La Cueva del Castañar

Esta ruta es bastante fácil y sin complicaciones. No tiene grandes subidas ni zonas escarpadas y es bastante sencilla de seguir. Pero si es larga así que NO la recomendaría para alguien que no esté acostumbrado a andar.

La ruta comienza en el quinto "Don Ángel" en el que dejaremos el coche. Cruzamos el paso canadiense y seguimos el camino ancho. Nada más empezar, veremos un todo terreno al lado del camino. Está ahí continuamente y le da un aire de expedición a la ruta como en las películas de "Mogambo" o de "Parque Jurásico". El paisaje aquí es de monte bajo y divisar conejos o perdices es bastante común, e incluso vislumbramos un zorro fugazmente.

Pronto llegaremos al segundo paso canadiense que nos llevará al quinto "El Moracho". Aquí la vegetación empieza a estar un poco mas espesa aunque sigue siendo monte bajo. De hecho, vimos un jabalí descansando cerca del camino y un ciervo no muy lejos.

Continuas por el camino ancho hasta llegar a un tercer paso canadiense que nos lleva al quinto "San Martín". Nada más cruzarlo, giramos a la derecha caminando al lado de la valla. Hemos de estar atentos para ver un camino que sale hacia la izquierda. Comienza justo antes de una subida. Lo tomaremos y veremos a nuestra izquierda una poza de agua para los animales. Seguimos por el camino y llegaremos a una dehesa en la que tuvimos suerte de ver muflones y gamos. Continuamos por el camino hasta llegar a una puerta que nos conducirá al "Castañar".

Seguimos nuestro camino hasta llegar a una segunda puerta más grande. Al cruzarla, giraremos a la izquierda. Por aquí tened un poco de cuidado ya que hay colmenas de abejas. Pronto llegaremos a las canteras en las que podremos ver las cuevas que se han formado. Se pueden ver las estalactitas destrozadas por la mano del hombre. Una verdadera pena...

Una vez visto, habiendo parado a descansar y a explorar la zona, retomamos nuestro camino y seguimos nuestros pasos, cruzando nuevamente la puerta grande. Cuando lleguemos a una bifurcación del camino (siempre pensad en caminos públicos y transitables), puedes ir a la izquierda y volver por donde hemos llegado, o seguir recto y ver otra parte diferente. Si tomamos el de la izquierda la ruta no llega a los 20 km y si tomamos el segundo camino se alarga un poco mas. Si continuamos recto, llegaremos a una segunda puerta que pasaremos y recordaremos de dejar cerrada. Siguiendo este camino, veremos la casa del quinto "San Martín" y la pasaremos, siguiendo la veredita que hay al lado del camino (y no el camino grande ya que este último es privado).

Pronto llegaremos a la conocida en la zona como la "M-30" debido a que comunica varios quintos y muchas rutas tanto en bici como caminando pasan por ella. Aquí torceremos a la izquierda. Tenemos una recta muy larga que nos llevará hasta el tercer paso canadiense que cruzamos anteriormente. Pero antes de llegar, estad atentos. Por esta parte, en distintas ocasiones, he conseguido ver gamos, ciervos, liebres e incluso un busardo ratonero comiéndose una serpiente. Si miráis al cielo seguro que veréis a los buitres de la zona y también hay rabilargos entre los árboles. En esta ocasión fue una manada bastante notable de gamos corriendo por la dehesa. También suelen tener vacas pastando pero no son de mayor preocupación.

Cruzaremos el paso canadiense que nos llevará al camino de ancho de vuelta a donde aparcamos. Sólo hemos de cruzar dos mas y llegaremos a nuestro coche.