Hayedo de Orzonaga

Un descubrimiento casi al azar convertido en una de las mejores rutas que hemos realizado en otoño. Impresionante el colorido rojizo de un lugar no muy conocido (solo nos encontramos dos grupos realizando la ruta).

Las previsiones daban lluvia constante durante toda la mañana pero nos respetó bastante. Aparcamos el coche en el pequeño pueblo de Orzonaga, situado cerca de Naredo de Fenar, lugar donde estábamos alojados y también cerca de Vegacervera y la Cueva de Valporquero.

Comenzamos la ruta siguiendo las indicaciones del trek "La Mata del Té", ruta con la que compartiremos el inicio de nuestro paseo. Empezamos ascendiendo por un precioso robledal bajo un chispeo constante pero poco molesto. Pronto nos encontramos a nuestra derecha un par de miradores naturales sobre el pueblo.

Al llegar a un cruce con otros caminos rurales que siguen por el otro lado del valle, nosotros continuamos por la derecha hasta alcanzar el punto más alto de la ruta. La ascensión no es muy dura, se lleva bastante bien.

El camino se abre a la izquierda y tenemos unas bonitas vistas de los helechos colorados en primer plano sobre el bosque que se pierde más lejos. En otro cruce donde hay una pequeña caseta pública que parece un refugio con mesas para picnic, seguimos de frente enfilándonos por fin a la entrada del hayedo después de empezar a descender paulatínamente.

El hayedo no es muy extenso y se divide en un par de extensiones que atravesamos. Le hemos cogido en el punto justo del otoño y está esplendoroso. Fantásticas imágenes al adentrarnos en el bosque. En el claro que se abre en el hayedo hay una mesa de picnic perfecta para hacer una pequeña parada con vistas sobre el valle del pueblo de Orzonaga.

Una vez salimos del hayedo, solo tenemos que enlazar con la pista que lleva fácilmente de nuevo al pueblo.