Isleta del Moro-Sendero Requena-Presillas-Escullos Circular (P.N. Cabo de Gata)

Encantadora ruta circular de montaña y litoral, muy fotogénica, desde la Isleta del Moro, pequeño núcleo ligado a su historia lejana de berberiscos y piratas, y habiendo sabido conservar su apariencia de aldea de pescadores.
Partimos muy próximos al puerto deportivo, junto al lavadero. Nos acercamos hasta el promontorio para contemplar el pueblo y, en dirección norte, entre las casas y la arena de la playa de la Isleta o del Peñón Blanco, bajamos unas escaleras para perder los pasos entre la arena calma junto al mar.

Este recorrido lo hemos realizado sobre la base del track de PACOPICO37 http://es.wikiloc.com/wikiloc/view.do?id=2418921, a quien agradezco lo haya compartido y me haya facilitado tanto el trabajo de diseño.
Venimos realizando rutas de litoral y de interior donde intentamos que la parte de litoral discurra lo más próximo posible al agua. Por esto, esta playa ha sido uno de los pocos sitios en los que hemos variado el trazado de referencia.

Dejamos esta playa de extraordinaria belleza y excepcionales condiciones ambientales para aproximarnos a la Cala de los Toros. Tratamos de llevar el trazo de una vereda que, a veces se pierde entre la vegetación, sin que el terreno revista riesgo alguno. Dejaremos a nuestra izquierda un precioso palmeral, y enseguida comenzaremos a ver el singular bosquete de pinos y palmeras que hay en el barranquillo de la Cala Toros y que muere a su puerta. El bosque está rodeado de espartales, albardinales y palmitos.
Bajamos hasta la empedrada cala que nos seduce con una bonita vista del Cerro de los Lobos. Volvemos sobre nuestros pasos y, 75 m. más arriba, tomamos el camino de la derecha para ir a cruzar la carretera.

Y literalmente la cruzamos y nos encontramos de frente con un cartel indicador del sendero Requena, para subir por el Barranco del Negro hasta el Cortijo de la Rellana. En la cabecera del barranco, a la izquierda en nuestra subida, se exibe un pinar relicto de pino carrasco, adaptado para sobrevivir con precipitaciones medias anuales de 200 mm.
Ya en la meseta superior merece la pena desplazarse 500 m. hasta el borde para disfrutar de unas espectaculares vistas sobre Rodalquilar, las Negras y Mesa Roldán.

Volvemos hasta el cortijo para dirigirnos por pista a las antenas. Pasada la cancela, en una de las lazadas a izquierdas de la pista, creo que en la primera, hay una buena panorámica de las canteras de oro del Cerro del Cinto. Pasamos junto a las antenas disfrutando del privilegio por la altitud del enclave, y nos acercamos hasta la caseta de vigilancia. Sobre el Campo de Níjar, atestado de invernaderos, vemos Sierra Alhamilla y más a la derecha Sierra Cabrera.

Vamos buscando más impresiones visuales desde el vértice geodésico 106040, del Cerro Peñones (488 m.), que está junto al radar. Desde aquí, a 112 km. de distancia, podemos distinguir perfectamente las laderas nevadas, a 16 de octubre, del Mulhacén y la Alcazaba sobre las sierras de Gádor y el cordal del Almirez. Se domina gran parte de la costa, desde Mesa Roldán, Pico del Lobo, Isleta, hasta la bahía de Almería.

Comenzamos el descenso por la cresta de la boca de la caldera de Majada Redonda. Se trata del cráter de un antiguo volcán cuyas paredes se derrumbaron como consecuencia de la enorme presión originada al aflorar intensamente el magma. Hay huella de bestias que, en ocasiones, se pierde un poco entre la vegetación, pero levantando la vista se vuelve a encontrar como la mejor opción. Se transita por la cuerda pero es amplia y no hay más riesgo que alguna torcedura por la inestabilidad del terreno.
Llegado un punto, el track del colega hace un decidido giro a la izquierda buscando el fondo de la caldera y, quizás, tomar el SL-A 101 desde su final. Sobre el papel me pareció demasiado desnivel y decidí continuar perdiendo altura por la cresta y encontrarme con la pista 500 m. más abajo. Llegado al último promontorio bajé hasta la pista por la derecha por terreno pedregoso, de máxima pendiente del recorrido. Parece más lógico bajar por la izquierda, este tramo se hace campo través y cada uno puede hacer este descenso por donde le sea menos incómodo.

Llegados a la pista la ruta se convierte en un paseo de 8 km. Pista cómoda de arena de río por rambla hasta las Presillas Bajas, que atravesamos por su calle Perdigal. Al entrar a las Presillas hay cartel indicativo de este sendero-pista por rambla que traíamos, Sendero Caldera de Majada Redonda, SL-A 101, camino que alcanza la caldera a través de esta rambla que nace en su interior.

Hacemos el tránsito desde las Presillas hasta los Escullos por asfalto, más lo siento yo. Cuando llegamos al cruce con la AL-4200, la tomamos a la izquierda durante 250 m. para dejarla en la indicación al Complejo Turístico los Escullos. Buen clima en el camping para un refrigerio. Llegamos a los Escullos siguiendo el track para visitar la Batería de San Felipe (1765), una de las nueve fortalezas construidas bajo el mandato de Carlos III desde Macenas hasta Málaga, para defender las costas del reino de Granada de posibles incursiones enemigas desde el mar.

Y desde aquí a la Isleta recorriendo la playa del Arco o del Esparto, excepcional por sus dunas fosilizadas, y después, por sendero marcado circundando los acantilados de arenisca. Entramos a la Isleta por el Mirador, enclave distinguido, y cuesta abajo hasta el coche.

Cualquier duda o comentario será bien recibido. Gracias.