LAGO DE PROSERPINA-EN MERIDA-BADAJOZ-04AGO2011

Esta situado a unos 5 kilómetros de Mérida, el embalse romano de Proserpina data del siglo I después de Cristo. En el año 1993 fue declarado Patrimonio Mundial por la UNESCO como parte de los monumentos integrados en el Conjunto Arqueológico de Mérida.
Esta situada a unos 5 kilómetros de la ciudad de Mérida, la presa romana de Proserpina data en una cronología más o menos exacta, de los últimos años del siglo I después de Cristo y de los primeros del siglo II. A los pies de la Sierra de Carija, forma embalse a partir del arroyo de Las Pardillas, subafluente por margen derecha del río Guadiana. En origen, la presa y su embalse formaron la cabecera de uno de los tres grandes sistemas de abastecimiento de agua a la colonia Augusta Emérita, perdiéndose más adelante esta función pero manteniéndose su conservación y su uso en otros menesteres, que junto con algunas labores de reparación de la estructura han mantenido la presa en buen estado de conservación hasta nuestros días.
Su estructura está formada por un muro pantalla, que llega a tener una altura máxima de 21’60 metros y tres alineaciones rectas que en total suman 427’80 metros de longitud. Además, en la margen izquierda del embalse se encuentra un muro auxiliar de unos 100 metros que sirve para cerrar algunos vanos donde el terreno queda por debajo de la cota de coronación.
Estos muros tienen como función principal la de impermeabilizar, gracias sobre todo a su núcleo de cal. La función de resistencia del agua la lleva a cabo el terraplén situado delante del propio muro.
Nutrida por el afluente y por algunas escorrentías anuales, la presa recibe también el trasvase de parte de los caudales de una cuenca adyacente, la del arroyo de Las Adelfas, y que puede devolverse a su cauce en cuanto el embalse tuviese agua suficiente. Durante prácticamente toda su historia se ha convertido en el lugar de recreo y de feliz memoria para toda la población de Mérida, como autentica “playa” de la ciudad, ofreciendo aún hoy multitud de actividades lúdicas y de recreo. Desde el año 1993 la presa y el embalse de Proserpina forman parte de los monumentos integrados en el Conjunto Arqueológico de Mérida, declarado Patrimonio Mundial por la UNESCO