Las Mesas y eremitorios de Manzanedo. Por Argés, S. Martín del Rojo, alto de las Mesas, Cueva de los Moros y S. Pedro. GR-99

Ruta circular por el Valle de Manzanedo.

En esta ocasión vamos a rodear y luego asaltar una pequeña altiplanicie llamada Las Mesas y las Mesillas.

Salimos desde el aparcamiento que existe a la altura del río Ebro entre el eremitorio rupestre de San Pedro y el cruce de carretera para subir a Argés.

Nos dirigimos unos cientos de metros para subir a Argés por el camino viejo.
Se trata de un tramo maravilloso de hierba y lastras rodeado de quejigos.

Llegamos a la entrada de Argés, a la carretera, y giramos a la derecha para enseguida tomar una senda a la izquierda que nos lleva al mirador de Argés.

El lugar es precioso y las panorámicas son todo un espectáculo con el valle a nuestros pies y los Castros al frente.

Desde ahí continuamos por el camino hacia San Martín del Rojo.

Todo un deleite paisajístico.

Algún tramo se ha perdido, pero no es complicado continuar.

Se sortea una granja con ganado vacuno y se accede a San Martín del Rojo entre fincas y alambradas.
Algo desagradable y cada vez más habitual debido al despoblado de nuestra comarca.

En este pueblo se localiza una joya románica.
La iglesia de Nuestra Señora de la Asunción es un templo modélico y ortodoxo de este estilo.

El camino cruza fincas y finaliza en la ladera de las Mesas.

Para ganar la cima del alto de las Mesas debemos marruyear entre zarzas y encinas.

Cuando encimamos, las vistas hacia el norte son increíbles.

Villasopliz y la Bellota se divisan rápidamente y la ladera meridional de la sierra del Rojo.

Una alambrada nos indica con claridad el camino hacia Manzanedo.
En esta meseta se localizan casetas de pastores y que ya prácticamente todas están derruidas.

La salida de esta altiplanicie se realiza por una senda hacia Manzanedo descendiendo rápidamente.

Entre medias, se halla un eremitorio antiguo llamado por los lugareños la Cueva de los Moros.

El rincón es de cuento, con una pequeña cascada en una roca de toba.

Se llega a Manzanedo enseguida.
Se cruza y por la carretera sentido Villarcayo nos ponemos a la altura del cartel que nos indica hacia Manzanedillo.

Se cruza el puente e inmediatamente se toma el GR-99 río abajo.

Así pasando por la finca de Retuerto y enseguida hasta la pasarela que cruza el río Ebro por la que se accede sin pérdida al eremitorio rupestre de San Pedro.

De ahí a nuestro punto de partida es un pequeño tramo.

Ruta muy interesante y sencilla por el valle más despoblado de Merindades.

La historia de esta tierra y el paisaje son los verdaderos protagonistas.
Nosotros los testigos.