Lanestosa-Peña del Moro-El Mazo-Reluso/Relux-Barrio de Matienzo-Barrio de Ambasaguas (Valle de Carranza)

NOTA: He creado el track a mano porque tuve un problema de orientación bastante importante a partir del collado de Torca del Moro, que separa las cumbres del Peña del Moro y El Mazo. La subida a El Mazo se realiza por una zona con muchas rocas, hierba alta y arbustos, donde el sendero a seguir o no se distingue bien o desaparece. No llegué a ver marcas o hitos como en anteriores puntos de la caminata, y eso me perjudicó a la hora de ir por el sitio correcto.
He decidido por eso eliminar mi track original e incluir lo que a priori es el tramo correcto de ascenso. En cualquier caso, tened mucho cuidado, estad muy pero que muy atentos al terreno, e intentad no alejaros en exceso de la línea indicada en el track, o os pasará como a mi, que me fui poco a poco alejando, hasta tener que sortear como podía numerosos tramos incómodos, repletos de maleza y rocas sin rumbo definido.

Existe la opción de evitar ir por el collado y avanzar por un sendero a priori ancho, cómodo y en llano, situado cerca del waypoint "Ojo, izquierda", que hace un largo rodeo por el exterior, tras realizar varios desvíos, hasta llegar a la pista de cemento de las antenas de El Mazo. Decidí no ir por aquí porque iba a tener que andar más del doble de distancia que por el collado, y tenía serias dudas de si me daría tiempo a hacer lo que me restaba de ruta y coger el bus de Ambasaguas a tiempo.


Vuelta al País Vasco desde Ermua. Etapa 154:

Comienzo en la pequeña localidad vizcaína de Lanestosa, situado en el extremo occidental de la comarca de Las Encartaciones y de la provincia, haciendo frontera con la comunidad autónoma de Cantabria.
Esta localidad es la más alejada de Bizkaia y se sitúa en el top 5 de toda Euskadi con respecto a mi pueblo, Ermua, con una distancia en línea recta de 76km y de 122km por carretera. Y es también uno de los pueblos donde se requiere más tiempo de acceso, al menos por transporte público, unas 3-3h y media aprox (solo Ida).

Con estos datos a mano, me he visto obligado a tener que realizar la ruta un día entre semana y no un Sábado o Domingo como acostumbro a hacer, para aprovechar la mayor frecuencia de autobuses.
Las líneas de bus a coger, partiendo desde Bilbao, son la A0651 hasta la parada de Lusa (Zalla) y la A0652 directo a Lanestosa. La vuelta hay que hacerla del mismo modo pero a la inversa, partiendo desde el barrio de Ambasaguas, en el Valle de Carranza.

Así pues, una vez recorro parte del pueblo de Lanestosa, camino unos pocos metros por la carretera que lleva hasta Ambasaguas, para luego desviarme a la izquierda.

Ahora, me dispongo a ir hacia la primera cumbre de la jornada, el monte Peña del Moro, yendo a través de la "ruta de las escaleras", o así al menos lo llaman los habitantes de Lanestosa al recorrido que haré a continuación.

Avanzo cuesta arriba por una estrecha pista de cemento, que luego se convierte en una escalera con numerosos peldaños. Dicha escalera conduce hasta una doble cueva, que antaño fue una mina. La entrada principal se encuentra arriba, junto a un mirador, donde se observa la localidad de Lanestosa casi al completo.

Este lugar recibe el nombre de Cueva de los Judíos. Aquí se haya el centro de interpretación de KobenKoba, donde realizan una exposición de réplicas de las pinturas rupestres más importantes de Europa.
Como era de esperar, a día de hoy, en plena pandemia del Covid, el acceso a la cueva está cerrado. Mas información en el enlace de abajo.

Cueva de los Judios

Dejo atrás la cueva y avanzo primero por camino herboso y luego por senda de piedras. Aquí el terreno pica hacia abajo en varios momentos, pero no tardo mucho rato en volver a ir hacia arriba.
Hago un giro a la derecha, y ahora si, asciendo en fuerte pendiente por un sendero natural que se adentra en un denso bosque.

El sendero es muy estrecho, y aunque hay muchos árboles y alguna roca por la zona, el camino se distingue con relativa facilidad (siempre y cuando no haya demasiada hojarasca). A esto hay que añadirle que hay numerosos círculos de color azul y naranja pintadas para poder ir por el lugar correcto, cosa de gran utilidad si hubiera niebla.

A medida que asciendo, el sendero se estrecha más y más, y el terreno es cada vez más caótico, con la roca ganando bastante protagonismo, pero aún sin tener que andar sobre ella.
Subir se sube bien por esta zona, pero bajar... habría que tener cuidado, especialmente si estuviera mojado o hubiese niebla, ya que existe la posibilidad de patinar y llevarse un buen coscorrón.

Más adelante, la arboleda va desapareciendo, hasta ir ya a cielo abierto. Es en este punto donde disfruto de una magnífica panorámica de varias sierras de montaña de considerable tamaño, pertenecientes a la comunidad de Cantabria, al lado del conocido como Valle del Asón.

Continuo ascendiendo, y ahora si que camino sobre piedras, aunque sin incomodarme lo más mínimo.
Poco después, avanzo al lado de unas barandillas de madera, y acto seguido asciendo por otras escaleras, éstas con los escalones más elevados.

Una vez arriba, me encuentro en un punto llano, donde la panorámica se amplía aún más, pudiendo observar la sierra de Ordunte al completo, los montes de Asón y al frente la zona de roca caliza de ésta sierra en la que me encuentro, el Ubal.

Avanzo de frente, por un ancho y cómodo sendero de tierra-hierba, aunque he de ir mirando el track ya que cuando menos lo espero, tengo que desviarme a la izquierda para iniciar el ataque a la primera cumbre del día, la Peña del Moro.

Asciendo unos metros, paso al lado de una estación sísmica, y enseguida tengo a la vista la doble cima de este monte rocoso. El acceso a la cumbre no es cómodo, hay que hacer varios desvíos, y el camino a veces no es todo lo evidente que uno querría, aunque tampoco es complicado, siempre que os aseguréis de ir mirando a los lados y el track de vez en cuando. Además, hay algún que otro cartel y marcas señalizando los desvíos.

Por aquí teóricamente pasa el GR 123 de la Vuelta a Bizkaia (la oficial, que "simplemente" rodea la provincia, no la mía que es inventada, y que la recorre casi por completo), así que no deberíais tener problemas en llegar hasta las inmediaciones de la cumbre.

Más adelante, llego a un punto donde tengo que tomar una decisión, o ir a la izquierda para ascender al collado final del Peña del Moro, o seguir por la derecha (izquierda si bajáis de la cima) para ir al collado de Torca del Moro, que separa las cimas del Peña del Moro y El Mazo. Así pues, giro a la izquierda.

Serpenteo por un fino sendero de tierra, hasta dar en pocos minutos con el collado. Aquí hay otras 2 posibilidades: girar a la izquierda y ascender a la cima de Peña del Moro (cumbre principal) o girar a la derecha y ascender a una cumbre secundaria.

Lo cierto es que tenía un tiempo limitado para hacer la ruta, 8h, a priori suficientes (de hecho me acabó sobrando 1h y cuarto), pero es que los primeros 4km de recorrido fueron extremadamente lentos (2h tardé en llegar hasta aquí, y aun faltaba por hacer lo peor), así que decidí ir directo al grano, y dejarme de picos secundarios. Giré a la izquierda para ascender a la cumbre principal, yendo por una pequeña pero escarpada cresta.

Solo hay que andar unos 100m para llegar a la cima, pero el acceso al mismo es complejo. Hay que sortear numerosos bloques de roca por una vía algo estrecha, con muchos huecos entre ellos que en caso de no ir atento, es muy fácil que los pies se queden encajados, perder el equilibrio y hacerse una avería importante, más aún si hiciera mucho viento, tal y como ocurrió hoy en las cumbres.

Finalmente, alcanzo la cima de la Peña del Moro (818m).
Vaya pedazo de vistas hay desde aquí, absolutamente descomunales. Se observan sierras o macizos como los montes de Asón, Peña Candina, Pico Cerredo, El Mazo, Cotobasero, Armañón, sierras de Sasiburu, Ganekogorta y Ordunte e incluso el Anboto.
También se distinguen varias localidades como Ramales de la Victoria, Gibaja, Ampuero, Laredo y El Puente, además de distinguirse perfectamente el Mar Cantábrico.

Tras las mas que obligadas fotos de rigor, vuelvo sobre mis pasos, a paso de tortuga a pesar de que voy a contrarreloj. Me hubiera gustado subir también a la cercana antecima, a priori no debía de tardar demasiado en llegar arriba, pero quería ir lo más rápido posible y no perder tiempo. No podía permitirme ir al límite de tiempo, bien por mi lentitud al andar o por cometer en cualquier momento errores de bulto, no estando tan lejos de casa, así que lo dejé pasar.

Bajo hasta el cruce de caminos, y ahora giro a la izquierda para descender 300m de desnivel por otro estrecho y delicado camino (de nuevo hay que ir atento a lo que hay por el suelo, pero en general no tiene mayor dificultad) y luego hacer otro giro a la derecha hasta llegar al collado de Torca del Moro, punto clave del recorrido.

En frente tengo a la vista el también rocoso monte de El Mazo, y al lado unas horrendas antenas de televisión. Por atrás veo la impresionante cara Éste del Peña del Moro.

Lo primero es avanzar en semillano por unos pastizales, pero luego toca ascender por terreno que alterna tierra, hierba alta, maleza y rocas.

Aquí tuve el único pero importante incidente del día, ya que no conseguí encontrar el camino correcto para llegar a la siguiente cima. Al principio parecía que andaba por buena senda (al parecer hay varias), pero luego ésta se esfumó y ya no supe por donde ir. Me iba alejando más y más de la cumbre, hacia el lado derecho, cuando lo que tendría que hacer es ir hacia el lado izquierdo.

Como dije arriba, el tramo que he incluido en el track es a priori la vía correcta de ascenso a El Mazo. En cualquier caso no hay senda definida, y el terreno es verdaderamente caótico. Lo único que tenéis que tener claro es que hay que ir por el lado izquierdo, no el derecho. Tomad como referencia las antenas y de ahí ir o recto o hacia la izquierda.

No tuve otro remedio que improvisar, y superar como pude todos los obstáculos que tenía por delante.
Finalmente, y con mucha potra, acabé encontrando el camino que me llevaría directo a la cima de El Mazo (823m). Aquí las vistas también son maravillosas, aunque las estropea un poco la fina arboleda que hay en uno de los lados, aunque no lo tapa demasiado. En general son muy similares a las de Peña del Moro, pero aquí la novedad es poder observar el Valle de Carranza al completo, mi próximo destino, el monte Reluso o Relux, y por otro lado se ve más nítidamente las localidades costeras de Laredo y Santoña.

Ahora, retrocedo unos metros hasta dar con una valla, el cual se puede superar apoyándose en unos tocones de madera.
Avanzo unos metros por una pradera hasta dar con una pista de cemento, justo donde encuentran las antenas.

Ahora mi objetivo es ascender la tercera y última cumbre del día, el Reluso o Relux.
Para ello, desciendo unos pocos metros hasta que veo en el track que por el lado izquierdo tengo la posibilidad de atajar y acceder a otra pradera, que me facilita el acceso al Reluso, en vez de dar un largo rodeo por la pista.

No tardo mucho tiempo en dejar la pradera para ir por un sendero... que pronto desaparece.
Hay una enorme pega que tiene esta zona, y es que está plagada de vallas de alambre, muchas de ellas inexpugnables. En la primera que me encuentro, a pesar de que hay un neumático a cada lado de la valla, no veo la forma de poder superarlo por encima sin llevarme un buen ostión y de paso agujerear la ropa.
Por fortuna, vi que por abajo había hueco suficiente como para traspasarlo, aunque fuese reptando o de espaldas.

Dejo atrás la primera valla para luego, enseguida, encontrarme con la segunda, aunque esta si tiene fácil acceso. Además viene señalizada con un cartel que indica "Relux".

Avanzo por un estrecho pero cómodo sendero que me lleva directo a un bonito y curioso lugar, la Ventana Relux. Se trata de una abertura natural provocada por la erosión, que tiene una vista directa hacia el pueblo cántabro de Gibaja.
Por encima de la "ventana" también se disfruta de magníficas vistas, aunque obviamente éstas serán mejores desde la cercana cumbre del Reluso o Relux. Hacía allí me dirijo.

Para acceder al Reluso, las posibilidades son infinitas. A pesar de que también hay numerosas rocas en la ladera, en esta ocasión el avance no resulta muy problemático, al menos subiendo. Hay que buscar la zona con mejores apoyos para los pies, procurando no alejarse demasiado del waypoint de la cima. Lo mejor es ir lo más hacia la derecha posible, pero sin llegar al acantilado.

Unos minutos después, hago cumbre al monte Reluso o Relux (783m). De nuevo, las vistas son preciosas. Prácticamente son un calco de las que se ven desde El Mazo, con la novedad de ver más de cerca las sierras de Ranero, Armañón, Alen, parte del Gorbea y las localidades de Gibaja, Rasines y el Valle de Carranza, pero ésta vez sin ningún árbol por medio.

Tras las fotos de rigor, vuelvo sobre mis pasos, descendiendo primero con mucho cuidado la ladera del monte, aunque esta vez yendo más en diagonal, igualmente buscando el mejor paso.

Supero la valla, y continuo de frente, primero por la pradera y luego por un ancho sendero de tierra, hasta llegar lo que parece un centro de ordeño de vacas.

Aquí giro a la izquierda y sigo descendiendo cómodamente por un ancho sendero que alterna tierra y piedras.
Más adelante, en un cruce, giro a la derecha y prosigo la marcha por una pista de cemento.

Al final del mismo, llego hasta el barrio de Matienzo, perteneciente al Valle de Carranza.
Ya solo tengo que avanzar por una carretera que me lleva directo hasta mi destino, el barrio de Ambasaguas, donde pongo punto y final a esta exigente, complicada aunque preciosa ruta.


PD: He visto varios tracks de usuarios que han pasado por muchos de los tramos por los que he ido hoy, y me sorprende que haya habido mas de uno que lo haya indicado como FÁCIL.

No todos los recorridos son iguales, y la capacidad o nivel de la gente tampoco. Pero hay que ser realistas, la parte montañera de la ruta NO es para calificarlo como FÁCIL, por 3 sencillas razones;
1-Físicamente es bastante exigente por la distancia y sobre todo el desnivel acumulado.
2-Tecnicamente es complicada, porque hay que andar mucho rato sobre roca y por senderos estrechos, con el riesgo que ello conlleva (y eso que hoy estaba todo seco, en mojado y/o con niebla no me lo quiero ni imaginar).
3-No es para nada sencillo de seguir, sobre todo a partir del collado de Torca del Moro, que ni aún mirando el track constantemente te asegura ir por el lugar correcto.
Con todo esto en su conjunto, diría que la dificultad real es MODERADO ALTO-DIFÍCIL.

Es cierto que hay bastante gente que tiene facilidad para hacer rutas físicas y técnicas, y ya por ello califican sus recorridos como si de un paseo dominguero se tratase. Pero hay que ser realistas, y pensar que una mayoría de personas no disponen de esas cualidades o nivel, y por por tanto la calificación hay que hacerla en base a esa gente.
Sin ir más lejos, el único momento en el que me encontré a alguien en la ruta fue en la Ventana de Relux. Hacían una ruta por la misma zona, aunque más corta que la mía. Sin embargo también se perdieron, y eso que estaban siguiendo un track de otro usuario que lo calificó como "fácil", y obviamente no estaban satisfechos con ello.

Como consejo simplemente decir que estéis atentos a lo que tengáis delante, aseguraos cada paso, y procurar en la medida de lo posible ir con un clima y estado del terreno favorable.

El tiempo total decido a la ruta ha sido de 6h y 48min, sin haber hecho paradas más que para beber y sacar fotos.