Lobera de Santiago y Salto del Nervión

Punto de partida: Parking de Hoyalante.
Espacio protegido: Monumento Natural Monte de Santiago.
Época recomendada: El otoño para ver el hayedo pero especialmente durante el deshielo o en periodos de lluvias intensas. El resto del año el salto no tiene agua.
Elementos de interés: La lobera de Santiago y el salto del Nervión. Durante el trayecto también se recomienda una visita a la Casa del Parque y a fuente Santiago.
Tipo de camino: Pista forestal hasta el salto del Nervión y campo a través siguiendo el trazado de las paredes de las loberas.
Servicios: Los establecimientos más cercanos se encuentran en Berberana. Quincoces de Yuso completa la oferta.

Descripción del itinerario.

Monte Santiago es un páramo inclinado hacia el sur-suroeste que limita por el este con la cuenca del Cantábrico a través de una sucesión de acantilados que se desploman varios cientos de metros sobre el cañón del Nervión o Delika. El estrato de caliza de Monte Santiago está profundamente karstificado, lo que significa que se presenta completamente surcado de fracturas, simas y galerías subterráneas que filtran rápidamente la lluvia que cae en superficie.

El inicio lo encontramos en el primer parking del espacio protegido, Hoyalante, al que le acompañan unos cuantos paneles informativos sobre Monte Santiago. Algo más adelante, antes de introducirnos en el hayedo, encontramos el segundo parking, el de Los Cipreses, mucho más pequeño que el primero (figuras 1, 2 y 3).

A la altura de la Casa del Parque realizaremos un giro hacia la derecha que nos conducirá a la lobera, de la que solo nos separan 300 metros respecto a la pared derecha de la lobera (figuras 4, 5, 6 y 7).

Antes de llegar al salto del Nervión encontramos las paredes de la lobera de Santiago, que gracias a su restauración, se puede decir que es una de las más completas que encontramos en Merindades, el territorio de España con mayor concentración de estas trampas: hasta 10. Si por algo destaca la de Santiago es por tener dos fosos, además de una gigantesca recreación del cazador y el lobo.

Situadas en pleno monte, en lugares por donde solía pasar el lobo, las loberas son construcciones-trampa constituidas por largas paredes de piedra que confluyen en un amplio y profundo foso. Se utilizaban básicamente para la caza del lobo que era acosado y dirigido por la batida hacia la trampa. El lobo, en su huida, se precipitaba hacia el hoyo o foso donde era atrapado y rematado.

Las cabañuelas servían para que los cazadores se escondieran cuando pasaba el lobo y azuzarlo hacia el foso sin que tuviese la posibilidad de huir en otra dirección, o escapar de la lobera. De todas las cabañuelas que formaban inicialmente la lobera solo unas pocas quedan en pie. Se pueden observar distribuidas dentro del perímetro de la lobera, entre las hayas y formando parte del paisaje (figuras 15, 16 y 17).

El foso de Hoyo Nuevo es, en realidad, el más antiguo de los dos que forman esta lobera, una característica única en España. De hecho se cree que esta lobera es también una de las más antiguas de la península Ibérica. Su origen podría remontarse a tiempos del Neolítico, cuando se utilizaría para cazar otras piezas que servían de alimento a los grupos humanos que habitaban la zona. Fue utilizada por última vez en el año 1955 (figuras 30, 31 y 32).

Un precipicio vertiginoso e inesperado interrumpe de forma brusca las suaves formas del Monte Santiago donde la provincia de Burgos alcanza su extremo nororiental y el límite territorial con Álava. Una paredes de unos 300 metros de caída vertical cierran el profundo cañón de Delika, donde se sitúa de forma convencional el nacimiento del río Nervión, uno los cauces míticos en Euskadi (figuras 27, 28 y 29).

Datos técnicos sobre la lobera de Santiago:
-Longitud de la pared derecha: 472,2 metros.
-Longitud de la pared izquierda: 544,7 metros.
-Altura y superficie del hoyo: 2,6/4 y 23,94 metros.
-Como elemento distintivo de otras loberas, además de tener dos fosos, cuenta en su pared derecha con una pequeña ventana.