Hotel Can Boix - Roc de Cogul (100 Cims FEEC) - Casa del Corb - Sant Honorat (100 Cims FEEC Essencial) 2x100 Cims FEEC

Lo primero sería decir que si tienes vértigo muy probablemente ésta no sea tu ruta, y por supuesto si está lloviendo o el terreno mojado y ni que decir tiene con hielo, ni se te ocurra hacerla.
Aunque tengo que confesar que nos han cautivado estas grandes paredes, en muchas ocasiones nos ha recordado a la montaña mágica de Montserrat y es que sus grandes rocas de formas redondeadas son muy parecidas.
Comenzamos muy cerca del Hotel Can Boix, muy cerca de Peramola en la comarca del Alt Urgell, y hay que decir que este hotel tiene una pinta espectacular, ya había visto fotos pero es que la ruta pasa por el medio y es precioso, así que para comenzar no está nada mal.
Hoy la idea es hacer un doblete de 100 Cims de la FEEC, ese gran reto que hace años que vamos haciendo, y una vez pasamos el Hotel Can Boix ya nos dirigimos al primero de los grandes objetivos del día de hoy, el Roc de Cogul.
La subida ya es continuada y el sendero va subiendo por el bosque, a esta hora hace fresco, una temperatura ideal para caminar, no será lo mismo en verano esta ruta ya que es una zona muy calurosa en época estival, hay que tenerlo en cuenta.
Llegamos al punto de ida y vuelta al Roc de Cogul, Quatre Camins, y desde allí hay unos 600 metros hasta la cima, las vistas ya son más que espectaculares, hay una última rampa bastante inclinada pero que se hace muy bien, que espectáculo.
Llegamos a la cima de nuestro primer objetivo de hoy, el Roc de Cogul, supera todas las expectativas, hay un mar de nubes que hacen de las vistas una postal impresionante, no esperábamos esta maravilla, siempre nos sorprendemos pero es que este gran reto de hacer els 100 Cims de la FEEC tiene estos lugares tan maravillosos, y ésta es una cima fácil y que con un mínimo de esfuerzo para gente acostumbrada a la montaña no supone ningún problema, nos ha encantado.
Deshacemos nuestros pasos hasta Quatre Camins y continuamos hacia las Roques del Corb i Sant Honorat, que veíamos desde la cima del Roc del Cogul y que parecían inaccesibles.
Estas rocas tan impresionantes tienen infinidad de lugares para visitar, pero tenemos que escoger y seguramente nos dejamos lugares preciosos por ver, como la Ermita de Sant Salvador del Corb, o la Agulla del Corb, e incluso para los más atrevidos la Roca del Corb, pero no podemos visitar todo en un día, así que después de visitar el Forat del Corb (mucho cuidado de no arrimarse mucho al borde) llegamos a un mirador natural de las rocas de Sant Honorat, empieza el gran espectáculo, simplemente delicioso, se nos cae la baba.
Poco después en un cruce seguiremos las marcas amarillas y azules para dirigirnos a la casa del Corb, una vivienda construida dentro de una balma, donde todavía vivían a principios del siglo XX, e incluso en el interior se conserva un horno de pan.
Después de visitar el interior de la casa del Corb continuamos siguiendo las señales amarillas y azules que nos llevan a pasar por un tramo equipado, es un tramo donde unas cadenas nos ayudan a pasar un tramo que no es complicado pero que estas cadenas nos dan seguridad, se agradece.
Después de las cadenas llegamos al Corral del Corb, que según naturalocal.net
“Esta edificación nos transporta a un pasado agrícola no muy lejano, donde se utilizaba como refugio para guardar el ganado y protegerlo de las inclemencias del tiempo”
Seguimos rodeando estas grandes paredes, justo debajo de la Roca del Corb, que hoy no visitaremos, y en un cruce seguimos las indicaciones hacia el Coll de Mur.
El Coll de Mur es el punto donde comenzamos el tramo más aéreo de la ruta, según vas llegando ves por donde tenemos que caminar y te preguntas, ¿de verdad tenemos que pasar por ahÍ? Pues sí, para empezar un flanqueo de roca equipado con tramos de cadenas, sin complicaciones pero con caída a nuestra derecha, hay que ir tranquilos y no habrá problemas, después de las cadenas caminamos por las rocas, he de reconocer que no me manejo bien en este terreno, con pisada firme y sobre todo tranquilo vamos flanqueando las enormes paredes.
Llegamos a otro excelente mirador al borde de otra roca enorme, y desde aquí nos dirigimos al Barranc de San Honorat, al cual llegamos y vemos por donde caminaremos al otro lado del barranco, parece imposible, ¿hay espacio para caminar por ahí? pues si, cuando pasas al otro lado puedes caminar, aunque impresiona la caída que tienes a tu izquierda, mirada en los pasos que das y hacia adelante, miras por donde has venido y no te lo puedes creer, está siendo intenso este tramo.
Seguimos ahora ya si por sendero más definido y después de dos miradores más llegaremos al punto de ida y vuelta al Cim de Sant Honorat, ahora volvemos a subir decididamente por terreno pedregoso hasta el Coll de Sant Honorat.
Desde el Coll de Sant Honorat seguimos subiendo y subiendo, por sendero, tramos de roca, miradores, algo espectacular de verdad, hasta llegar ya por fin al Pla de Sant Honorat, una planicie en lo más alto de estas maravillosas Roques de San Honorat, otro mirador increíble a unos 200 metros que ya no sabemos cual es más bonito, volvemos del mirador y llegamos a la ermita de Sant Honorat, ahora en ruinas pero que seguro que en otro tiempo tuvo momentos de gloria.
Poco después de la ermita llegamos por sendero definido al punto más alto de les Roques de Sant Honorat, y el punto donde la FEEC marca el Cim de San Honorat, pero que carece de vistas, un poste de madera nos indica que estamos en la cima, pero muy cerca de allí, a tan solo unos metros tenemos el plato fuerte de la ruta, el mirador de Sant Honorat…..
Te deja sin aliento, unas maravillosas vistas invaden tu mente, no sabes donde mirar, el Pantà d’Oliana, las maravillosas crestas que rodean a la Valldan, el Cogulló de Turp, el Cadí, el Puig de les Morreres, el Puig Sobirà, parte de la Cerdanya ya teñida de blanco, y por el otro lado la inconfundible Serra de Mont-Roig con la Pala Alta, y allí al lado la cima de Lo Coscollet.
Es para estar allí un buen rato en silencio y disfrutar, pocos momentos en tu vida vas a tener la paz que te dan estos maravillosos lugares.
Con mucha pena vamos deshaciendo nuestros pasos, volvemos a pasar por el Coll de Sant Honorat y decididamente bajamos por dentro del bosque, vamos dejando atrás las grandes paredes y nos acercamos poco a poco al final de esta gran ruta.
Cuando ya hemos bajado todo el desnivel llegamos al Clot de la Font Viva, y decidimos ir a visitar la Font Viva, seguimos el Torrent de la Font Viva y llegamos a un puente de hierro, lamentablemente no vimos un sendero que según el mapa desde el puente de hierro nos llevaría a la Font Viva, así que llegamos al principio de una canalización que vamos siguiendo, un tubo de plástico del todo anti estético que canaliza el agua del Torrent de la Font Viva.
En este punto nos damos la vuelta y ahora ya si que vamos llegando al final de esta tremenda ruta, continuamos por la garganta que forma el Torrent de la Font Viva hasta casi llegar de nuevo al Hotel Can Boix, donde vemos que termina esta canalización de agua.
Ya terminamos esta ruta, es preciosa, nos ha encantado, estas grandes rocas nos han cautivado y nos han quedado muchos rincones por visitar, como la Font Viva, la Ermita de Sant Salvador del Corb, o la Agulla del Corb, así que tendremos que volver.