IV Ruta Senderista “Andarines de la Alberca”. A la conquista de Matahombres

Dice Pepe Marcos: este domingo tocaba senderear muy acompañados. Este domingo tocaba recorrer una buena kilometrada en gran compañiá. Este domingo tocaba realizar (para algunos "Magníficos" por cuarta vez), la "Ruta Senderista de los Andarines de la Alberca", que en esta ocasión ofrecía un recorrido largo de algo más de 18 Kms y unos 750 mts. de desnivel positivo. Tras recoger nuestro dorsal en la mencionada pedanía murciana con la ausencia obligada de la "andarina" y la presencia de nuestra amiga Cristina, partimos unos minuticos después de lal 8.30 h. Realizamos un primer parte de recorrido que, en contínuo y leve ascenso en dirección sur y oeste nos llevó cerca de la Autovía Murcia - Cartagena. Tras "atravesarla" por uno de sus túneles, llegamos al primer avituallamiento en el Área Recreativa del Portazgo. Como siempre, excelente en cuanto a cantidad y variedad, con agua, isotónico, frutos secos, plátano, sandía, melón y chuches. Primer reagrupamiento y continuamos nuestro senderear en dirección ahora norte y después oeste para buscar el "no largo pero intenso" Matahombres. Subidica por buena y ancha pista, con apurados desniveles y ganancia de altitud de algo más de trescientos metros en poco más de dos kilómetros. A nuestro ritmico, poco a poco fuimos llegando a su techo. Tras ello, después de comenzar la bajada, segundo avituallamiento y segunda parada "técnica". Volvimos a retomar el caminio y, por senda estrecha, bonita y definida (aunque con algún descenso técnico, vertical y complejo -ayudado de cordada-, fuimos llegando al PR bajando, de nuevo a zona de autovía. Pasamos por túnel algo más al sur y, tras atravesarlo, nos enfrentamos, sin duda, a la prueba más dura de la jornada. Tras algo más de trece kilómetros, llegamos a la base del "Angel" de la Autovía (ya sabéis, ese monumento levantado por los padres de un joven asesinado en la Guerra Civil). Recia, recia rampa de unos 500 mts. y unos 130 mts. de desnivel. Tras ella, cogimos aire, llegamos después de un kilómetro al tercer avituallamiento donde realizamos una tercera parada "reagrupadora" (uniéndonos también a los participantes en la ruta corta) y ahora sí, tranquilamente y tras pasar la zona del Valle Perdido, fuimos llegando con relativo relax al Campo de fútbol, origen y final de esta entretenida travesía. Tras ella, imposición de medalla, botes de Estrella, frutos secos y un platico de arroz antes de dirigir nuestros pasos al Mochuelo amigo de Guadalupe. En resumen, un buen entreno que nos debe de ir poniendo a tono de forma progresiva al objeto de afrontar nuestro desafío de 70 Kms en "La Desértica" de Almería.