Intrépida ruta por la Rambla de Lebor y el fascinante Estrecho de la Agualeja (Arboleja, Aqualeja) por Cabezo de Cimbra (II)
near Nonihay, Murcia (España)
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Trail photos
Itinerary description
"Las rutas que subo aquí sólo son un relato de mis salidas al monte con el fin de que me sirva de referencia para próximas ocasiones. Con la dificultad y características que tienen para mí, mis condiciones físicas y mi experiencia por el monte. No es una guía fidedigna de senderismo con un track ultraexacto (utilizo un simple smartphone y a veces la cobertura del GPS no es exacta) por lo que si alguien decide seguir mis tracks o indicaciones (no sólo no me opongo a su uso sino que estoy disponible para cualquier consulta) debe tener claro y asumir que es responsabilidad exclusivamente suya. Que el terreno puede cambiar con el paso del tiempo. Que la misma ruta puede no tener la misma dificultad dependiendo de las condiciones meteorológicas. Que la percepción de dificultad y/o riesgo es muy subjetiva, no es igual para todo el mundo y que lo que para uno es monte, otro puede ver rastros de senderos. No fiarse sólo de mis tracks. Leerlos antes teniendo en cuenta que detallan mi percepción de la ruta que puede ser muy diferente para otros. Las rutas hay que prepararlas y revisarlas antes de salir. A tu disposición. El grado de dificultad de una ruta también depende de ti, de tu experiencia senderista, de tu condición física y tu capacidad de adaptación al medio.
Y, un ruego final. No estropees la naturaleza. Déjala como la encuentras. Respétala. No es nuestra. Nosotros somos de ella."
Intrépida ruta por la Rambla de Lebor y el fascinante Estrecho de la Agualeja (Arboleja, Aqualeja) por el Cabezo de Cimbra (II).
(Actualizada a Noviembre 2023)
Impresionante ruta realizada en equipo (y gracias a su imprescindible ayuda) con l@s amig@s/compañer@s del grupo Senderismo Independiente Región de Murcia, en las cercanías de Aledo. Zona ya visitada pero teníamos compañer@s en el grupo que desconocían la rambla y tenían muchas ganas de hacerlo. Por cierto... éramos 20 adultos más un niño(fenomenal crio y muy habituado) y mis dos perros. No me gusta salir con tanta gente. Y menos una ruta así. Pero... vaya máquinas me acompañaron. Daban ganas de seguirlos a ellos en lugar de ellos a mí . Con esa compañía, me atrevo a ir al fin del mundo. Utilizamos mi propio track de hace un año. De esta manera acabamos por el mágico estrecho y pasamos por la zona menos bonita y mas expuesta al Sol al principio de la ruta. El sabor de boca final es mucho mejor y las últimas imágenes son las mejores del recorrido. También nos sirve para aprovechar la zona de merendero del estrecho y disfrutar de un agradable picnic con los intrépidos compañeros de ruta.
Las cinco horas de ruta se hacen cortas ante la cantidad de alicientes que encontramos. Con constantes invitaciones a fotografiar hermosos parajes, colosales rocas, sorprendentes charcas y paredes impresionantes.
(EL ESTRECHO DE LA AGUALEJA)
Lo primero de la ruta es aclarar el nombre del estrecho. Si nos fijamos cuando estamos llegando, por carretera, a él, vemos varios carteles "oficiales" indicando los tres nombres, Agualeja, Aqualeja y Arboleja. Si tenemos en cuenta el origen de su formación (la fuerza de erosión del agua sobre las rocas a lo largo de millones de años, motivo por el cual se ha generado este desfiladero de formas caprichosas) y su red interior de galerías y canalizaciones hídricas, la lógica puede decirnos que el auténtico nombre es el de Agualeja, y los otros son derivaciones posteriores a lo largo del tiempo.
Actualmente, el estrecho, tiene marcada una ruta circular para visitarlo sin riesgo ni problema alguno. El interior, en su mayor parte, también es muy sencillo de visitar y disfrutaremos de formaciones estalactíticas, travertinos, espeleotemas e, incluso, alguna cascada de agua petrificada. Conforme vamos llegando al final, la belleza aumenta hasta lo insospechado. El colorido parece pintado al óleo. Pero también aumenta la posibilidad de encontrar agua en el suelo, lo cual aumenta la dificultad. En esta visita, si pudimos trepar por la pared que hay que salvar si se quiere llegar al final del trayecto (se realizó para contener y distribuir el agua por las galerías que hay en la parte superior). Esta pared se puede subir sin gran dificultad si no hay demasiada agua en su base. Si la hay, puede que nos veamos obligados a dar la vuelta y desandar el precioso estrecho. Algunos compañeros, aprovecharon para visitar las galerías interiores. No hay peligro (si nos agachamos lo suficiente) pero necesitamos frontal o, al menos, la linterna del móvil.
Pero he empezado a comentar la ruta casi por el final.
Lo primero que hacemos al llegar a la zona es dejar los vehículos en una zona habilitad para ello junto a una zona de juegos infantiles y unas mesas de madera para el uso de los visitantes.
Dejando a nuestra derecha el mirador y reloj solar bajamos unas escaleras que nos llevan a la zona del famoso algarrobo y de la escultura de una cabeza de águila o de reptil, según se lo indique la imaginación a quien lo vea.
(CABEZO DE CIMBRA)
Ya enfilamos hacía el inicio (desde abajo) de la Rambla de Lebor subiendo, antes, el Cabezo de Cimbra. Pasamos por sendero, pistas, asfalto y llegamos a la cumbre casi sin sendero, por trazas senderiles muy fáciles debido al bajo matorral que no dificulta en absoluto, nuestra marcha. Allá arriba, a 585 msnm, y al caminar tan cerca de los cortados (la vista de sus colosales paredes las veremos, posteriormente, al transitar por la rambla) vamos disfrutando de vistas de la rambla y de las llamativas paredes de enfrente. la bajada del cabezo es algo más dificultosa debido al terreno de tierra y rocas sueltas, y a la inexistencia de sendero claro, especialmente los últimos metros.
(RAMBLA DE LEBOR)
MUCHA ATENCIÓN A LA RAMBLA. SI HA LLOVIDO HACE MENOS DE TRES SEMANAS SE VUELVE MUY PELIGROSA POR EL BARRO QUE NOS DIFICULTARÁ, EN GRAN MEDIDA, LAS OBLIGADAS TREPADAS PARA SUPERAR LOS ENORMES Y CAPRICHOSOS BLOQUES DE ROCA Y POZA QUE NOS VAN CERRANDO EL CAMINO. NO HACER LA RUTA SOLO NI SIN EXPERIENCIA EN TREPADAS Y SENDERISMO MONTAÑERO O SIN UNA BUENA CONDICIÓN FÍSICA. LOS PERROS TAMBIÉN TIENEN UNA GRAN DIFICULTAD SI NO ESTÁN MUY ADAPTADOS A ESAS CONDICIONES.
Cuando ya entramos a la Rambla de Lebor es un continuo encuentro con enormes y caprichosas pozas y rocas que vamos sorteando casi por donde podemos. Siempre hay alguna manera de pasar. por la derecha, por la izquierda, por arriba, trepando o pasando por estrechas grietas o aberturas entre las rocas. Se necesita buen sentido de orientación, paciencia, buenas piernas, buenos brazos y, sobre todo, buen sentido de la observación y buena cabeza para ir buscando pasos y apoyos. Pasaremos por un cañón de majestuosas paredes rojizas donde encontraremos algún que otro fósil (al final de la rambla, junto a una presa, cuando salimos por la derecha, hay un conjunto de rocas (pertenecientes a los restos de un arrecife coralino) plagado de fósiles marinos.
Saldremos, momentáneamente, de la rambla y tras pasar una carretera y un sendero con apenas vegetación, nos sumergimos de nuevo en ella para salir, inmediatamente de su lecho y caminar por un sendero lateral hasta que, por la derecha, salimos al mismo camino que pasamos antes junto al acueducto para llegar, en unos metros, y tras volver a ver la imagen tallada en roca y el característico algarrobo, a la entrada del Estrecho de la Agualeja. .
Ruta difícil. Si se tiene bastante experiencia en trepadas, buena orientación y buena condición física (las tres cosas) es menos difícil. No se debe uno confiar ni despistar. Insisto, también, en la necesidad de llevar compañía y de aplazar la ruta si ha llovido recientemente (otra opción, mas engorrosa, es llevar doble calzado e ir quitándose el mojado y poniéndose el seco para las trepadas y volver a cambiarse después, pero la rambla no se va, puede esperar).
En cuanto a los perros, Sam es un bodeguero de menos de 13 kilos y Noa una bodeguera de apenas 12 kg., muy, muy habituados a la montaña. Pero es que, hay sitios donde un perro no se puede agarrar. Tuvimos que ayudarlos un par de veces, cosa que, como son dóciles y obedientes, pesan poco, no es la primera vez de algo así, y están por la labor, no fue difícil. Pero pensarlo muy bien. Puede que disfrutéis mas de la ruta dejándolo en casa y, así, no estar pendiente de él.
Imprescindible calzado con suela de muy buen agarre, mejor bota que zapatilla. Los bastones, prácticamente, no se usan. Por supuesto, agua y alimento no os puede faltar. La ruta consume mucha energía y es necesaria la hidratación. Y si es en meses calurosos mucho mas.
Eso si. La ruta es MAGNÍFICA y COLOSAL con mayúsculas.
(La norma principal que sigo en mis salidas es no llevarme, romper, arrancar ni alterar nada de la naturaleza que encuentro ni tampoco dejar nada que deje huella alguna de mi paso.)
(Por si alguien tiene dudas sobre hacer las rutas con perro, a mí siempre me acompañan dos bodegueros de entre 10 y 13 kilos y se defienden sin problema alguno. Disfrutan más que yo. Lo cierto es que están muy acostumbrados a trepar, crestear y a andar por monte y montaña. Además de ser buenos perros, están enseñados)
Waypoints
Por la derecha
Por la derecha
Pasamos pegados a la valla entre ésta y el árbol. Cuidado. En la bajada la tierra es muy suelta
Pozas subimos con la derecha para seguir adelante. Llegamos a las pozas y tenemos que volver para subir por la izquierda
Trepada corta pero complicada. Después, en las siguientes rocas podemos pasar por la derecha o por la izquierda (más fácil)
Entrando en el Estrecho de la Agualeja
Casi escondida por el algarrobo guardián, a su izquierda, enseguida nos quedaremos boquiabiertos al ver la entrada de la verdadera causa de que este lugar de interés geológico sea conocido y haya sido acondicionado para su visita, la obra de arte geológica del estrecho de la Agualeja. Se trata de un angosto desfiladero en calcarenitas, casi cerrado en su techo, que forma un túnel de unos 500 m de largo. El frescor que se palpa en la entrada ya augura su belleza natural y los procesos geológicos activos que en este entorno se producen. Un bloque de falsa ágata en el centro del cauce nos muestra que vamos a entrar en el reino de los procesos geoquímicos, kársticos e hidrodinámicos actualmente activos. En la entrada, en la pared derecha, las pintadas y el hueco de un antiguo erizo marino (Clypeaster sp.) que ha sido robado, nos llena de tristeza al ver que formamos parte de una sociedad en la que algunos de sus miembros no poseen una mínima cultura que les haga respetar un bien de toda la humanidad, el patrimonio geológico. Pronto este mal humor se nos pasa cuando observamos que la pared izquierda rezuma y nos recibe con una pequeña cortina de agua que cae desde el techo del cañón. Quizás una de las características más importantes de este estrecho, que incluso le confiere una mayor importancia que a otras cavidades kársticas más grandes, es que aquí se pueden ver los procesos kársticos activos. El agua actualmente está esculpiendo las areniscas de aquellas playas antiquísimas, adornándolas con imaginativos espeleotemas calcáreos (estalactitas, crestas, cortinas, cascadas, etc.). Incluso la simbiosis entre mineralogía y biodiversidad es obvia al ver como helechos, musgos y otros tipos de vegetales, están siendo recubiertos por carbonato blanquecino, petrificándose en didácticos travertinos. Pronto vemos que el cauce es sinuoso debido a pequeños meandros. Meandros en los que predomina la erosión en su parte convexa y que están condicionados por variabilidad de la dureza de las areniscas y por las fracturas que las afectan. Las paredes están formadas por unos tres estratos de areniscas de varios metros de espesor, cuyos límites dejan circular el agua con mayor libertad y, consecuentemente, produce una mayor meteorización de la roca en las superficies de estratificación, originando las paredes contorneadas. Al mismo tiempo, la sensación cuando estamos dentro del estrecho de la Agualeja es de inquietud, de peligro. Efectivamente el encajamiento de la rambla todavía hoy está activo, por ello vemos bloques de diversos tamaños, que han caído recientemente del techo y paredes. Podemos ver brozas atrapadas en los laterales del cañón, que fueron arrastradas por el agua torrencial que por aquí paso y que incluso nos indican la considerable altura a la que llegó el agua en la avenida. Sin duda, el sentido común nos dice que en épocas de lluvia es una temeridad estar por aquí. El sonido de las palomas que en este cañón han encontrado su refugio, nos alerta de otro riesgo menos peligroso, pero no por ello menos desagradable. Este sonido hace que miremos hacia arriba para ver dónde revolotean las palomas, lo que hace que podamos admirar, además de la cúpula natural del estrecho que deja ver algo la cúpula celeste, un trozo de la galería con lumbreras que drenaba el agua de este paraje. Hasta el año 2007, parte del agua que circula por el estrecho de la Agualeja, quedaba estancada en los diversos agujeros del cauce, los pilancones. Una delicia para hacer excursiones con niños en verano, pues para continuar el trayecto debían atravesar y bañarse en estas pozas de poca profundidad. Hoy día desgraciadamente, estas pequeñas bañeras naturales han sido totalmente aterradas por una arcilla roja que genera un barro resbaladizo y pegajoso. Este aterramiento de varios metros, que ha deslucido enormemente este lugar de interés geológico, es una de las consecuencias del movimiento de tierras del cabezo del Molino para su urbanización. Quizás haya algo positivo en esto, ahora el estrecho de la Agualeja también es un educativo ejemplo de geología ambiental. Sirve para explicar que la acción humana puede influir directamente en los problemas ambientales como la erosión, la colmatación de cauces y la destrucción del patrimonio geológico, entre otros. Otra consecuencia es que ya se puede llegar al final del angosto cañón sin necesidad de llevarse bañador y calzado de repuesto. Cuando nos encontramos con un salto de unos cuatro metros, hay que tomar la decisión de trepar para continuar o salir del estrecho de la Agualeja volviendo hasta el mirador del reloj de arena. Si los más atrevidos eligen la primera opción, se llevarán la sorpresa al ver de nuevo como el hombre trabajó antaño para exprimir la savia de estas rocas, el agua. Escaleras esculpidas en la roca, galerías subterráneas y diques para mantener y derivar el agua, se unen en un sugerente patrimonio cultural. Los procesos de erosión actuales también son visibles en este punto del recorrido, un importante conducto erosivo circular se ha formado en uno de los pequeños barrancos de la margen izquierda de la rambla, dando lugar un buen ejemplo de procesos de sifonamiento, o piping. La senda asciende y su pendiente está favoreciendo también la erosión de la misma. La senda termina en el camino asfaltado de acceso al estrecho, junto a otro puente de traviesas, bajo él podemos ver el didáctico proceso de tubificación y erosión remontante. El tramo medio de la rambla de Lébor, posee un rincón geológico de los más bellos de la región de Murcia, el estrecho de la Agualeja. Un paraje que permite al visitante conocer o más bien, disfrutar de la sinergia de los procesos geológicos antiguos, ocurridos hace millones de años, medios marinos profundos, arrecifes coralinos, playas y deltas, con los procesos geológicos recientes. El agua, la herramienta que la Naturaleza ha utilizado para modelar estas viejas rocas, ha dado lugar a uno de los desfiladeros más bonitos y sobrecogedores de Murcia. Se puede catalogar de importancia regional, por su geomorfología, por los procesos geológicos que en ella ocurren y por la historia geológica que nos cuenta. Es sin duda un libro pétreo factible de ser usado en todos los niveles de la enseñanza, incluso para uso geoturístico y recreativo. Cómo llegar El estrecho de la Agualeja está al oeste de la villa de Aledo, cerca de la pedanía de Nonihay. Desde Aledo se accede por la carretera MU-V-5033 en dirección a Nonihay, a dos kilómetros y medio, a la izquierda sale un camino asfaltado que nos acerca hasta el área recreativa del estrecho. Antes existe una explanada donde puede dar la vuelta un autobús (figura 1). Recomendaciones El itinerario geológico está señalizado y no tiene dificultad. Se hace por sendas, algunas acondicionadas incluso con barandas y escaleras. El interior del estrecho de la Agualeja es un entorno muy atractivo para la visita con niños, pero con las debidas precauciones. El lecho del cauce suele tener pozas de agua no profundas que para continuar hay que mojarse y normalmente hay barro arcilloso bastante resbaladizo. Muy importante, no se debe visitar en días de tormentas puede ser muy peligroso por las fuertes avenidas de agua. En algunos de los lugares que se visitan los procesos de desprendimientos están activos, aunque las caídas de bloques no son continuos, existe la probabilidad de que caigan durante la visita, con el peligro que ello conlleva. No tocar las paredes donde hay travertinos que se están formando actualmente ya que se frena su crecimiento. No dejar restos de basura en la zona, no hacer grafitis, y respetar la gea, fauna, flora y las instalaciones. No coger fósiles, los cuales además de ser un patrimonio de todos, están protegidos por la Ley de Patrimonio Histórico Español de 1985 y por la recientemente aprobada ley 4/2007, de 16 de marzo, de Patrimonio Cultural de la Comunidad Autónoma de la Región de Murcia. (Antonio del Ramo Francisco Guillén)
Fin de ruta
Zona recreativa. Iniciamos ruta
Salimos de carretera por la derecha para subir al Cabezo de Cimbra sin sendero definido
Con vistas al Cabezo de Cimbra enfilamos a la Rambla
La rambla de Lébor es, en todo su recorrido, una geozona de interés geológico en sí misma. En su curso alto atraviesa una de los mejores glacis dela Región de Murcia, el Glacis de las Cabras, y el Estrecho de la Agualeja que aquí describimos. El encajamiento por el Cabezo Villar o de la Cimbra es espectacular y permite ver muy bien la segunda unidad tectosedimentaria con las formaciones de Manilla y Carraclaca, donde aquí se desarrollan grandes espesores y variadas estructuras sedimentarias. Posee, además, enormes movimientos de ladera. Más abajo, en Carivete, aparecen ilustrativos relieves en bad lands, pliegues, etc. Antes de llegar al trasvase del Tajo-Segura se observan megaestratificaciones cruzadas y la serie evaporítica, para culminar con los depósitos cuaternarios afectados por la falla de Alhama de Murcia, antes de desembocar en el río Guadalentín. Por el abundante y alto interés en el patrimonio geológico del entorno de la rambla de Lébor, hemos decidido separar sus tramos más relevantes en diferentes LIG que, posiblemente, para su gestión, se podrían unificar en uno sólo. (F. Guillén)
Se pasa por el Paso del ojo de la Aguja, el estrecho paso de la derecha. Arrastrándose o por encima
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Maravillosa salida , gracias por llevarme de forma tan formidable a descubrir este lugar.
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Muchísimas gracias José Antonio por una ruta tan espectacular y por toda la ayuda recibida durante la ruta, mil gracias compañero!!
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Agradecida y emocionada de haber hecho esta ruta contigo Jose y con el gran equipo de senderistas.. un día espectacular y una ruta espectacular.💯💪🙏
No acta para principiantes o para gente poco aventurera 😀
A mí no me importaría repetirla con más soltura para así aún poder disfrutarla un poquito más.⭐✨💙
Gracias por hacerlo posible ❤️🩵🩷
Alicia... como no, es un gran placer ir a las rutas juntos. Siempre sumas. Y el crío se portó de maravilla.
Gracias por el comentario y las estrellas
Carmen... Tenías esta ruta pendiente. Siempre confié en que la disfrutarías. Coincido en lo de no apta para principiantes y en tu opinión sobre la espectacularidad de la ruta.
Repetiremos pronto.
Pedro. Genial compañero. Que risas en el picnic. Y que rica tu cocina. Un abrazo
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Difficult
Super maravillosa ruta para disfrutar de trepadas, destrepadas y recovecos 😁, me encanta!. Mil gracias por volver a llevarnos a la que para mí es la rambla más bonita y divertida que he hecho 🤩🤩
Gracias, Encarna, por el comentario y las estrellas.
Totalmente de acuerdo en tu descripción de la ruta.
Pero...
Es que, contigo, todas las rutas son divertidas, 😂🤣😂🤣♥️♥️😘😘
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Scenery
Difficult
Ruta a la que le tengo especial cariño porque reúne todo lo que puedes esperar de una salida, es divertida, aventurera, bonita y con ese punto de pimienta que tanto nos gusta, ya sabes que si la vuelves a programar, ahí me tendrás, gracias José Antonio por guiarme una vez más!!🥰
Mi inigualable Costy. Eres como la Coca-Cola. La chispa de la vida hecha persona. Casi imprescindible en una ruta. Grandísima compañera, con unos divertidísimos ratos de conversación (Y muy didácticos 😉)
Gracias por las estrellas y el comentario.
Por supuesto que volveremos.
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Difficult
Preciosa
Hemos realizado la ruta!!!
Hace honor a su título "intrépida"".
Muchas gracias por compartirla, tus indicaciones y explicaciones son un lujo!!!
Gracias, Pilar, por el comentario.
Me alegro que te haya gustado.