Jesuri y Santa Marina de Arrola

Dejamos el coche junto al cementerio de Orozko, situado en el barrio Duluman, que se encuentra a una altitud de 183 metros, para iniciar una larga subida por terreno de asfalto y placa de hormigón, que primero nos lleva hasta la iglesia de San Juan (totalmente en ruinas), más arriba al barrio de Meatza y que tras dejar a nuestra derecha el barrio de Sagarminaga, acaba en una pista de piedra fina a la altura de la zona de Ametziturri, habiendo recorrido unos 2`9 kilómetros y llegando a una altitud de 467 metros.

Continuamos nuestro ascenso hasta llegar a una fuente (Jesuripozueta, 611 metros) donde se encuentra una indicación que señala a la derecha la dirección hacia el Elorritxugana y a la izquierda hacia Santa Marina de Arrola. Nosotros tomamos por la izquierda y tras un breve tramo recorrido cogemos un sendero que nos da acceso a una bonita zona de hierba que nos va a llevar sin complicaciones hasta la cima del Larragorri, más conocido como Jesuri (749 metros).

El día ha salido soleado y las vistas, en todas direcciones, resultan extraordinarias.

Tras un momento de relajo en la cumbre, iniciamos el descenso para llegar hasta la cima del Arriurdin (722 metros), en la que destaca un cairn de grandes piedras.

Seguimos descendiendo hasta el collado de Eskiles para continuar hasta cruzar la empalizada que protege el área recreativa alrededor de la ermita de Santa Marina, de la construcción de la antena allí existente, y del refugio abierto a su lado (como siempre bastante bien cuidado), todo ello en la cumbre del Arrola (666 metros).

El descenso lo realizamos en dirección E en fuerte pendiente entre arbolado, hasta llegar a un cruce de pistas en la que podemos ver un poste indicativo, así como una singular acumulación cilíndrica de piedras de bastante altura.

Vamos a tomar el sendero que se adentra en el bosque de hayas para disfrutar plenamente de su suelo de hojas y de la paz que trasmite este bonito lugar. Podemos ver la existencia de una antigua carbonera.

Algo más abajo el sendero termina en una amplia pista que sin lugar a posible error nos va a llevar hasta nuestro punto de inicio, tras pasar por el barrio de Mendiola.