La vuelta de los Cingles de Malanyeu

Los Cingles de Malanyeu están situados al norte del Berguedà, entre les poblaciones de la Nou y Guardiola de Berguedà. El itinerario de nuestro track realiza un recorrido circular por la especie de olla que forman los "cingles" alrededor de la población de Malanyeu, recorriendo bellos parajes con bosques frondosos y algunos pasos equipados.
Para llegar a esta población hay que tomar la carretera que parte de la C16 poco después de Cercs. Es una carretera estrecha y llena de curvas que sube hasta llegar al núcleo de Malanyeu, un pequeño pueblo de apenas 4 casas. A la entrada del pueblo, junto a las escuelas, hay espacio para aparcar.
Salimos andando por una pista pero al poco rato dejamos la pista para tomar un sendero a la derecha que sube por el bosque. El camino que tomamos, como la mayor parte de nuestro recorrido, está señalizado con las marcas blancas y amarillas de los caminos de pequeño recorrido (PR). Pronto llegamos al punto más singular de todo el recorrido: el Griell de Cal Pigot. Se trata de un tramo equipado, corto pero intenso que supera un estrechamiento en el cauce de un torrente. El camino llega al torrente junto a una pequeña cascada y nos lleva al pie de una canal húmeda por donde subimos con ayuda de una cadena. Después subimos por esta escalera metálica hasta llegar a una ventana abierta en la roca que da acceso al torrente, justo en la cabecera de la cascada que antes habíamos pasado por debajo y al pie del tramo superior de esa cascada. Atravesamos la ventana y, pisando sobre unas piedras, llegamos al pie de un espolón por donde trepamos. En este tramo no hay ningún equipamiento pero hay buenos agarres de roca. Hay que ir con cuidado si la roca está húmeda, porque puede ser resbaladiza.
Superadas las dificultades del Griell, seguimos por un sendero hasta encontrar un pequeño tramo equipado con una cuerda fija por donde subimos situándonos sobre el acantilado en una zona boscosa.
Nuestro camino sigue hacia la derecha pero antes de proseguir nuestro camino nos podemos desviar unos metros a la izquierda para visitar la Foradada, un lugar singular con un arco de piedra a través del cual podemos admirar el paisaje sobre el valle de Malanyeu.
Volvemos atrás sobre nuestros pasos y seguimos al frente por un sendero bien trazado. El camino sigue la cresta en dirección sur y más tarde gira al este, siempre siguiendo la cresta. Llegamos a la Collada de la Batllia (1.576 m). Nuestro camino sigue al frente pero antes hacemos una visita a la cumbre del Cingle de la To (1.624 m). Hay trazas de camino aunque en algún punto la vegetación dificulta un poco el paso. En pocos minutos llegamos a la cumbre. Es una cima poco destacada, con muy poca prominencia, situada en lo alto de un paredón, pero nos ofrece un panorama muy extenso.
Volvemos a la Collada de la Batllia y retomamos el camino, que sigue por la cresta pasando por varias cumbres secundarias, todas ella prácticamente imperceptibles, cubiertas de bosque. Tras un largo trayecto por el lomo de la montaña llegamos al Collet de la Font de Tudó (1.646 m).
En este collado, poco marcado, dejamos el camino de la cresta para tomar un sendero a nuestra izquierda que baja por el bosque. Es un magnífico hayedo que recorremos por un sendero señalizado, como casi todo el recorrido, con marcas de PR (blanco y amarillo). Poco antes de legar a la Collada del Tosquer llegamos a un corto paso equipado, el Grapissot, un pequeño flanqueo descendente equipado con un cable a modo de pasamanos.
Llegamos a la Collada del Tosquer. A partir de aquí nuestro camino seguirá carenando durante un largo trecho, con diversas subidas y bajadas. Llegamos a un nuevo collado con un cruce de caminos. A la izquierda, un camino señalizado nos llevaría de vuelta a Manyaneu recorriendo 3 km y pasando por la Font d eles Travesses, un lugar singular con hayas monumentales. Al frente, el camino lleva también a Malanyeu recorriendo 6 km y cabalgando la larga cresta de la Serra del Mill.
Nuestro track sigue el camino más largo. Es un recorrido totalmente por la cresta, con varias subidas y bajadas pero poco pronunciadas. Hay algún pequeño tramo rocoso que el camino evita y algunas zonas en las que el camino discurre por la vertiente norte y la humedad hace que algunos pasos sean resbaladizos. Hay que ir con cuidado.
Tras un largo y pintoresco recorrido por la cresta, poblada de robles, llegamos a un collado denominado "el Replà". Como su nombre indica, hay una pequeña zona llana y una bifurcación de caminos. Al frente, el camino (PR) nos llevaría hasta Sant Julià de Cerdanyola pero tomamos un sendero a la izquierda, también señalizado como PR. El camino baja con fuerte pendiente evitando los cortados e incluso con un corto paso equipado con una cuerda fija (el Mal Pas). Se llega a un pequeño altiplano, la Creueta, sonde hay una cruz de madera. Después seguimos bajando y pasamos por debajo de las altas paredes que antes habíamos recorrido por encima. Pronto llegamos a una zona menos escabrosa, con prados y la masía de Monnell, una costrucción moderna pero bien integrada en el entorno.
Bajamos unos metros por el prado, sin camino, hasta retomar, junto a la pequeña edificación de La Solaneta, un sendero nuevamente señalizado. El sendero baja ligeramente hasta cruzar en torrente en otro punto singular, con un pequeño salto de agua. Poco después desembocamos en una pista que nos lleva ya directamente hasta el punto de partida en la población de Malanyeu. Antes, pasamos por el Llomà, una pequeña agrupación de casas.
Aquí podéis ver un vídeo con escenas de esta ruta. Ha sido producido por Joan Guirao y publicado en su blog ( Muntanyes i paisatges):



Más información en mi blog: BLOG DE MUNTANYA