Garita de la Serrata desde Caneja (Caravaca de la Cruz)

Hemos seguido la ruta https://es.wikiloc.com/rutas-senderismo/garita-la-serrata-desde-caneja-54621460 de Belen23, pero en sentido contrario.

Se trata de una ruta muy sencilla y sin complicaciones que asciende a la garita de vigilancia de la Serrata desde la pedanía de Caneja. Quizás la mejor época para realizarla sea en abril, con los campos de cereal enteramente verdes, ya que la mitad del itinerario discurre entre parcelas y las vistas desde arriba ofrecerán una bonita estampa.

Iniciamos la caminata en dirección oeste, y lo primero que llamará nuestra atención es un palomar que destaca a nuestra derecha, y que visitaremos al regreso.

Salimos del asfalto para seguir de frente por camino de tierra, y a los pocos metros volvemos a girar a la derecha delante de una casa. Por este agradable camino nos dirigimos rectos entre campos cerealistas, que ya empiezan a brotar y alfombrar el suelo.

La Sierra de la Serrata destaca por la tremenda mordida que una cantera le ha robado al monte.

El día es fresco y la lluvia parece que va a comenzar de un momento a otro, pero no lo hace. Aunque son condiciones perfectas para andar, no deja de alarmarnos el hecho de que en estas fechas aún no haya helado en estos campos caravaqueños. De hecho se ve algún que otro almendro prematuramente florecido.

La silueta de un viejo y solitario ciprés destaca a nuestra izquierda. Cruzamos una carretera y seguimos nuestro camino de frente, siguiendo el tendido eléctrico. Así nos unimos a un camino que a la izquierda conduce a un corral. Perseveramos y continuamos en la misma dirección por otro camino.

Más adelante vemos un cortijo de cuya chimenea sale un humo acogedor.

Desembocamos en el camino de acceso a la garita que vamos a visitar y lo seguimos hacia la izquierda. En la puerta de acceso encontramos un cartel que señala que esta sierra está declarada Lugar de importancia comunitaria (LIC). Como casi todos los carteles rurales tiene el disparo de algún cazador. Imagino el enorme nivel intelectual que se requiere para que pegar tiros resulte divertido, y más cuando se hace a seres vivos.

Al iniciar el ascenso vemos a la derecha una vieja construcción a la que nos acercamos. Se trata de una ruinosa casa forestal que ha sido vallada, aunque a estas alturas está ya más que grafiteada. Tienen un encanto especial estas casas, tanto por su ubicación como por su prestancia.

Retomamos la subida, prolongada y equilibrada. A la derecha empezamos a tener unas muy buenas vistas de los campos y montes entre la Sierra de Mojantes y Archivel. Donde el camino gira 180° a la izquierda también hay una buena panorámica de la sierra, que se extiende hacia el oeste cubierta de una densa masa vegetal.

Seguimos manteniendo la pendiente unos minutos y alcanzamos la cumbre, presidida por una flamante garita de vigilancia de incendios, tantas veces vista desde la carretera cuando vamos hacia Almaciles.

El día no es el más agradecido para disfrutar del paisaje: completamente cerrado, con nubes comiéndose a Mojantes y todas las sierras a nuestro alrededor, la visión que tenemos es muy limitada. Subir aquí en un día claro y con los cereales crecidos ha de ofrecer un espectáculo mucho mayor que el leve esfuerzo que supone subir aquí.

Por nuestra parte, decidimos bajar monte a través, ya que el terreno, se vegetación baja, de pendiente suave y suelo firme, rizan el rizo para hacer la excursión mucho más divertida.

En un rato hemos descendido hasta conectar con el camino de ida, por el que retornamos a Caneja, y una vez allí nos acercamos al bonito palomar, que encontramos abierto y accesible, así que saciamos nuestra curiosidad y escudriñamos el interior, repleto de columbarios, como es lógico.

Adyacente al palomar, una tosca edificación acoge lo que debió ser un motor de bombeo de agua. El lugar, desvencijado y en completo abandono, tiene ese atractivo de la nostalgia.

De esta manera ponemos punto final a una excursión improvisada que ha resultado de lo más bonita.