Las Calderas desde Palacios de la Sierra

Para llegar al punto de inicio de la ruta desde la travesía de Palacios de la Sierray y unos metros antes de llegar al puente sobre el Arlanza que nos llevaría hasta el centro de la población, hay que tomar un ramal asfaltado hacia la izquierda. Tras pasar un paso canadiense el camino se transforma en pista en bastante buen estado. Después de haber recorrido unos tres kilómetros desde el pueblo aparcamos el coche. El primer tramo es una cómoda subida por la pista que nos llevará hasta un collado denominado Puerto Rico (1.192 metros), donde se unen varias pistas. Continuamos recto atravesando una amplia pradera, denominada Prado la Nava en la que pasta el ganado y en paralelo a un muro de piedras. Al llegar al final de la pradera, nos encontramos con dos cortafuegos, tomamos el que gira a la izquierda por el cual continuaremos unos pocos metros. Enseguida hay que buscar un gran hito de piedras en el lindero del bosque que nos indica el camino que se interna en el mismo. Este camino con abundantes piedras y vegetación nos llevará a una amplia pista situada a 1.330 metros de altura.

Tomamos la pista hacia la derecha, sin excesiva pendiente hasta su final. A partir de aqui nos guiarán los hitos de piedra. Tras pasar una pradera, enseguida cruzamos sobre el Arroyo de la Fuente del Moro, tras pasar un frondoso salimos a otra zona despejada. Pasamos otro corto tramo por un bonito bosque para llegar a un altozano situado a 1.740 metros, desde donde dominamos el Paso de las Calderas.

Bajamos al camino, en el fondo de las Calderas que discurre junto al río donde la progresión es más fácil, aunque hay que ir salvando los diferentes accidentes geográficos que se nos presentan. A veces transcurre plácidamente por el fondo del cañón, otras supera una empinada pendiente por la ladera de la izquierda. Tras superar el que es posiblemente el rincón más bonito, en el que una bonita cascada se desploma en el interior de una marmita, y al que hay que acceder por un estrecho pasillo de roca asegurado por un cable, llegamos al último tramo de este pasaje, en el que tras reptar literalmente por un angosto paso y superar un estrechamiento accedemos a un amontonamiento de grandes rocas, en el tendremos que hacer un poco de equilibrio. Finalmente llegamos a un salto de unos tres metros totalmente insalvable. Para volver un estrecho sendero me llevó a contactar al punto donde había accedido al paso de las Calderas. Desde aquí solo nos quedaba desandar el camino de subida para retornar al punto de inicio donde llegué sobre las siete de la tarde.

Ruta en la que visitaremos para mi gusto uno de los rincones más espectaculares de toda la provincia burgalesa como es el conocido como Paso de la Calderas. Microcosmos de caprichosas y sugerentes formas labradas por la acción del río Palazuelos. En este caso accederemos por la vertiente sur partiendo del pueblo de Palacios de la Sierra. La ruta puede resultar un poco monótona ya que hay varios tramos de pista y un tramo por bosque un poco farragoso con bastantes piedras y vegetación. Pero una vez terminada la pista la ruta se hace bastante bonita transcurriendo por bonitos rincones guiándonos por los hitos que sin ningún problema nos llevarán hasta las Calderas. El recorrido de las Calderas puede hacerse a la carta aunque posiblemente el tramo más bonito sea desde el punto en el que accedemos tomarlo en sentido descendente. Hay que avisar que el recorrido por el fondo de las Calderas aunque hay sendero, resulta bastante salvaje, en el que tendremos fuertes ascensos y descensos, teniendo que reptar en algún momento y hacer pequeñas trepadas. Posiblemente sea más bonito el acceso desde las Lagunas de Neila que este desde Palacios. También existe otro acceso partiendo de la localidad de Monasterio de la Sierra.