Hormiguita: Circular Pesquerín - Cerro Torre - Cerro Diablo - El Cerralín (Asturias)
near Pesquerín, Asturias (España)
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Trail photos
Itinerary description
Comenzamos a 380 metros de altitud, en Pesquerín, bonita y colorida aldea perteneciente a la parroquia de Villamayor, en el Concejo de Piloña. Junto a las primeras casas, en el cruce tomaremos la pista hormigonada que, con dirección suroeste, nos hace ganar altura rápidamente dejándonos una espectacular vista del amplio valle formado por el Río Piloña con la Sierra del Sueve al norte.
Cabañas, praos y cercados nos rodean según vamos subiendo por la pista. Dejamos la Fuente Bobia a nuestra izquierda y seguimos el pindio ascenso con algunas curvas de herradura hasta la entalladura entre los picos Forcos y Foyos. Desde aquí, a nuestra izquierda queda el Reguero de las Cadenas y Peña Priede por detrás.
Descendemos unos metros y enseguida dejamos la buena pista para tomar a nuestra derecha un sendero que nos elevará hasta la cresta desde las ruinas de la Majada de la Muezca. Este tramo se hace algo pesado, se trata de un estrecho sendero con bastante inclinación, en muchos puntos con algo de vegetación que hace algo más que cosquillas en las piernas y un oscuro barrizal que parece no tener fin, donde la mayor dificultad es buscar la mejor manera de seguir avanzando.
Ya en las peñas de los Picos de Abra nos paramos unos minutos a contemplar en el horizonte el Macizo Occidental de los Picos de Europa, la Sierra de Beza, Mota Cetín, Pierzu, Llambria y Sierra de Aves con el Pico Vizcares destacando. Recorremos el último tramo por la cresta hasta el geodésico del Cerru Torre. A su vera encontramos su curiosa cruz y un belén. Desde aquí podemos contemplar la Sierra de Pesquerín al completo: desde el Cantu de San Pedro hasta el Cerru Niañu, pasando por el Cerru Tebrandi. Al norte: Fariu, el Sueve, Monfrechu, Hibeo y Cuera. Al oeste: PeñaMayor, Pico Mua y Sierra del Aramo. A nuestro lado el valle del Río Pequeño, Cerru el Tombu y el Pico Canto Cobil. Continuamos por la cima herbosa para acercarnos al Cerru Diablu o Peña la Riestra, donde nos sentamos a respirar un ratín.
El descenso lo hacemos por terreno de pastos, que en ocasiones está invadido de cotoya, pero que no supone impedimento ninguno hasta llegar a las cabañas de El Cerralín. Aquí enlazamos con la pista que abandonamos para hacer cumbre en el Cerrru Torre y Diablu.
Tomamos la pista a la izquierda para regresar, pasamos junto a la Fuente Los Praixones y recorremos tranquilamente disfrutando de la vista del valle del Río Color por la falda de la Sierra de Pesquerín hasta un colladín antes de llegar a la Muezca, nos desviamos unos minutos para asomarnos a un pequeño montículo enfrentado al Pico La Pantorra. Al otro lado del valle tenemos la Sierra de la Frecha seguida de la Sierra de Bodes por donde discurre la GR-105. Volvemos sobre nuestros pasos dejando atrás una lagunilla. Continuando por la pista, dirección norte, regresamos a Pesquerín.
Ruta guapa y fácil para hacer una rápida escapada, las vistas que nos ofrece este cerro son un espectáculo teniendo en cuenta a la altitud que nos encontramos.
Cabañas, praos y cercados nos rodean según vamos subiendo por la pista. Dejamos la Fuente Bobia a nuestra izquierda y seguimos el pindio ascenso con algunas curvas de herradura hasta la entalladura entre los picos Forcos y Foyos. Desde aquí, a nuestra izquierda queda el Reguero de las Cadenas y Peña Priede por detrás.
Descendemos unos metros y enseguida dejamos la buena pista para tomar a nuestra derecha un sendero que nos elevará hasta la cresta desde las ruinas de la Majada de la Muezca. Este tramo se hace algo pesado, se trata de un estrecho sendero con bastante inclinación, en muchos puntos con algo de vegetación que hace algo más que cosquillas en las piernas y un oscuro barrizal que parece no tener fin, donde la mayor dificultad es buscar la mejor manera de seguir avanzando.
Ya en las peñas de los Picos de Abra nos paramos unos minutos a contemplar en el horizonte el Macizo Occidental de los Picos de Europa, la Sierra de Beza, Mota Cetín, Pierzu, Llambria y Sierra de Aves con el Pico Vizcares destacando. Recorremos el último tramo por la cresta hasta el geodésico del Cerru Torre. A su vera encontramos su curiosa cruz y un belén. Desde aquí podemos contemplar la Sierra de Pesquerín al completo: desde el Cantu de San Pedro hasta el Cerru Niañu, pasando por el Cerru Tebrandi. Al norte: Fariu, el Sueve, Monfrechu, Hibeo y Cuera. Al oeste: PeñaMayor, Pico Mua y Sierra del Aramo. A nuestro lado el valle del Río Pequeño, Cerru el Tombu y el Pico Canto Cobil. Continuamos por la cima herbosa para acercarnos al Cerru Diablu o Peña la Riestra, donde nos sentamos a respirar un ratín.
El descenso lo hacemos por terreno de pastos, que en ocasiones está invadido de cotoya, pero que no supone impedimento ninguno hasta llegar a las cabañas de El Cerralín. Aquí enlazamos con la pista que abandonamos para hacer cumbre en el Cerrru Torre y Diablu.
Tomamos la pista a la izquierda para regresar, pasamos junto a la Fuente Los Praixones y recorremos tranquilamente disfrutando de la vista del valle del Río Color por la falda de la Sierra de Pesquerín hasta un colladín antes de llegar a la Muezca, nos desviamos unos minutos para asomarnos a un pequeño montículo enfrentado al Pico La Pantorra. Al otro lado del valle tenemos la Sierra de la Frecha seguida de la Sierra de Bodes por donde discurre la GR-105. Volvemos sobre nuestros pasos dejando atrás una lagunilla. Continuando por la pista, dirección norte, regresamos a Pesquerín.
Ruta guapa y fácil para hacer una rápida escapada, las vistas que nos ofrece este cerro son un espectáculo teniendo en cuenta a la altitud que nos encontramos.
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Comments (1)
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Un entorno muy bonito. Hemos querido completar esta ruta en enero de 2021, pero al haber algo de nieve y bastante hielo en los tramos de pista que nos ralentizaban, además de riesgo contante de caídas, sólo hemos hecho parte de ella: de Pesquerían hasta Cerralín, evitando ambos cerros. El lado positivo, los bonitos paisajes nevados. Y otro aspecto positivo más: que volveremos pronto de nuevo para hollar los cerros también.