Lago Ausente + peña Requejines (2030 m.) y peña El Ausente (2051 m.) desde el área recreativa 'El Praíco'

Punto de partida: Área recreativa 'El Praíco'.
Espacio protegido: Parque Regional Montaña de Riaño y Mampodre.
Época recomendada: Verano.
Elementos de interés: La turbera de la Loma Fonfría, el lago Ausente y las vistas panorámicas desde las peñas Requejines y Ausente.
Tipo de camino: Senda balizada con el PR-LE 26 "Lago Ausente". En el trascurso de la ruta se cruzan varias turberas cuya vegetación no se debe pisar para evitar su degradación.
Servicios: La ruta parte de un área recreativa situada en la Venta de san Isidro donde existe una pensión-restaurante y en Isoba se encuentran varios establecimientos que dan comidas y alojamiento; en Puebla de Lillo se pueden visitar las casas del parque valle del Porma y el torreón.

Descripción del itinerario.

Recuperando una vieja ruta para subir al lago Ausente, este itinerario parte del área recreativa "El Praíco", situada en La Venta de san Isidro a orillas del río Isoba. En esta área encontramos unos cuantos merenderos y el panel informativo de la ruta (figuras 1, 2, 3, 4 y 5).

Para empezar hay que atravesar el prado por el que corre el arroyo de Fonfría, en dirección a unas grandes rocas pegadas a la ladera. Allí se inicia un desbroce por el que ganamos altura rápidamente, en un tramo duro pero que se suaviza cuando la trocha describe varios zig-zag para acercarse al encajado cauce del reguero Peñón (figuras 6, 7, 8, 9, 10 y 11).

Un poco más arriba la pendiente se atenúa definitivamente, justo en el lugar donde nuestro sendero cruza el arroyo para avanzar hacia el este por una vaguada que desemboca en una amplia cubeta colmatada, ocupada por una de las turberas más extensas y llamativas de cuantas existen en la Loma Fonfría (figuras 12 y 13).

Debemos rodear la turbera para continuar subiendo a través de un matorral bajo de brezos y escobas, hasta salir a una pista pedregosa procedente de la estación invernal de san Isidro. Girando a la izquierda esta pista se trasforma, poco más adelante, en una empinada senda de montaña que sube directa al lago Ausente, en un repecho final duro pero muy breve (figuras 14 y 15).

A orillas del lago finaliza la ruta, en un paraje de extraordinaria belleza formado por un soberbio circo glaciar excavado en la ladera del macizo que forman el pico Ausente y la peña Requejines (figuras 16, 27 y 28).

Como una derivación más montañera que senderista, desde el lago es posible ascender con relativa comodidad a la cumbre de Requejines, por la cresta que cierra el cuenco del Ausente por el oeste. El esfuerzo merecerá la pena por la gran panorámica que se domina desde la cima (figuras 17, 18, 19 y 20).

Para cerrar el círculo del circo glaciar la mejor opción es coronar la peña el Ausente con unas increíbles vistas hacia el lago además de otras cimas de notable entidad como son el Susarón o el Bodón de Lugueros (figuras 21, 22, 23, 24 y 25).

Sólo nos quedará acometer el descenso con suma precaución bordeando el lago Ausente contando así con otra panorámica a ras de agua, recorriendo de esta manera su longitud total (figura 26).

Impresiones.

El lago Ausente fue el último que nos faltó por conocer de origen glaciar del alto Porma. Tras visitar los lagos Isoba y Ubales, éste ya en Asturias, el Ausente no podíamos dejarlo pasar por alto. Disfrutar de sus aguas turquesas a la sombra de un circo, huella del pasado glaciar de la zona, además de las increíbles vistas desde las cimas Requejines y Ausente que envuelven el lago, son las grandes atracciones de un recorrido que se vende solo.