La Granja: El Chorro Grande, Cabaña del pastor y pozas

Hoy volvemos de nuevo a visitar El Chorro Grande de la Granja. Vamos a visitar lugares por los que nunca hemos pasado gracias a la ruta de phernigiménez. 

Iniciamos la andadura junto a la verja de la entrada, en la Calle de los Infantes, atravesamos el aparcamiento de la Plaza de la Fruta y seguimos callejeando, pasamos por la Plaza de los Dolores y seguimos por la Calle de los Baños, desde la cual salimos al Paseo del Molinillo. Seguimos por dicho paseo hasta que nos adentramos en la Urbanización Caserío de Urgel. 

Atravesamos la urbanización para adentrarnos en el pinar. El bonito sendero discurre al borde del Arroyo de Peña Berrueco. El día está nublado, pero la temperatura es ideal para andar. Nos alejamos del Arroyo de Peña Berrueco para tomar otro sendero que va a acercarse al Arroyo del Chorro Grande. El deshielo de las últimas nevadas hace que el arroyo se encuentre pletórico de agua. No nos podemos resistir y de vez en cuando nos acercamos al cauce para disfrutar del agua. Un poco más arriba atravesamos otro arroyo, esta vez se trata del Arroyo de la Fuente del Infante. 

Después de cruzar por una bonita pasarela de madera el camino es atravesado por el Arroyo del Chorro Grande en la curva. Mucha agua, incluso nieve en la misma. Menos mal que no vamos al Chorro Chico. Salimos del camino para tomar un sendero que sale por la derecha de aquel. El sendero sube hasta llegar al Chorro. Nos encontramos con que el mismo baja con una gran cantidad de agua. Es la vez en la que más cantidad de agua vemos en la cascada. Pasamos unos minutos disfrutando de la caída, después de los cuales seguimos ascendiendo por un pequeño sendero. A medida que subimos nos encontramos con algunos lugares desde los cuales podemos ver hermosas vistas. A nuestra izquierda siempre tenemos la caída de agua, que desciende brava por las rocas. Seguimos subiendo hasta que llegamos a una pequeña y hermosa poza. Desde la misma, dejamos la subida para tomar dirección sur y adentrarnos en el bosque. 

Ahora el terreno es totalmente diferente. Vamos descendiendo suavemente en mitad del pinar. Llegamos, y atravesamos, de nuevo al Arroyo de la Fuente del Infante. Salimos del pinar y tomamos una pista forestal desde la que podemos ver San Ildefonso en su totalidad, incluyendo el pequeño estanque del Palacio llamado coloquialmente El Mar. Seguimos descendiendo por la pista. Abandonamos el camino en una curva para cruzar una puerta y seguir, primero campo a través, y después por una pequeña senda. Antes de llegar al Arroyo del Morete, dejamos el sendero para dirigirnos a la Cabaña del Pastor. Llegamos a la misma un poco dificultosamente. Al final llegamos al coqueto refugio, muy bien cuidado. Nos vemos gratamente sorprendidos por la pequeña cabaña. Nos hacemos unas fotos en la misma, e incluso uno de nuestros componentes deja constancia de nuestro paso por la misma en uno de los cuadernos que se encuentran dentro de la cabaña. 

Iniciamos después el regreso. Esta vez tomamos un minúsculo sendero que sale justo por el lado contrario. Mucho más sencillo que el que tomamos para llegar a la cabaña. Desandamos hasta llegar una de las esquinas del Palacio llamada El Esquinazo, con toda la razón. Ahora iniciamos un descenso justo al borde de la valla de los jardines del Palacio. Cruzamos el Arroyo de los Carneros por un bonito puente. Más allá, llegamos a la otra esquina, lugar en el que nos encontramos con la curiosa Fuente de la Plata. Después de visitar la fuente, en lugar de seguir al borde de la valla, retrocedemos un poco para seguir por un sendero en dirección suroeste. Vamos andando por mitad del pinar. En algún tramo, el descenso se hace un poco penoso ya que el terreno se encuentra totalmente embarrado. Afortunadamente salimos a una pista asfaltada. Seguimos por la misma hasta llegar al Puente Negro. Atravesando el mismo cruzamos el Arroyo de la Chorranca. Justo después del puente, salimos de la pista y tomamos un sendero que sale a la izquierda. Si miramos al este, a lo lejos vemos la caída de agua del Chorro Grande y a su izquierda la del Chorro Chico. Nosotros seguimos andando hasta que, una vez abandonamos el sendero, llegamos hasta la Cascada del Huevo, lugar que nos cautiva. 

Retrocedemos para llegar de nuevo a la pista asfaltada. Abandonamos dicha pista, justo detrás del Puente Blanco para seguir por el interior del pinar. Llegamos hasta la carretera. Seguimos por un pequeño sendero a la izquierda de la misma, que nos va a llevar hasta nuestro punto de partida. 

Espectacular ruta, repleta de agua por todas partes. Muy recomendable. 

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Época recomendada: primavera, verano, otoño e invierno