Humión - Flor y Pico Mancubo desde Orbañanos: Parque Natural Montes Obarenes-San Zadornil

Nos acercamos a Orbañanoz, pequeño pueblo del Valle de Tobalina, para hacer tres cimas del Parque Natural Montes Obarenes-San Zadornil. Llegamos al pueblo por la carretera BU-530, pasando justo por un meandro muy cerrado que describe el río Ebro a la altura de la ya cerrada desde el año 2012 Central Nuclear de Sta. María de Garoña, en funcionamiento durante 42 años. Fue inaugurada en el año 1971. En Orbañanos hay un parking habilitado con un panel informativo y una fuente, donde comenzaremos nuestra ruta hacia el Humión.
Tomamos el camino perfectamente señalizado y balizado con marcas blancas-violetas que en el primer poste indicador marcan Bozoo y Pico Mancubo, sin embargo vamos hacia la derecha para primero subir al Humíón. Pronto nos encontramos con unos depósitos de agua que abastecen al pueblo, seguimos el camino que más adelante debemos abandonar, hay un poste indicador y seguimos por el PR-BU 111: Sendero del Humión y Portillo de Jarillas. En todo momento seguiremos las marcas blanco-amarillas. La senda es estrella y caminamos por un bosque de pinos, bojes y algún que otro madroño, llegamos al alto de Orbaños y ahí la senda entra en una especie de "tunel" donde disfrutamos de un bosque de encinas y hayas hasta llegar al primer collado desde donde ya tenemos las primeras panorámicas del valle. El desnivel a superar en este primer tramo es considerable y no da tregua hasta el portillo de Jarillas, esto es alrededor de los 3,35 Km del inicio. Importante señalar que sobre los 2 Km desde el inicio hay una desviación a una fuente, la Fuente La Asnilla a 200 m de la senda y señalada con un poste. Llegamos al Portillo de Jarrillas y un poste nos indica diversas direcciones, seguimos Pico Humión, desde aquí nos quedan 2,5 Km en un suave ascenso y el último tramo por una cresta bien definida y que no suponen ningún peligro, hasta llegar a la cima del Humión 1437 m coronada por una cruz similar a la del Gorbea pero más pequeña del Grupo de Montaña Umión y con dos buzones cimeros, uno del Grupo Mirandés de Montaña y otro del Grupo Tobalinés de Montaña de Quintan Martín Galindez del año 2003. Además encontramos un montón de Obituarios y unas cadenas con una gran concha de peregrino. Las vistas desde Humión son magníficas en 360º, podemos diferenciar picos tan emblemáticos como el Gorbea, Anboto, San Millán y San Lorenzo entre otros, además de todo el Valle de Tobalina y el curso del río Ebro a su paso con sus característicos meandros, el embalse de Sobrón y la Sierra de Árcena hacia el norte que hace de barrera geográfica entre los montes Obarenes y el Parque Natural de Valderejo, otra joya muy próxima a explorar. Descendemos por la cresta del Humión y nos dirigimos a la siguiente cima que ya vemos con claridad, la Peña Horcada o más conocida como Flor: 1339 m pasando de nuevo por el collado Jarrillas. En este tramo hay que estar atentos a los hitos, hay muchos para no desviarnos porque la senda ya no está tan definida y algunos tramos se desdibuja por completo. Llegamos a Flor, coronado con vértice geodésico y un bonito buzón cimero con forma de cohete espacial. Descendemos de Flor para dirigirnos a la última cima, Mancubo que ya vemos a lo lejos. Vamos fijándonos constantemente en los cairns para no salirnos del track y llegamos a un collado y cruce de caminos, donde un poste indicador nos marca el Pico Mancubo a 650 m. Llegamos a Mancubo: 1183 m coronado con un buzón del Club Mirandés de Montaña en forma de Molino de aspas tipo Manchego, junto a un cairn. Si echamos la vista atrás vemos con total claridad las dos cimas a las que hemos ascendido. El descenso del Mancubo es probablemente la parte de la ruta más confusa y a la que hay que estar muy atentos a los hitos y al track porque la senda se pierde totalmente. Llegamos a un paso de alambrada y una vez ahí ya sólo resta seguir la senda que vuelve a estar definida y señalizada con varios postes de cruces de caminos y marcas blanco-violetas hasta llegar de nuevo a Orbañanos por detrás del cementerio del pueblo por el que iniciamos esta ruta.