Geoformas y estructuras rocosas de Grankanto en el monte Jaizkibel
near Donibanealdea, País Vasco (España)
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Trail photos
Itinerary description
En una mañana radiante y muy calurosa (se llegó a superar los 30 grados), me he acercado a la joya de Grankanto, con otros dos Carlos, Jesús Mari, Enrique, Javier y David, algunos de ellos expertos y muy buenos conocedores de las maravillas que encierra nuestro querido Jaizkibel, y en concreto de este paraje único. Y otros, excelentes divulgadores de temas de naturaleza.
Al llevar varios dias de inversión térmica, portamos un medidor de partículas PM2.5, a fin de conocer la polución del aire durante la excursión. En los gráficos que se aportan se puede ver que los niveles de partículas superaban el límite recomendado por la Organización Mundial de la Salud (OMS) de 12 microgramos por metro cúbico de aire (color verde), situación que se mantendrá hasta que desaparezca el anticiclón que tenemos encima, y que al parecer no será hasta el próximo miércoles.
Es impresionante las maravillas de geoformas y estructuras rocosas que pudimos ver y fotografiar en cavidades colgadas en escarpes casi verticales.
Entre otras las siguientes:
-Geoformas con diseños escultóricos, originadas por procesos de disolución del cemento intergranular, destacando las formas alveolares, coraloides, celdas en panal de abejas, hojaldres enormes (boxworks) con celdas hexagonales y poligonales.
-Cortinajes cordados con estructuras separadas de la pared.
-Bandeados, anillos, cintas troqueladas…
-Estructuras de corriente, con finos dibujos ondulados de líneas de diferentes coloraciones de minerales movilizados por la disolución intergranular.
-Pequeños ventanales que asoman al exterior.
El reportaje fotográfico lo componen bellas imágenes tomadas por los excursionistas, especialmente las del amigo Enrique.
A continuación el reportaje del entusiasta e infatigable Jesús Mari.
JAIZKIBEL, los últimos acantilados
GRANKANTO, la escultura del océano
Jesús Mª Alquézar
El último eslabón de la costa guipuzcoana hacia el oriente se encuentra en el litoral del monte Jaizkibel. Son los acantilados más salvajes, con las geoformas más increíbles, enigmáticas, atormentadas, extrañas, desconocidas y mejor conservadas. Un escenario excepcional que sorprende por los parajes naturales que se encierran y se guardan celosamente en sus entrañas como tesoros secretos que se deben descubrir. En esta primera sugerencia la ruta de hoy se inicia junto a la Cantina JAIZKIBEL (punto kilométrico 4,6 de la carretera de Jaizkibel) para encontrar el primer relevante monumento, la gran escultura del océano, GRANKANTO.
El monte Jaizkibel, la alargada cadena que protege el corredor de Oarsoaldea, conserva en su vertiente norte el espacio más valorado de los litorales europeos, dado que guarda en su interior (con Ulia) delicadas joyas naturales que son poco conocidas, incluso para personas que viven en sus alrededores. Es una especie de museo vivo y natural, que es necesario conocer, para así, con conocimiento, consecuencia y en conciencia, valorar, conservar y proteger. Porque existe una amenaza, un proyecto de momento parado temporalmente, para destruir este escenario que supondría el mayor atentado ecológico jamás realizado.
Jaizkibel es en la actualidad un espacio designado como ZONA ESPECIAL DE CONSERVACIÓN (ZEC) dentro de la Red Europea NATURA 2000. Pero nos encontramos con que aspectos tan importantes en Europa como son la protección de la biodiversidad marina y la geodiversidad, están fuera de los objetivos de dichas ZEC. Aunque se está trabajando para que Jaizkibel-Ulia se considere Patrimonio Europeo de geología y biodiversidad marina y terrestre, hasta que no se consiga la protección, hay que estar vigilantes y desconfiar de los políticos, que salvo excepciones, no tienen sensibilidad alguna con el patrimonio Natural y hasta consideran que el impacto ambiental con la dársena exterior será mínimo, que es una gran mentira.
En esta excursión conoceremos “la ruta geológica de Víctor Hugo” dado que en su libro “Los Pirineos” escrito y publicado por primera vez en el año 1843, ya describía estos lugares. Con una narrativa insuperable, totalmente vigente en la actualidad, la obra y especialmente sus capítulos sobre Pasaia merecen su lectura.
DESDE LA CANTINA JAIZKIBEL
El itinerario comienza unos metros antes de la entrada a la Cantina Jaizkibel, punto kilométrico 4,6 de la carretera que une las poblaciones de Pasai Donibane y Hondarribia. Tomamos dirección noroeste hacia el caserío y su nueva construcción de KABITTE, de los pocos habitados en la zona. Junto a él observamos un mojón/placa que el grupo sanjuandarra ITXASMENDI colocó hace unos años en cada uno de los 18 caseríos de Donibane con los “bertsoak “ que en 1933 escribió IKUR, haciendo una glosa de cada uno de los que contaba la población entonces. Giramos a la derecha para pasar cerca de las ruinas del caserío LONDRES, no hace demasiados años, famoso por las magníficas cuajadas (mamias) que podían degustar todos los que llegaban a sus inmediaciones. Tras ascender unos pocos metros y dejar a la izquierda la cima de MITXITXOLA, junto a la cual se encuentra la geoforma popularmente conocida como SUKALDEA (bajo su cubierta se cocinaban las lapas y los percebes que se recogían en la costa cercana), toca descender en dirección a las ruinas del caserío BONAZTIETA (Buenos Aires), el único de los dieciocho caseríos anteriormente citados que cuando IKUR escribió sus composiciones, ya estaba deshabitado. Desde este punto se inicia un más que escarpado y dificultoso descenso, entre altos helechos, argomas y zarzas espesas; incluyendo varios pasos algo aéreos, hacia la espectacular y variada formación geológica de GRANKANTO, una de las más sobresalientes y bellas que se encuentran en el litoral. La erosión sobre la arenisca ha tallado una formación retorcida de aspecto lunático. El deportista deberá aproximarse a su base para emocionarse y sorprenderse con todo este conjunto descomunal, asomarse a sus arcos, salientes y ventanas y hasta trepar hasta la cresta para obtener encuadres fotográficos inimaginables. Es, sin duda, una alineación insospechada. Su estructura tipo “chevron”con grandes estratos de turbitas, con geoformas diversas de erosión, con colores que varían según la situación del sol, no tienen similitud en el mundo. Una serie de pequeñas regatas que forman los valles colgados, han configurado una espectacular morfología de acantilados. En muchas ocasiones los arroyos terminan en una catarata suspendida sobre el océano.
Para mí es un ola pétrea que se abalanza sobre el visitante. Sin embargo Victor Hugo, escribía: ”Detrás de mí una gran peña levantada representa un águila inmensa que se inclina sobre su nido, con dos garras colocadas sobre la montaña. Oscura y soberbia escultura del océano. Una franja de plata, delgada y resplandeciente, serpentea hasta perderse de vista al pie de la costa” (la regata Grankanto)
El espolón Grankanto cierra el barranco. Es una proa voluminosa que surge del mar. El montañero deberá remontar el ramal hasta alcanzar el alto Sanjuanjarri, tras pasar junto al tremendo roquedal del que recibe su nombre. Los acantilados volverán a sucederse para regocijo del explorador, pero serán cita de otra excursión. Ahora hay que continuar por ancho camino, al sur, para llegar hasta el más que ajetreado caserío Iñalurreta, actualmente el más alejado del centro urbano, que mantiene su actividad ya muy cerca de la carretera del “col”, donde se confluye con las balizas del Talaia bidea.
Ya por la carretera que desciende a Lezo, llegamos al punto de partida: la cantina Jaizkibel, en la que sentados a la sombra de una tupida arboleda, comentamos la grata experiencia vivida, hidratándonos con unos buenos “culines” de sidra y sus pintxos de chorizo y croquetas (especialidad de la casa), eso sí, después de habernos bebido litro y medio de agua por persona, a lo largo de esta mágica caminata alrededor de la formación geológica de Grankanto.
Longitud: 3,87 km
Duración de 1 hora 12 minutos horas, sin paradas. Pero el viaje exige más tiempo para la observación de las maravillas del recorrido, que ha supuesto un total de 3 horas 43 minutos.
Dificultad: La ruta la hemos catalogado como DIFICIL, ya que para llegar a estas extraordinarias geoformas ubicadas en formaciones rocosas de complejo acceso, no existen senderos en parte del entorno de la gran roca de Grankanto, o lo son de mucha pendiente, con suelo mojado, a veces embarrado y resbaladizo, y con abundante vegetación; además, algunos puntos en roca con cierta dificultad de paso.
Esta exploración es solo recomendable para aquellos amantes del medio natural que habituados al monte estén en buena forma física y siempre con la máxima prudencia y respeto a estas bellas y delicadas maravillas de la naturaleza.
Desnivel en ascenso acumulado de 226 m
Para mayor información, concienciación social y personal hacia este frágil y único escenario mundial, para su conservación y protección, sugiero a los lectores dos citas:
El libro “JAIZKIBEL Amaharri” , que se puede comprar en el club Vasco de Camping de San Sebastián
Y las rutas publicadas por esa misma asociación sobre el litoral del Jaizkibel y colgadas en la web www.vascodecamping.org
Mapa sugerido “Jaizkibel” 1/25000 de Imanol Goikoetxea. Edición 1994. DFG .Agotado. Se puede obtener copia en el CVCE.
Ahora facilitado por el amigo Josifano el doarama/video musical, al que el grupo de exploradores le agradecemos por su maravilloso montaje.
Finalmente, el extraordinario reportaje Grankanto en el blog de Carlos Bengoa
Al llevar varios dias de inversión térmica, portamos un medidor de partículas PM2.5, a fin de conocer la polución del aire durante la excursión. En los gráficos que se aportan se puede ver que los niveles de partículas superaban el límite recomendado por la Organización Mundial de la Salud (OMS) de 12 microgramos por metro cúbico de aire (color verde), situación que se mantendrá hasta que desaparezca el anticiclón que tenemos encima, y que al parecer no será hasta el próximo miércoles.
Es impresionante las maravillas de geoformas y estructuras rocosas que pudimos ver y fotografiar en cavidades colgadas en escarpes casi verticales.
Entre otras las siguientes:
-Geoformas con diseños escultóricos, originadas por procesos de disolución del cemento intergranular, destacando las formas alveolares, coraloides, celdas en panal de abejas, hojaldres enormes (boxworks) con celdas hexagonales y poligonales.
-Cortinajes cordados con estructuras separadas de la pared.
-Bandeados, anillos, cintas troqueladas…
-Estructuras de corriente, con finos dibujos ondulados de líneas de diferentes coloraciones de minerales movilizados por la disolución intergranular.
-Pequeños ventanales que asoman al exterior.
El reportaje fotográfico lo componen bellas imágenes tomadas por los excursionistas, especialmente las del amigo Enrique.
A continuación el reportaje del entusiasta e infatigable Jesús Mari.
JAIZKIBEL, los últimos acantilados
GRANKANTO, la escultura del océano
Jesús Mª Alquézar
El último eslabón de la costa guipuzcoana hacia el oriente se encuentra en el litoral del monte Jaizkibel. Son los acantilados más salvajes, con las geoformas más increíbles, enigmáticas, atormentadas, extrañas, desconocidas y mejor conservadas. Un escenario excepcional que sorprende por los parajes naturales que se encierran y se guardan celosamente en sus entrañas como tesoros secretos que se deben descubrir. En esta primera sugerencia la ruta de hoy se inicia junto a la Cantina JAIZKIBEL (punto kilométrico 4,6 de la carretera de Jaizkibel) para encontrar el primer relevante monumento, la gran escultura del océano, GRANKANTO.
El monte Jaizkibel, la alargada cadena que protege el corredor de Oarsoaldea, conserva en su vertiente norte el espacio más valorado de los litorales europeos, dado que guarda en su interior (con Ulia) delicadas joyas naturales que son poco conocidas, incluso para personas que viven en sus alrededores. Es una especie de museo vivo y natural, que es necesario conocer, para así, con conocimiento, consecuencia y en conciencia, valorar, conservar y proteger. Porque existe una amenaza, un proyecto de momento parado temporalmente, para destruir este escenario que supondría el mayor atentado ecológico jamás realizado.
Jaizkibel es en la actualidad un espacio designado como ZONA ESPECIAL DE CONSERVACIÓN (ZEC) dentro de la Red Europea NATURA 2000. Pero nos encontramos con que aspectos tan importantes en Europa como son la protección de la biodiversidad marina y la geodiversidad, están fuera de los objetivos de dichas ZEC. Aunque se está trabajando para que Jaizkibel-Ulia se considere Patrimonio Europeo de geología y biodiversidad marina y terrestre, hasta que no se consiga la protección, hay que estar vigilantes y desconfiar de los políticos, que salvo excepciones, no tienen sensibilidad alguna con el patrimonio Natural y hasta consideran que el impacto ambiental con la dársena exterior será mínimo, que es una gran mentira.
En esta excursión conoceremos “la ruta geológica de Víctor Hugo” dado que en su libro “Los Pirineos” escrito y publicado por primera vez en el año 1843, ya describía estos lugares. Con una narrativa insuperable, totalmente vigente en la actualidad, la obra y especialmente sus capítulos sobre Pasaia merecen su lectura.
DESDE LA CANTINA JAIZKIBEL
El itinerario comienza unos metros antes de la entrada a la Cantina Jaizkibel, punto kilométrico 4,6 de la carretera que une las poblaciones de Pasai Donibane y Hondarribia. Tomamos dirección noroeste hacia el caserío y su nueva construcción de KABITTE, de los pocos habitados en la zona. Junto a él observamos un mojón/placa que el grupo sanjuandarra ITXASMENDI colocó hace unos años en cada uno de los 18 caseríos de Donibane con los “bertsoak “ que en 1933 escribió IKUR, haciendo una glosa de cada uno de los que contaba la población entonces. Giramos a la derecha para pasar cerca de las ruinas del caserío LONDRES, no hace demasiados años, famoso por las magníficas cuajadas (mamias) que podían degustar todos los que llegaban a sus inmediaciones. Tras ascender unos pocos metros y dejar a la izquierda la cima de MITXITXOLA, junto a la cual se encuentra la geoforma popularmente conocida como SUKALDEA (bajo su cubierta se cocinaban las lapas y los percebes que se recogían en la costa cercana), toca descender en dirección a las ruinas del caserío BONAZTIETA (Buenos Aires), el único de los dieciocho caseríos anteriormente citados que cuando IKUR escribió sus composiciones, ya estaba deshabitado. Desde este punto se inicia un más que escarpado y dificultoso descenso, entre altos helechos, argomas y zarzas espesas; incluyendo varios pasos algo aéreos, hacia la espectacular y variada formación geológica de GRANKANTO, una de las más sobresalientes y bellas que se encuentran en el litoral. La erosión sobre la arenisca ha tallado una formación retorcida de aspecto lunático. El deportista deberá aproximarse a su base para emocionarse y sorprenderse con todo este conjunto descomunal, asomarse a sus arcos, salientes y ventanas y hasta trepar hasta la cresta para obtener encuadres fotográficos inimaginables. Es, sin duda, una alineación insospechada. Su estructura tipo “chevron”con grandes estratos de turbitas, con geoformas diversas de erosión, con colores que varían según la situación del sol, no tienen similitud en el mundo. Una serie de pequeñas regatas que forman los valles colgados, han configurado una espectacular morfología de acantilados. En muchas ocasiones los arroyos terminan en una catarata suspendida sobre el océano.
Para mí es un ola pétrea que se abalanza sobre el visitante. Sin embargo Victor Hugo, escribía: ”Detrás de mí una gran peña levantada representa un águila inmensa que se inclina sobre su nido, con dos garras colocadas sobre la montaña. Oscura y soberbia escultura del océano. Una franja de plata, delgada y resplandeciente, serpentea hasta perderse de vista al pie de la costa” (la regata Grankanto)
El espolón Grankanto cierra el barranco. Es una proa voluminosa que surge del mar. El montañero deberá remontar el ramal hasta alcanzar el alto Sanjuanjarri, tras pasar junto al tremendo roquedal del que recibe su nombre. Los acantilados volverán a sucederse para regocijo del explorador, pero serán cita de otra excursión. Ahora hay que continuar por ancho camino, al sur, para llegar hasta el más que ajetreado caserío Iñalurreta, actualmente el más alejado del centro urbano, que mantiene su actividad ya muy cerca de la carretera del “col”, donde se confluye con las balizas del Talaia bidea.
Ya por la carretera que desciende a Lezo, llegamos al punto de partida: la cantina Jaizkibel, en la que sentados a la sombra de una tupida arboleda, comentamos la grata experiencia vivida, hidratándonos con unos buenos “culines” de sidra y sus pintxos de chorizo y croquetas (especialidad de la casa), eso sí, después de habernos bebido litro y medio de agua por persona, a lo largo de esta mágica caminata alrededor de la formación geológica de Grankanto.
Longitud: 3,87 km
Duración de 1 hora 12 minutos horas, sin paradas. Pero el viaje exige más tiempo para la observación de las maravillas del recorrido, que ha supuesto un total de 3 horas 43 minutos.
Dificultad: La ruta la hemos catalogado como DIFICIL, ya que para llegar a estas extraordinarias geoformas ubicadas en formaciones rocosas de complejo acceso, no existen senderos en parte del entorno de la gran roca de Grankanto, o lo son de mucha pendiente, con suelo mojado, a veces embarrado y resbaladizo, y con abundante vegetación; además, algunos puntos en roca con cierta dificultad de paso.
Esta exploración es solo recomendable para aquellos amantes del medio natural que habituados al monte estén en buena forma física y siempre con la máxima prudencia y respeto a estas bellas y delicadas maravillas de la naturaleza.
Desnivel en ascenso acumulado de 226 m
Para mayor información, concienciación social y personal hacia este frágil y único escenario mundial, para su conservación y protección, sugiero a los lectores dos citas:
El libro “JAIZKIBEL Amaharri” , que se puede comprar en el club Vasco de Camping de San Sebastián
Y las rutas publicadas por esa misma asociación sobre el litoral del Jaizkibel y colgadas en la web www.vascodecamping.org
Mapa sugerido “Jaizkibel” 1/25000 de Imanol Goikoetxea. Edición 1994. DFG .Agotado. Se puede obtener copia en el CVCE.
Ahora facilitado por el amigo Josifano el doarama/video musical, al que el grupo de exploradores le agradecemos por su maravilloso montaje.
Finalmente, el extraordinario reportaje Grankanto en el blog de Carlos Bengoa
Waypoints
Comments (8)
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Esta bien dar a conocer esta maravilla
Pero llegado el momento tanta difusión no se si es bueno
Como siempre más fotos de alquezar y compañía
Son estas las geoformas?
Hice una salida para ver geoformas en la zona de Guadalupe, pero esta no tiene que ver por su variacion a cada cual mejor, buenas fotos de artistas con las camaras demostrando la grandiosidad que tenemos tan cerca y no lo sabemos.
Un buen comentario como siempre el de amigo Carlos
Enhorabuena a todos
Se te saluda de nuevo trintxerpe ka:
Entre no difundir nada de estas espectaculares cavidades y geoformas naturales, que las tenemos tan cerca y a la vez tan lejos de casa, o hacerlo frecuentemente como lo hacen en Iparralde en las televisiones locales y regionales, difundiendo en video las bellezas de Jaizkibel al público en general, nosotros hemos optado por hacerlo aquí selectivamente, invitando a los amantes de la naturaleza, como lo hemos vuelto a hacer esta vez con el comentario que copio literalmente del texto del track:
Esta exploración es solo recomendable para aquellos amantes del medio natural que habituados al monte estén en buena forma física y siempre con la máxima prudencia y respeto a estas bellas y delicadas maravillas de la naturaleza.
Muy agradecido Javier por tus buenas palabras.
A ver cuándo te animas a alguna salida, para asi recordar excursiones anteriores.
Saludos
Al final del texto he añadido el enlace del magnífico reportaje de la excursión en el blog donosticity.org de nuestro acompañante Carlos Bengoa.
Si cada nuevo sitio que se localiza no se comenta es evidente que solo lo conocerán muy pocas personas y su conservación será buena. Si se divulga sin ningún control hay más peligro de deterioro. Lo más acertado probablemente será formar y mentalizar a la gente interesada y así controlar sus visitas para respetar y conservar estos espacios inigualables.
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Information
Easy to follow
Scenery
Difficult
Recorrido y entorno muy bonito, muy bien explicado lo único desagradable en el primer tramo en varias geoformas, algún indeseable ha puesto su nombre
Para ir con perro?