Librilla. Barrancos Infierno y Librilla. Barrancos de Gebas

Librilla. Barrancos Infierno y Librilla. Barrancos de Gebas

El Barranco de Gebas es sin duda uno de los parajes singulares de la Región de Murcia, declarado Paisaje Natural Protegido en 1995. Se trata de un entorno desértico compuesto por arcillas y terrenos margosos muy erosionados por la acción del agua, junto a suelos halomorfos, consecuencia de procesos de salinización en el fondo de los cauces.

Gebas está constituido por diferentes caserios (Casas del Mojón, de la Ermita, Jalisco, Casas de Arriba, de Abajo y del Estanco), que ocupan una franja territorial que se ordena en torno a la Rambla de Algeciras. Es curioso que a pesar de lo poco favorable del terreno, cuenta con numerosos yacimientos prehistóricos, que poco a poco se van recuperando.

Dos elementos destacan en el Barranco de Gebas: la Rambla de Algeciras, afluente del río Guadalentín por su margen izquierda, emplazada entre el Cerro del Castro de la Atalaya y el pico de Castellar, y la Presa de Algeciras, obra incluida dentro del Plan General de Defensas contra las Avenidas de la Cuenca del Segura.

En la actualidad es un embalse regulador del agua del Trasvase: Cuando la situación lo permite se bombea agua del Trasvase al pantano y cuando falta agua para riego, se invierte la situación, gracias a las dos tuberías de 1300 mm que funcionan de modo reversible.

El termino Badlands se utiliza para precisar un tipo de terreno denominado “malas tierras”.
Son un tipo de paisajes y terrenos de características áridas y extensamente erosionadas por el agua y el viento, debido a la falta de vegetación.

Un ejemplo próximo de este paisaje lo tenemos es la zona comprendida entre los municipios de Gebas, Fuente Librilla, Barqueros y Librilla, más concretamente la zona de la rambla de Algeciras que desemboca en el embalse del mismo nombre.

En esta zona, la existencia de este tipo de paisajes se justifica además de por sus fuertes variaciones climatológicas, por sus escasas precipitaciones y grandes cambios de temperatura, y sobre todo por la gran cantidad de roca sedimentaria.

Otra nota característica de este tipo de paisajes es su escasa vegetación, dónde apenas podemos encontrar algunas plantas aromáticas del tipo del tomillo y del espliego, esparto, etc.

En esta zona de la que estamos hablando, hay una serie de barrancos y ramblas donde podemos apreciar y disfrutar de infinidad de formas, texturas, colores, de estos Badlands y a su vez de una serie de animales y plantas que pueblan dicho paisaje. Me refiero a las ramblas de Librilla y del Infierno.

Vamos a recorrer el sorprendente entramado de cañones y barrancos, que se vertebra en torno a la Rambla de Algeciras, a través del cual se recoge el agua de lluvia en el embalse. Para ello nada mejor que la presente ruta, que recorre gran parte de la Rambla de Librilla.

Tomamos la carretera comarcal C-2 que va desde Librilla hacía Fuente Librilla, continuamos por ella hasta llegar al cruce con el canal del Trasvase Tajo-Segura. En este punto tomamos la carretera asfaltada que veremos a nuestra izquierda y que es paralela a este canal. Descendemos por ella hasta llegar a una rambla de Librilla, nada más sobrepasarla veremos a nuestra izquierda una pequeña explanada donde podremos dejar el vehículo.

La descripción de la ruta está basada en los tracks publicados por F. Iniesta, lamorosangel y wikipedia.

Iniciamos la ruta por la Rambla de Librilla o del río Orón. Las lluvias recientes dificultaron el recorrido por la cantidad de agua y barro arcilloso que habia en la rambla.

Continuamos por el interior de la rambla hasta el inicio del Barranco del Infierno, recorrido sorprendente y de gran belleza. Primero encontramos la zona conocida como “el Órgano” y otras formaciones similares que nos recuerdan imágenes del medio oeste ameriano. Mas adelante, el barranco se estrecha hasta formar una garganta. Recorrimos el cañón hasta el Albergue de los Forestales. En ese punto dimos la vuelta y volvimos por el mismo camino.

Descendimos por la Rambla de Librilla un largo tramo para desviarnos por la derecha por pista con pendiente acusada un pequeño tramo.

Nos desviamos por la izquierda a un mirador natural desde donde pudimos contemplar la red de cárcavas y barrancos de la zona de Gebas.

Hicimos un descenso sin senda, campo a través, aunque sin riesgoa para enlazar con otra rambla sin nombre que nos condujo sin dificultad al punto de inicio. No hay que atravesar el túnel, ascendemos lateralmente por la boca de entrada y salimos a la carretera de servicio del Trasvase. El punto de partida lo tenemos a la vista.

Por la naturaleza del terreno (arcillas y margas yesíferas) no es conveniente planificar esta ruta cuando haya llovido. El suelo se transforma en un barrizal de difícil tránsito.