Hayedo de Canseco
near Canseco, Castilla y León (España)
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Trail photos
Itinerary description
Punto de partida: Canseco.
Espacio protegido: Reserva de la Biosfera Los Argüellos.
Época recomendada: Otoño.
Elementos de interés: Hayedo y vistas de la Sierra Mediodía.
Tipo de camino: Pista de tierra.
Servicios: Los establecimientos más cercanos se encuentran en Cármenes.
Descripción del itinerario.
Una fría mañana de noviembre me dirijo hacia la localidad de Canseco donde a tres kilómetros de dicha localidad, surge una pista que nos llevará hacia el hayedo de Canseco, no tan conocido como otros de la provincia pero sí igual de bello.
Enclavado en la Reserva de la Biosfera de Los Argüellos, entre Pontedo, Canseco y la sierra de Mediodía se ubica uno de los faedos más bonitos que podemos ver en nuestra provincia, a pesar de que no cuente con la fama que tienen el de Ciñera u Orzonaga.
Partiremos pues, del puente que cruza el río Torío muy cerca del puente romano de Canseco (figuras 1, 2 y 4). Aquí podremos dejar el coche evitando así tener que dejarlo en Canseco eludiendo los tres kilómetros que hay desde este punto hasta Canseco.
Caminando en ligero ascenso, tendremos unas perfectas vistas de la sierra Mediodía (figura 3).
La pista es de gran anchura por la que pueden pasar hasta un 4x4 ya que no cuenta con piedras ni se suele embarrar. El camino no tiene pérdida. Deberemos seguir la pista hasta donde acaba (kilómetro 2,2).
Las primera hayas las podremos ver en el kilómetro 1,1. Éstas aún conservaban hojas en sus copas (figuras 5 y 6). Las hayas, son de la familia de las fagáceas, de copas muy tupidas que dejan pasar muy poca luz, por lo que no se desarrolla apenas sotobosque; por eso pasear por ellas se asemeja a una alfombra verde en primavera y dorada en otoño.
Ascendiendo por el camino (figura 7), entraremos ya de lleno en el hayedo de Canseco, donde las hayas y el regato del monte Bodón serán los protagonistas. Como muestra el perfil de la ruta, el ascenso es considerable, ya que tendremos que subir constantemente (figuras de la 8 a la 14).
El camino, a pesar de que en las fotos no se pueda apreciar bien por las hojas, es muy intuitivo, más aún por el arroyo, el cual nos acompañará a lo largo de los 2,2 kilómetros de hayedo (figuras 15, 16 y 17).
Concluiremos la ascensión donde se apartan las hayas, pues el matorral y la ya cercana sierra de Mediodía se abrirán paso en un paisaje despejado de hayas tras salir del bosque (figuras 18, 19 y 20).
Existe la posibilidad de hacer una ruta circular como reflejan algunos tracks. Yo opté por limitarme a conocer este precioso hayedo, realizando la vuelta por el mismo camino.
Impresiones.
El hayedo de Canseco es sencillamente una belleza. Se encuentra ubicado a umbría en la cara norte de la sierra Mediodía. El regato del monte Bodón que lo baña, le otorga un aspecto de cuento especialmente durante los meses de otoño. Es cuando el hayedo muestra su mayor esplendor.
Espacio protegido: Reserva de la Biosfera Los Argüellos.
Época recomendada: Otoño.
Elementos de interés: Hayedo y vistas de la Sierra Mediodía.
Tipo de camino: Pista de tierra.
Servicios: Los establecimientos más cercanos se encuentran en Cármenes.
Descripción del itinerario.
Una fría mañana de noviembre me dirijo hacia la localidad de Canseco donde a tres kilómetros de dicha localidad, surge una pista que nos llevará hacia el hayedo de Canseco, no tan conocido como otros de la provincia pero sí igual de bello.
Enclavado en la Reserva de la Biosfera de Los Argüellos, entre Pontedo, Canseco y la sierra de Mediodía se ubica uno de los faedos más bonitos que podemos ver en nuestra provincia, a pesar de que no cuente con la fama que tienen el de Ciñera u Orzonaga.
Partiremos pues, del puente que cruza el río Torío muy cerca del puente romano de Canseco (figuras 1, 2 y 4). Aquí podremos dejar el coche evitando así tener que dejarlo en Canseco eludiendo los tres kilómetros que hay desde este punto hasta Canseco.
Caminando en ligero ascenso, tendremos unas perfectas vistas de la sierra Mediodía (figura 3).
La pista es de gran anchura por la que pueden pasar hasta un 4x4 ya que no cuenta con piedras ni se suele embarrar. El camino no tiene pérdida. Deberemos seguir la pista hasta donde acaba (kilómetro 2,2).
Las primera hayas las podremos ver en el kilómetro 1,1. Éstas aún conservaban hojas en sus copas (figuras 5 y 6). Las hayas, son de la familia de las fagáceas, de copas muy tupidas que dejan pasar muy poca luz, por lo que no se desarrolla apenas sotobosque; por eso pasear por ellas se asemeja a una alfombra verde en primavera y dorada en otoño.
Ascendiendo por el camino (figura 7), entraremos ya de lleno en el hayedo de Canseco, donde las hayas y el regato del monte Bodón serán los protagonistas. Como muestra el perfil de la ruta, el ascenso es considerable, ya que tendremos que subir constantemente (figuras de la 8 a la 14).
El camino, a pesar de que en las fotos no se pueda apreciar bien por las hojas, es muy intuitivo, más aún por el arroyo, el cual nos acompañará a lo largo de los 2,2 kilómetros de hayedo (figuras 15, 16 y 17).
Concluiremos la ascensión donde se apartan las hayas, pues el matorral y la ya cercana sierra de Mediodía se abrirán paso en un paisaje despejado de hayas tras salir del bosque (figuras 18, 19 y 20).
Existe la posibilidad de hacer una ruta circular como reflejan algunos tracks. Yo opté por limitarme a conocer este precioso hayedo, realizando la vuelta por el mismo camino.
Impresiones.
El hayedo de Canseco es sencillamente una belleza. Se encuentra ubicado a umbría en la cara norte de la sierra Mediodía. El regato del monte Bodón que lo baña, le otorga un aspecto de cuento especialmente durante los meses de otoño. Es cuando el hayedo muestra su mayor esplendor.
Waypoints
Comments (2)
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Cuidado con los perros,tuve que darme la vuelta en el primer kilometro,estaba el ganado suelto y no me dejaban pasar los mastines,venian hacia mi.media vuelta y para casa.una pena
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Information
Easy to follow
Scenery
Easy
Ruta sencilla, la parte del descenso un tanto lenta porque el terreno no está del todo limpio y hay que pelear con las ramas. Vistas increíbles.