Ida y vuelta por bosque

No hay rutas o paseos señalizados. Según algún comentario, que también he visto en Wikiloc, parece deberse a imposiciones vecinales. Tal vez tenga que ver con el entorno tan especial y fauna que uno se puede encontrar. Así se hace más difícil encontrar posibilidades de ruta circular, ni siquiera en el mapa Raster aparecen algunos posibles caminos.
En este caso en el kilómetro 7 de la carretera a Monasterio de Hermo hay un aparcamiento y entrada de pista con un cartel de “Finca privada”. Este cartel no queda muy claro pero parece que no está prohibido entrar a caminar. Es el camino de la ruta/paseo que transcurre unos dos kilómetros hasta un mirador, desde donde se pueden avistar osos al otro lado del valle (eso dicen), pero el camino sigue otros 2 km, ya algo peor en su estado, pero aún se puede caminar. Todo el trayecto es entre bosque, sobre todo hayas, algún roble, y alguna vista en las ventanas que deja abierto el follaje. Desnivel moderado. Está etiquetado como de dificultad fácil” por ello.
Ideal para paseo matutino sin pérdida.
Caminar es la actividad física más natural. Además ayuda deshacerse de ideas fijas, ayuda a reflexionar, libera la mente, relativiza las emociones, fortalece el sentido común y entrena los sentidos. Tras 500 caminatas subidas añado algo importante: Caminar es la mayor expresión de libertad, pues te mueves en espacio y tiempo y estimulas la reflexión que siempre será tuya.
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Filosofía de mis rutas: no hago grandes descripciones pues no se trata de memorizar nombres o lugares, puertos o cimas. Se trata de caminar y disfrutar, comprender el paisaje, su historia y sus gentes. Me preparo una ruta aproximada en Google Earth, la grabo en klm, la subo temporalmente a Wikiloc, la autodescargo en el móvil y luego la sigo, modificándola sobre la marcha según posibilidades, necesidades, clima, tiempo etc.