Las Batuecas-Peña de Francia-Rongiero-Las Batuecas

Subida por el precioso valle de Las Batuecas en un día de lluvia. No es lo más aconsejable, ya que las pizarras están recubiertas muchas veces de un liquen que cuando se moja patina una barbaridad. Y no hay suela que valga. El sendero está muy pisado hasta el desvío al chorro. A partir de ahí el camino está menos marcado, pero bien hitado con numerosos mojones. La parte más compleja (en mojado), es al llegar a la altura de unas espectaculares cascadas. Hay que vadear el torrente en varias ocasiones y atravesar lanchas de roca, muy resbaladizas con tiempo húmedo. Luego viene una fuerte pendiente y la salida más llevadera a un collado donde encontramos un chozo remodelado.
Hasta la parte alta del valle no saqué fotos por culpa de la lluvia.
La prolongación hasta la Peña de Francia es sencilla.
A la vuelta subimos a la Mesa del Francés y en la bajada erramos por culpa de la espesa niebla, tomando un cortafuegos equivocado. De todas formas no nos supuso mucho tiempo de de pérdida el contratiempo ya que terminamos en una pista que nos devolvió al cordal.
Subida final al Rongiero por una ladera de piedras resbaladizas con la lluvia.
En la bajada del Rongiero hay que ir fijándose bien en el sendero para no perderse entre los piornos y brezos. Al llegar al Collado de las Fuentes bajamos por el pinar limpio y luego seguimos el fondo de una tartera relativamente cómoda donde descubrimos un tejo solitario de buen porte. De esta forma salimos al camino que viene del Puerto de Monsagro. Seguimos este camino hasta casi la vertical del convento, tomando allí una senda que en lazadas y pronunciada pendiente bajaba hasta el río. En este último descenso hay que bordear algunas encinas abatidas sobre el camino.