Las Sampolas de Valero

El nombre original de esta sierra que vamos a subir por su umbría no era Ampolas, ni siquiera Amapolas como creí leer una vez, si no Sampolas.
El término viene del apellido Sanpol, que ya aparece en Puertomingalvo en 1313 (Domingo Sanpol).
En 1479 ya se utiliza este topónimo en singular, que se sigue utilizando hasta el siglo XIX, también en plural. A partir de entonces pasa a ser Ampolas.
La cima y las diferentes alturas reciben el nombre según la finca donde se encuentran. El vértice geodésico está sobre el Mas de Valero, ergo Sampolas de Valero.
Partimos del Mas de Cebrian donde estábamos alojados. Recorremos una zona adehesada entre sembrados con prados, pinos albares y sabina rastrera antes de alcanzar el barranco de la Mimbrera por donde subiremos al vértice geodésico. Volveremos por otro valle paralelo hasta alcanzar el itinerario de ida en el barranco de la Mimbrera.
Salimos del aparcamiento y tomamos el camino a la Masía Torre, bordeando el polje de Mosqueruela.
Tras pasar la atestada Masia por las ansiosas ovejas en espera del pastor nos desviamos a la izquierda para recorrer el piedemonte por una zona entre prados y pinos con algunos corrales dispersos.
Al llegar al camino que viene desde el pino del Letrado vamos a la derecha para alcanzar el barranco de la Mimbrera.
Tomamos el camino que pasa por la recoleta Masía rodeada de cerezos, y con el entorno limpio. Tras dejarla atrás volvemos a salir al camino que remonta el barranco.
Poco después de dejar a la izquierda el Mas del Cabezo llegamos a un cruce de caminos, donde dejamos el de la derecha que sigue por el barranco para ir por el de la izquierda.
Este camino va remontando el bosque con una pendiente moderada hasta que se acaba abruptamente. Continuamos por algunos difusos rastros hasta salir a otro camino que pasa un poco más arriba.
Lo seguiremos hasta cerca del vértice. El último tramo es monte a través por un bosque bastante abierto.
Tras estar menos de lo que hubiéramos querido en la cumbre por el fuerte viento, volvemos sobre nuestros pasos para alcanzar el camino. Lo seguiremos en suave bajada hasta poco después del Masico de Vives.
Aquí tomamos el camino que nos lleva al Masico Quemado. Lo rodeamos y seguimos un viejo camino medio perdido que nos acerca hasta el barranco de la Mimbrera, justo debajo de la Masía.
Vamos junto a los campos con gruesos muros transversales al barranco para contenerlo hasta alcanzar el camino que viene del Masico de Tablas.
Aquí enlazamos con el tramo que vamos a repetir de vuelta hasta el Mas de Cebrian.
Ha sido una ruta tranquila casi en su totalidad por cómodos caminos de pendientes moderadas.