GR 222. 5ª. Inca - Lluc.

Hoy hemos reanudado la ruta donde la dejamos ayer, frente al horno de Can Lluís, con la señal del GR 222 orientada hacia una escalera que lleva a la Calle de Escorca, calle paralela a la carretera Ma-2130 en la que evidentemente hay mucho menos tráfico. Al acabar esta vía el asfalto queda encajonado entre paredes de piedra para luego dar paso a un corto tramo de tierra por el Camí de l'Olivar de Can Ripoll, teniendo que cruzar la carretera a la altura de una cruz de término.

Por la derecha del Camí del Pedregar se encuentra la gravera de Ca na Rotgeta, abandonada; al lado contrario ya hay vistas sobre Selva y la Tramontana. La baliza de madera que está a la derecha junto a la pared pasa algo desaparecida; se gira a la izquierda por un camino de tierra y al poco nos topamos con el torrent de Massanella. En caso de que lleve agua, tiene un bonito conjunto de piedras pasaderas para vadearlo.

A Selva se llega por el Camí vell de Inca, por la parte trasera de las casas de Son Bonet, antigua casa señorial, y a su lado la Font de Valella de la que se tienen pocos datos históricos aparte de una actuación llevada en ella en 1837. Es una fuente cubierta con una rueda metálica con la que se extraía el agua. Junto a ésta se encuentra el S'Hort de Ca's Jurat. El gran platero o plátano de sombra que allí se encuentra (Plátanus Hispanica)está declarado "Árbol singular", catalogado en el año 2010. El GR continúa bajo el paseo de la carretera, de tierra. Cuando se llega a las primeras casas se pueden visitar los lavaderos que quedan a una veintena de metros en bajada por la derecha. Si bien una reja los cierra, desde fuera son perfectamente visibles, teniendo a la derecha un gran abrevadero. La fuente de Camarata, de la que manaba agua, tiene su perímetro protegido con una barandilla de hierro, pero es posible bajar hasta su parte más baja. Su agua llega a los lavaderos que hemos visto.

Tras visitar la fachada de la casa señorial de Son Vic, el GR pasa por delante de Son Arnau, casas del siglo XVII y XVIII, donde parece que se situaba la posada de los peregrinos que iban al monasterio de Nuestra Señora de Lluc. En las casas del fondo, las número 5 y 7, tienen pintadas las tejas de su voladizo y una hornacina con la Virgen y el Niño. Las tejas pintadas son un vestigio de la antigüedad como un rito de coronación de la casa. Son famosas las tejas pintadas de Fornalutx, municipio que tiene el museo de Can Xoroy dedicado a ellas; pueden verse también en Marratxinet, Biniarroi, Biniaraix y Esporles.

Ya por tierra por el Camí antic de Caimari, al pasar por la curva de Cas Jurat hay buenas vistas sobre esta pedanía de Selva y parte de la Sierra, destacando la figura cónica del Puig de n'Escuder. A la entrada de la población por la izquierda hay una cruz de término construida en 1888, obra del escultor Lorenzo Ferrer. En el capitel aparece la fecha y el nombre de su patrocinador, Pablo Morro Pons.

De arquitectura austera, la Iglesia de la Inmaculada Concepción de finales del siglo XIX se ubica junto a la Plaza Mayor. Ya fuera de la población el conjunto de las Rotes de Caimari con sus innumerables bancales en las faldas de los Puig de Sa Creu y de n'Escuder, es uno de los lugares más fotogénicos de Mallorca. Formaban parte de las tierras comunales de Selva pero a mediados del siglo XIX fueron vendidas a los vecinos que se encargaron de crear este lugar tan pintoresco. A partir del Mirador de Ses Rotes nos adentramos en la auténtica Sierra y nos olvidamos de la carretera hasta llegar a Lluc, salvo para cruzarla.

Por la derecha pasamos bajo el alto peñasco de Cavall Bernat o de la Filosa de la Mare de Deu, roca utilizada por los escaladores; por la izquierda las cuevas del Escuder, con sus leyendas¹ algo largas para redactarlas aquí. Más adelante la roca grande junto al torrente es el códol d'en Seda, una gran piedra, donde la tradición dice, que con tres piedrecitas, hay que acertar alguna en uno de sus agujeros. Así se concederá un deseo o se conseguirá pareja². Las raíces de los árboles la han roto pero aún quedan algunos agujeros por si queremos probar suerte.

Al cruzar la carretera empezamos la larga subida empedrada y escalonada de Sa Costa Llarga pasando frente a las casas de Son Canta, y en nada tomamos el sendero en bajada sin pisar el asfalto que pasa cerca del área recreativa de Sa Coveta Negra. Se pasa por un túnel, siempre que el torrente no lleve agua, continuando por una cómoda pista ancha.

Por el torrente hay una curiosa balsa para el ganado y metros más adelante, protegido por unos cables acerados, está el Avenc dels Cans, de -103'5m de profundo³. En la siguiente bifurcación giramos a la derecha y comienza una fuerte subida por hormigón; el camino del lado izquierdo es el que lleva al Pas de n'Arbona, paso que da acceso a un buen puñado de rutas por esta parte de la Sierra.

Superada la gran subida pasamos por otro largo tramo empedrado, Sa Llangonissa, que acaba en el mirador homónimo y a unos cientos de metros está el mirador de Sa Bretxa Vella, con la carretera debajo y el lugar donde se ubica la leyenda conocida como el Salt de Sa Bella Dona. Este collado llamado el Pas des Grau es la mayor altura de toda ruta. Vamos descendiendo ligeramente hacia el Pont des Guix⁴, cruzamos el Coll de Sa Batalla y cogemos la primera calle en bajada paralela a la carretera, para en su final seguir las señales y llegar al Refugio de Son Amer. Era una antigua posesión llamada Puig Ferrer y es propiedad del Consell Insular de Mallorca desde 1999. Desde el estupendo Mirador des Molí hay buenas vistas sobre el Vall de Josafat.

Al lado del Camí de Son Amer está el Molí de Lluc, cuya construcción se autorizó en el año de 1302 por la Orden del Temple, propietaria de estas tierras. A finales del siglo XVII se instaló un aserradero de troncos.

Accedemos al santuario por la Plaza de los Peregrinos, con el Ayuntamiento a la izquierda y els Portxets a la derecha, que estaban destinados a dar alojamiento a los peregrinos y a sus animales.La Basílica de la Mare de Deu es la meta de este GR 222 que hemos realizado en cinco estapas desde Son Servera, algo más de 110km tras haber recorrido cuatro comarcas de la isla por caminos de tierra, carreteras, costa y montaña.

Compañero de ruta, Pino.

Páginas consultadas y para saber más:

1.-Gabriel Janer Manila (1984) Las leyendas de las tierras de Lluc.

2.-Geocaching.com.

3.-https://bttersmallorca.com/2020/04/10/avenc-dels-cans-1035m/

4.-https://caminsdepedra.conselldemallorca.cat/ruta-arta-lluc-gr-222