LA PEÑA PILEÑES DESDE LA UÑA. CIRCULAR.

CONOCEMOS LAS MONTAÑAS DE CASTILLA Y LEÓN Y DE ASTURIAS.
Hace 15 días el grupo Gabanceda visitamos este precioso y valioso entorno natural para subir a la Peña Ten. Desde su cumbre pudimos gozar de las hermosas montañas que rodean esta peña. Justo de frente está la Peña Pileñes, una alargada montaña que pronto nos atrajo lo suficiente para tomar la decisión de que teníamos que ascender hasta su cima buscando una ruta alternativa a la vía normal.
El itinerario nos ha dejado muy satisfechos al disfrutar muchísimo de este maravilloso paisaje de montaña.
Hemos salido desde un área recreativa que tenemos a unos 2 km de La Uña hacia el puerto de Tarna. Comenzamos en dirección N hacia el río Esla para cruzarlo por un bonito puente de madera y enlazar con la pista que seguiremos ya en dirección NW. Pasaremos bajo la atractiva Peña del Castiello y por dos puertas para el ganado que abriremos y cerraremos, como nos piden los ganaderos.
Pronto avistaremos el verde valle de Valdosín rodeado de hermosos hayedos y habitado por vacas y caballos pastando placenteramente.
Cruzamos el Arroyo de las Corvas y tomamos el PR LE-20. Ahora durante un buen tramo el rumbo va a ser NW. No nos aburrimos en absoluto pues estamos asistiendo a una auténtica sinfonía de colores: el verde de los prados, el amarillo de la genista, el violeta de los brezos, el rojo de las bayas de los serbales, el blanco de las macizos calcáreos... espectacular. No solamente son los colores, también nos llama mucho la atención los estratos, en muchos casos totalmente verticales, las caprichosas formas del relieve por la acción de los agentes erosivos; no podemos pasar por alto las vacas con sus terneros y las yeguas con sus potrillos, que se alimentan de los frescos pastizales de estos valles de montaña. No podemos olvidarnos del aire y de la paz espiritual que aquí se consigue alcanzar.
En esta dinámica nos damos cuenta de que ya estamos en territorio asturiano y llegando al Puerto de Ventaniella donde los pequeños valles encajados en la roca llegan a una hermosura suprema.
Tras un breve descenso nos tenemos que desviar, primero rumbo N y luego NE. Ahora toca subir por una empinada pradera para alcanzar La Colladina (1657 m). En este punto ya vemos con nitidez nuestro objetivo: la Peña Pileñes (2012 m) y también una serie de pequeños valles que igualan la belleza de los vistos hasta el momento. Descendemos hasta la cota de unos 1600 m y en dirección E buscamos la exigente subida hasta la collada de la Peña Pileñes (1842 m). Al llegar a este punto ya observamos todo el cresterío para alcanzar la cima, el valle del Arroyo de la Majada de la Castellana y, frente a nosotros, la Peña Ten con toda su ladera W cubierta de verde hierba.
Con rumbo NE nos encaminamos por la fácil cresta hasta la cima de la Peña Pileñes (2012 m). Como hacemos siempre, es el momento de disfrutar de todo el paisaje que nos rodea:
- Hacia N y W todas las montañas del Parque Natural de Ponga con sus valles y bosques de hayas.
- Hacia el E tenemos la Peña Ten que nos impide ver la Montaña Palentina. Sí podemos observar los Macizos Occidental ( Cornión) y Central (Urrieles) de Picos de Europa.
- Hacia el S tenemos el Macizo del Mampodre con las cimas de La Cruz, La Polinosa, El Convento, Valcerrao o Cervunal...
- Hacia el SE tenemos las montañas de Riaño con el pico Yordas, el Gilbo y las Peñas Pintas.
Nos llamaba mucho la atención la cantidad y variedad de colores que tapizaban los pequeños valles.
Ya para rematar pudimos observar un buen rebaño de rebecos, chovas, buitres leonados y multitud de pequeños pajarillos de muy agradable canto.
Con gran satisfacción por lo gratificante de este recorrido, tomamos la decisión de iniciar el descenso. Hasta la collada realizamos el mismo itinerario. Desde aquí, comenzamos a bajar hacia el valle del Arroyo de la Majada de la Castellana hasta alcanzar su cauce, ahora prácticamente seco. Por sendas muy próximas o por el mismo cauce fuimos descendiendo (SW-S) para llegar al hayedo y empalmar con el PR LE-20. A partir de este lugar el itinerario ha sido el mismo que el de la subida.
Ruta preciosísima para gozar de la montaña en todas sus variantes. Ningún amante de la montaña debería dejar de visitar estos lugares.
Recomendable para todos las personas que aman las montañas con todo lo que llevan dentro... y están preparadas física y mentalmente para realizar esta actividad.