IBIAS/DEGAÑA: Peña Rogueira, Pico Turrunteira y La Camposa
near Sisterna, Asturias (España)
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Trail photos
Itinerary description
Incluidos en el desafío FEMPA 2022-23 “Montañas y Lagos del Paraíso”:
LAGOS:
33. Laguna de Guimará (nº 122)
34. Lagunas de Tablado o Sisterna (nº 37)
PICOS:
71. Peña Rogueira (nº 170, 1960 m)
72. Pico Turrunteira (nº 169, 1948 m)
73. Pico la Camposa (nº 54, 1873 m)
Rutaza por los concejos de Ibias y Degaña, con el constante e infatigable Alberto, en buen día de montaña aunque se nos torció un poco arriba…
Salida desde Sisterna, pequeño pueblo entre Ibias y Degaña, inicialmente por carretera durante kilómetro y medio, hasta encontrar un camino que nos lleva sin pérdida y sin ganar apenas altitud por varios kilómetros. En un punto nos desviamos a la izquierda y comenzamos una fuerte subida, bastante dura pero preciosa y que nos lleva, sin perder el sendero en ningún momento, a través de un espectacular bosque lleno de musgo y líquenes. Así llegamos a un bonito paraje en el que encontramos la Braña de Llanelo, con varias cabañas de piedra en ruinas que conforman un mágico conjunto.
Pasada dicha braña, ubicada aproximadamente en el kilómetro 9 de la ruta, seguimos camino por pista y, para seguir los tracks que teníamos, nos desviamos para subir por la cresta a Peña Rogueira. Esta fue la parte más complicada del día. Será un kilómetro de distancia en el que se superan unos 400 metros de desnivel, y nos llevó una buena hora y cuarto más o menos. Aunque se intuye un sendero, hay que avanzar peleando continuamente con la vegetación, monte bajo al principio pero que se va haciendo más espeso y, según la subida se hace empinada, hay que luchar mucho con gruesas raíces y altos brezos; los bastones se tornan inútiles y es preferible ir trepando agarrándose al ramaje y a alguna roca que aparece ocasionalmente. En definitiva, aunque se puede hacer y prueba es el track, no recomiendo subir por aquí a menos que algún día lo desbrocen. De hecho he marcado el waypoint como “infierno verde”, siendo de los tramos más tediosos y trabajados que recuerdo como senderista/montañero.
Para rematar, en los últimos metros estaba metida la nube y había un viento helado que no nos dejó parar mucho, y tampoco podíamos recrearnos con ninguna buena vista alrededor. Por tanto dejamos Peña Rogueira y seguimos camino a buen paso porque se hacía tarde, más o menos siguiendo la cresta, hasta el Pico Turrunteira (situación inclemente parecida). Y aquí dejamos la cresta para bajar por zona de monte bajo, asequible y más rápida, pasando por la Laguna de Guimará y tomando un sendero que nos devuelve a la cresta y que llega al pico La Camposa.
Continuamos unos metros y, aunque el Teso Mular estaba bien cerca, se hacía muy tarde y bajamos hacia la izquierda por una herbosa y empinada ladera hasta los Lagos de Sisterna, realmente bonitos. A partir de aquí tenemos una bajada tan bonita y tan larga como la subida de la mañana a la Braña de Llanelo, siguiendo un sendero espectacular y muy claro, ya incluso con marcas blancas y amarillas de PR. Tras unos 3 kilómetros, al llegar ya a una amplia pista que nos llevará de vuelta a Sisterna, se nos hizo de noche y tuvimos que usar frontales.
Ruta larga, dura y espectacular, pese a no poder disfrutar del cresterío por la Sierra de Moreda por el tiempo. La dejo como “muy difícil” por llamar la atención sobre la subida a Peña Rogueira, que es un auténtico coñazo y en la que hay que extremar precauciones. Con otra vía de subida podría ser un “moderado”, con distancia y desnivel acumulado más que respetables.
NOTA MENTAL PERSONAL: Queda pendiente subir a la inversa para llegar al Teso Mular, Moredina…
LAGOS:
33. Laguna de Guimará (nº 122)
34. Lagunas de Tablado o Sisterna (nº 37)
PICOS:
71. Peña Rogueira (nº 170, 1960 m)
72. Pico Turrunteira (nº 169, 1948 m)
73. Pico la Camposa (nº 54, 1873 m)
Rutaza por los concejos de Ibias y Degaña, con el constante e infatigable Alberto, en buen día de montaña aunque se nos torció un poco arriba…
Salida desde Sisterna, pequeño pueblo entre Ibias y Degaña, inicialmente por carretera durante kilómetro y medio, hasta encontrar un camino que nos lleva sin pérdida y sin ganar apenas altitud por varios kilómetros. En un punto nos desviamos a la izquierda y comenzamos una fuerte subida, bastante dura pero preciosa y que nos lleva, sin perder el sendero en ningún momento, a través de un espectacular bosque lleno de musgo y líquenes. Así llegamos a un bonito paraje en el que encontramos la Braña de Llanelo, con varias cabañas de piedra en ruinas que conforman un mágico conjunto.
Pasada dicha braña, ubicada aproximadamente en el kilómetro 9 de la ruta, seguimos camino por pista y, para seguir los tracks que teníamos, nos desviamos para subir por la cresta a Peña Rogueira. Esta fue la parte más complicada del día. Será un kilómetro de distancia en el que se superan unos 400 metros de desnivel, y nos llevó una buena hora y cuarto más o menos. Aunque se intuye un sendero, hay que avanzar peleando continuamente con la vegetación, monte bajo al principio pero que se va haciendo más espeso y, según la subida se hace empinada, hay que luchar mucho con gruesas raíces y altos brezos; los bastones se tornan inútiles y es preferible ir trepando agarrándose al ramaje y a alguna roca que aparece ocasionalmente. En definitiva, aunque se puede hacer y prueba es el track, no recomiendo subir por aquí a menos que algún día lo desbrocen. De hecho he marcado el waypoint como “infierno verde”, siendo de los tramos más tediosos y trabajados que recuerdo como senderista/montañero.
Para rematar, en los últimos metros estaba metida la nube y había un viento helado que no nos dejó parar mucho, y tampoco podíamos recrearnos con ninguna buena vista alrededor. Por tanto dejamos Peña Rogueira y seguimos camino a buen paso porque se hacía tarde, más o menos siguiendo la cresta, hasta el Pico Turrunteira (situación inclemente parecida). Y aquí dejamos la cresta para bajar por zona de monte bajo, asequible y más rápida, pasando por la Laguna de Guimará y tomando un sendero que nos devuelve a la cresta y que llega al pico La Camposa.
Continuamos unos metros y, aunque el Teso Mular estaba bien cerca, se hacía muy tarde y bajamos hacia la izquierda por una herbosa y empinada ladera hasta los Lagos de Sisterna, realmente bonitos. A partir de aquí tenemos una bajada tan bonita y tan larga como la subida de la mañana a la Braña de Llanelo, siguiendo un sendero espectacular y muy claro, ya incluso con marcas blancas y amarillas de PR. Tras unos 3 kilómetros, al llegar ya a una amplia pista que nos llevará de vuelta a Sisterna, se nos hizo de noche y tuvimos que usar frontales.
Ruta larga, dura y espectacular, pese a no poder disfrutar del cresterío por la Sierra de Moreda por el tiempo. La dejo como “muy difícil” por llamar la atención sobre la subida a Peña Rogueira, que es un auténtico coñazo y en la que hay que extremar precauciones. Con otra vía de subida podría ser un “moderado”, con distancia y desnivel acumulado más que respetables.
NOTA MENTAL PERSONAL: Queda pendiente subir a la inversa para llegar al Teso Mular, Moredina…
Waypoints
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