libramos de dar varias revueltas, aunque de la gran primera lazada no nos libramos.

Son unos cuantos atajos bastante visibles e intuitivos y en mi opinión hay que cogerlos todos, así ahorraremos algo de tiempo. Se puede decir que nada más acabar el primero casi se ve de frente el siguiente, y después el siguiente, y así hasta llegar a la desviación al Zamaia, que esta señalizada. Como he dicho, una vez en el cruce señalizado nos abstenemos de girar a la derecha, hacia la citada y rocosa cima y la mina Antón, y en el cruce seguimos de frente por pista llana y en muy buen estado que discurre por la ladera sur del Zamaia. Entramos enseguida en un pinar y encontramos una bifurcación señalizada eligiendo, lógicamente, el camino de la derecha, que indica hacia el Ganeko, para llegar en un rato hasta el collado Gongeda por camino ahora ya mas empinado.

El collado Gongeda está señalizado. Es un punto crítico de las rutas por esta zona ya que de él parten o llegan cuatro caminos: según llegamos el camino de la derecha conduce hacia el Gongeda y el Zamaia, el que sigue de frente baja hacia el embalse de Lingorta y La Quadra, y el de nuestra izqda sube al Ganeko. Lógicamente el cuarto es por el que hemos subido y, como ya sabemos, procede de Alonsotegi.

Sin mas dilación enfoco el camino hacia el Ganeko, que entra en un pinar a los pocos metros y se desdobla en una bifurcación no señalizada. ¿A la izquierda? ¿a la derecha?, pues por cualquiera de los dos, aunque yo cojo el camino de la derecha. El de la izquierda desemboca un poco más arriba en el que yo he elegido. Al poco, el camino sale del pinar y transcurre por espacio despejado, y así será hasta llegar bastante más arriba a un hayedo poco antes de enfocar la cresta cimera del Ganeko y Arrabatxu.

El camino por la falda norte del Ganeko es duro y pedregoso, trazando un par de bucles o zigzags. En la primera curva a la derecha hay un cartel que pone: "Cuesta del silencio", imagino porque la cuesta es verdaderamente inclinada y nadie habla para no perder el aliento. Tras un rato de dura ascensión llegamos a otra curva cerrada a la derecha, también señalizado con un par de carteles tumbados en el talud que pone: "Gallarraga 3,1 km" y "Senda del Jabalí". Curioso cuando menos. La cuesta sigue hacia arriba suavizándose al poco, entrando en un terreno más herboso y de andar mucho más cómodo.

Enseguida cruzamos un arroyito con una bañera a modo de abrevadero, es el arroyo Nocedal, que nutre junto a otros arroyos el embalse de Lingorta. El camino gira a la derecha y se mete en un bonito hayedo, que como estamos en invierno no hay ninguna hoja en las ramas, todas estan en el suelo, lo que se agradece al andar. Subimos un rato más y abandonamos el hayedo para llegar enseguida al camino de la cresta del Ganeko, Arrabatxu y Paguero. Hay un cartel recomendando llevar los perros atados, ya que por aquí (yo lo he visto en una reciente ocasión), suele pastar plácidamente en estos jugosos pastos un rebaño cuidado por un par de mastines de pegolete. Una recomendación: si nos encontramos alguna vez en esa situación no hay que intentar pasar por donde están las ovejas, aunque estén en medio de nuestro camino, hay que dar un rodeo dejando una considerable distancia entre nosotros y el rebaño. En ese caso los mastines no considerarán que hemos invadido su terreno y respetarán nuestro paso.

Las sendas de los montañeros están muy dibujadas en el suelo y las seguimos de frente y un poco hacia la izquierda (hacia la derecha iríamos hacia el Paguero), dejando el Arrabatxu a nuestra derecha. Al poco pasamos cerca de la escotadura de la cresta por la que baja el sendero hasta el collado Kurtziaga, hacia la fuente del Espino y hacia Llodio.

A los pocos metros estamos en la cumbre del Ganeko (999 m), tras andar casi 7 km desde Alonsotegi. Hace un viento de mil demonios, así que opto por ponerme el gorro, los guantes y el forro polar y marchar de allí pitando tras hacerme un selfie. Opto por no bajar a derecho hasta el collado Gongeda, como lo suelen hacer algunos corredores de mendi trail, sino que bajo exactamente hasta el citado collado por el mismo camino de la subida.

Bajo relativamente rápido y llego al collado, desviándome hacia Alonsotegi, hacia la derecha. Pero desde el collado Gongeda bajo solo unos centenares de metros, ya que cojo enseguida un atajo bien visible que parte a la derecha y que me deja en unos doscientos metros de descenso en la misma pista por la que antes he venido, pero en un cruce posterior. En este cruce voy también hacia la derecha, pero a dos o trescientos metros giro a la izquierda por un camino terroso y bastante embarrado por el ganado, abandonando la cómoda pista. Si hubiera seguido por ella iría en dirección al Pagasarri, encontrando en ella enseguida el desvío hacia el Pilipaondo, Tontorra, etc..., que en la ruta de hoy los descartamos, aunque pasaremos cerca.

Hay una característica de toda esta zona que la gente quizá desconozca, es una zona donde hay varios "seles". Se llama "sel" a un pasto acotado de forma circular con una piedra que indica su centro geométrico, donde pastaba o sesteaba el ganado. Hubo seles de verano y de invierno, según la altura de los mismos, por lo que había cierta trashumancia entre unos y otros. Existen desde la Edad Media y aún hoy son perfectamente visibles a vista de pájaro (por Google Maps o por las ortofotos de la Diputación). Por aquí hay unos cuantos seles, hoy cubiertos de pinos la mayoría de ellos, pero perfectamente identificables, de ahí el nombre de la ruta PR BI 100, "Ruta de los Seles", con sus variantes 1 y 2.

Bien, hemos cogido el camino de tierra abandonando la pista. Ahora no dejaremos el camino en un buen rato, que llanea con ligeros altibajos. Dejamos el Pilipaondo arriba, a nuestra derecha, aunque no lo vemos. Después dejamos a la derecha también el Larrazelai, que lo bordeamos. El camino llega a la aldeita de Artiba, situado justo encima del su embalse homónimo, pero no llegamos a ella sino que atajamos a la izquierda por un senderito del ganado para llegar al llamado camino de Artiba, siguiendo hacia delante por él y pasando al lado de un caserío y unas instalaciones ganaderas. Justo a la derecha se encuentra otra cimita, el Azpioleta, a la que tampoco nos acercamos.

Enseguida llegamos a la desviación al Tontorra, que es hacia la izquierda, pero nosotros optamos por seguir hacia delante por un camino mas humilde que parte de la propia desviación un poco hacia la derecha, y bordea el Tontorra por su ladera norte cubierta de pinos. Seguimos en un rato el camino más evidente, sin desvíos, para llegar enseguida a un cruce señalizado. Seguimos por donde nos indica el cartel: hacia Azordoiaga y Alonsotegi. El camino al poco traza una cerrada curva a la derecha para llegar a una puerta metálica en un vallado que se cierra sola accionada por una polea. Pasamos ahora por una senda que al poco traza una cerrada curva a la izquierda y al lado tiene una valla con múltiples señales de tráfico de obras públicas usados para tapar los agujeros de la misma.

Llegamos enseguida a un edificio nuevo situado a la izquierda que parece un almacén ganadero. El camino se ensancha considerablemente convirtiéndose en una amplia y cómoda pista. Cruzamos otras dos vallas con el sistema de cierre de la puerta con polea que asegura su cierre siempre que se cruza. Ya no tenemos mas que seguir la pista bordeada de pinos, viéndose de frente y abajo el núcleo urbano de Alonsotegi, al que nos queda poco por llegar. El amplio camino que llevamos desemboca en la pista cementada que al comienzo de la ruta nos ha llevado hasta la fuente del Oro, cogiendo a la derecha para llegar al barrio de Azordoiaga y al aparcamiento bajo la autovía del Cadagua. Fin de la ruta.

En resumen, se trata de una ruta relativamente larga que sin descansos ni paradas (solamente para quitarnos y ponernos ropa y para sacar las fotos en todos los desvíos) la hemos realizado en cuatro horas y cuarto, ascendiendo en total más de mil metros, siendo sin duda las rampas más duras las de la ladera norte del Ganeko y los atajos que hemos cogido para evitar los zigzags entre la fuente del Oro y la desviación al Zamaia. Es una ruta muy montañera.