LA MULETA desde Deiá

El itinerario de esta ruta parte de Deiá y pasa por el Camí des Ribassos, la Cala de Deià, el Camí dels Pintors, Alconasser, Bens d’Avall, Punta de Sóller, Refugio de la Muleta y de regreso por GR-221, el Camí de Castelló y el camí des Pont de sa Cala o Camí de sa Pesta.

Dejamos aparcado nuestro vehículo en un pequeño parking gratuito que hay a la entrada de Deiá, en la calle del Archiduque Luis Salvador. Comenzamos a caminar por la calle del Teix, asfaltada, que sale al otro lado de la carretera frente al aparcamiento y que rápidamente comienza a descender.

Un poco más abajo vemos a nuestra derecha los rentadors des Siquio (lavaderos) y un pequeño puente sobre el Torrent des Racó. En la siguiente curva pasamos por delante del refugio público de Ca’n Boi que queda a nuestra izquierda.

Unos metros más abajo vemos una bifurcación, que seguimos por la derecha por el Carrer d’es Clot, en la que vemos a la izquierda la Pica des Clot que recibe el agua de la Font des Molí. Enseguida termina el asfalto y comienza el Camí des Ribassos. Los primeros metros de este bonito camino transcurren por sendero de tierra, cubierto de hierba y rodeado de huertos y tierra de cultivo.

Pasamos por un rudimentario botador y un poco más abajo el camino aparece empedrado. Vemos a nuestra izquierda la desviación al Pi de Sa Pedrissa, que obviamos, y un poco más abajo llegamos al Pont des Torrent, pequeño puente que cruza el Torrent Major.

Al otro lado del puente tenemos la carretera que va a Cala Deiá y justo enfrente vemos un botador y a continuación el Camí des Pont de sa Cala o Camí de sa Pesta que es por el que regresaremos al final de excursión. Ahora tomamos la carretera, asfaltada, por nuestra izquierda para ir a la Cala, pasamos por un aparcamiento y enseguida llegamos a la Cala.

Cala Deià es una hermosa cala rocosa muy pequeña y con aguas transparentes. La cala no tiene arena, sino pequeñas rocas y es la desembocadura del Torrent Major. Vemos pequeñas embarcaciones que utilizan los pescadores.

Unos metros antes de llegar a la Cala, cerca de una barrera, nace el Camí dels Pintors, que conecta la Cala Deiá con Bens de Avall. Este camino comienza ascendiendo por unos escalones y luego va bordeando la Cala ofreciéndonos unas estupendas vistas de ella. En algunos tramos hay barandilla de madera de ullastre que sirve de protección.

Seguimos avanzando y vemos un poste que indica la dirección de Ben d’Avall por donde tenemos que continuar. El camino nos va ofreciendo unas vistas estupendas de las numerosas calitas que hay en este litoral.

Llegamos a una especie de mirador natural que nos ofrece una panorámica más amplia de la costa. Un poco más adelante, a nuestra derecha, se ven numerosos marges, una muestra del aprovechamiento de un terreno tan inclinado. Unos minutos después alcanzamos una pequeña explanada donde vemos una mesa y sus asientos de piedra que utilizamos para un tentempié.

Después de un rato de caminar llegamos a un chalet, con un curioso portón, y un poco más adelante tenemos el desvío que conduce a la playa de Canyaret, conocida también como playa de Llucalcari.

Continuamos nuestra marcha por este bonito camino, pasamos otro botador y al poco tiempo de caminar vemos otro mirador natural con buenas vistas de esta parte de la costa que cada vez se la ve más accidentada.

Ahora nuestro camino comienza a descender, atraviesa un torrente y asciende por unos escalones ya desgastados. Luego vuelve a realizar bajadas vertiginosas. Vemos delante de nosotros un imponente peñón que superamos por nuestra derecha. Ascendemos un poco y volvemos a saltar por otro botador.

A continuación vemos una barraca que se conserva relativamente bien y un poco más adelante las ruinas de una casa. Continuamos andando y nos volvemos a encontrar con otro botador que superamos. A la derecha vemos una desviación que obviamos y continuamos de frente.

En poco tiempo llegamos a Alconasser y sin bajar a la Cala, la observamos desde una especie de mirador con una barandilla de protección. A continuación tomamos el Camí des Alconasser, asfaltado, en dirección ascendente. Vemos a nuestra derecha una pica en la pared que recibe agua y discurre por una pequeña canaleta.

Un poco más arriba, debemos prestar atención pues tenemos que coger un desvío a nuestra izquierda que nos deja en una carretera que tomamos por la derecha y después de un rato de continua subida va a desembocar en la carretera de Bens d’Avall. En este cruce seguimos por nuestra izquierda. Vemos un poste GR que marca la dirección del Refugio de la Muleta.

Un poco más adelante, termina el asfalto y poco después nos encontramos con un nuevo cruce de caminos. Por la derecha continua el GR-221 que llega hasta el refugio, pasando por la Muleta Gran y por el regresaremos más tarde. Ahora nosotros vamos a tomar la desviación de la izquierda que nos lleva hasta una urbanización.

Al final de las últimas casas sale un sendero por el que seguimos. A partir de aquí debemos seguir los hitos, pues el sendero desaparece en varias ocasiones entre las rocas; no obstante la ruta está marcada con suficientes hitos que van a evitar que nos perdamos.

Al cabo de un rato vemos una caseta bastante bien conservada y a partir de aquí se trata de seguir los hitos por un terreno bastante abrupto con subidas y bajadas hasta que llegamos al Refugio de la Muleta y al Faro des Cap Gros.

Después de reponer fuerzas y de un merecido descanso iniciamos el regreso tomando el GR-221, que sale de detrás del refugio. Tras una considerable subida llegamos a un cruce, por la izquierda continúa un ramal del GR-221 que pasando por Muleta Gran y Muleta Petit llega hasta el Puerto de Sóller. Nosotros continuamos por la derecha, por el ramal del GR-221 que nos va a llevar hasta Deiá, pero antes pasamos a ver Muleta Gran.

En poco tiempo alcanzamos el cruce por el que hemos pasado antes y después la carretera de Bens d’Avall. Tras caminar un rato por el asfalto llegamos llegamos a Can Bleda y aquí tomamos el camino de tierra que sale a nuestra derecha y en el que vemos un poste GR que indica la dirección de Deiá. En poco tiempo y después de una ligera subida pasamos delante de la Capilla de Castelló, recientemente reformada, y a continuación por Can Prohom y Can Mico.

El camino ahora se llama Camí de Castelló y sigue siendo GR-221. Es un camino de sobra conocido y muy frecuentado, con algunos tramos realmente bellos. Pasamos por una casa que se halla en el mismo camino a la izquierda conocida como Son Coll Can Amo Juan y más adelante llegamos a la urbanización Ses Coves para finalmente desembocar en la carretera Ma-10 que va de Sóller a Deiá, entre el km. 60 y 61.

Caminamos un poco por esta carretera hasta llegar a una desviación, a nuestra derecha, señalizada con un poste GR, de la que parte el Camí d'es Pont de sa Cala o Camí de sa Pesta. Al poco tiempo vemos a nuestra derecha la propiedad de Can Bujosa y continuamos descendiendo hasta llegar a un botador.

Saltamos este botador, que ya he mencionado al principio, y nos ponemos en la carretera que va a Cala Deiá, la cruzamos y justo enfrente tenemos el Pont des Torrent y a continuación el Camí des Ribassos, por donde hemos pasado esta mañana.

Ahora solo nos queda continuar por este camino hacia Deià deshaciendo lo andado, hasta el punto de partida donde tenemos aparcado el coche.


Los componentes del grupo hemos sido: Jaime, Pepe, Salvador, Emiliano y yo (Juan González Blázquez) como guía.
Mas información en mi Blog Caminandopormallorca