Llanos de Líbar. El Tunio pasando por la pinza del cangrejo

Ruta corta pero de gran belleza para conocer la cara del Tunio.
Para llegar a punto de inicio de la ruta, desde Montejaque nos dirigimos por pista de tierra que en algunos tramos puede presentar problema para coches demasiado bajos.
Nos encontramos en el Parque Natural de la Sierra de Grazalema. El sendero parte junto a un árbol con varios hitos de piedra en el suelo.
En pocos metros de subida, llegaremos a la Fuente Saucillo, con bastante agua debido a las recientes lluvias en la zona. Continuamos por el sendero, que está bien marcado, hasta llegar a una cancela que a la derecha nos lleva a la "pinza del cangrejo", y a la izquierda hacia la cara del Tunio. Lo realizamos en este orden.
Las vistas en todo momento resultan expectaculares. De camino hacia la pinza de cangrejo, también podemos disfrutar de la Flor de Piedra. La subida hacia al Tunio en algún momento se pierde por la abundante vegetación. Debemos estar atentos a la presencia de mojones para no despistarnos. Advertir que gran parte de la ruta se camina sobre terreno muy pedregoso, con alguna subida/bajada con importante pendiente. Recomendable buen calzado de senderismo, con buen agarre. Las piedras pueden estar resbaladizas por la escarcha y el frío.
Antes de llegar a la zona del Tunio, atravesamos otra alambrada y continuamos hacia la izquierda. Nos encontramos con varios pilones en la zona. Son pilas talladas en la roca, que servían como auténticos congeladores naturales. Durante la noche, las bajas temperaturas congelaban el agua y se extraía el hielo para ser almacenado en los cercanos pozos de nieve. Todo este traslado se realizaba con burros y mulas. Nos podemos hacer una idea de la dureza del trabajo.
Tras disfrutar de la Cara del Tunio, realizar abundante reportaje fotográfico, y un buen rato de charla con dos cazadores que se encontraban por la zona, iniciamos el regreso por la misma ruta.