Macisvenda Descenso Rio Chicamo O Rambla de Abanilla Sendero y Garganta del Cajer Ida y Vuelta

Macisvenda Descenso Rio Chicamo O Rambla de Abanilla Sendero y Garganta del Cajer Ida y Vuelta

Hoy nos disponemos a realizar una ruta muy divertida, fresquita, corta pero con mucho contenido de disfrute, la bajada y subida del Rio Chicamo o Rambla de Abanilla (salida natural del Sistema Acuífero de Quibas), afluente del Segura que recorre parte del término municipal de Abanilla. Riega la Huerta de Abajo y Sahués. Sus charcas albergan al pez endémico de la Península Ibérica, en peligro de extinción, llamado Fartet. Pasaremos por distintas formaciones e increíbles paredes con una abundante vegetación de los vergeles y vida que crea el milagro del agua a su paso y que hace una delicia visitar esta increíble zona tan singular de hecho la llaman acertadamente la “Palestina Murciana “ un pequeño oasis entre las áridas tierras de alrededor llamadas malas tierras o tierras yermas que son un tipo de paisaje de características áridas y de litología rica en lutitas, extensamente erosionado por el agua y el viento, debido a la falta de vegetación. Cañones, cárcavas, barrancos, canales, chimenea de hadas (columnas de roca con formas en sus picos) y otras formas geológicas del estilo son comunes en la zona.
Este pequeño río nace bajo la cara Sur de la Sierra del Cantón, a 320 metros de altitud. El paisaje dentro del cauce del río es bastante árido como decimos, con presencia incluso de «Bad-Lands», aunque contrasta con el verde de los bosques de taray y palmeras. El cauce del Río Chicamo está catalogado como Lugar de Importancia Comunitaria (LIC). Se trata de un tramo fluvial de caudal permanente con sistemas de ramblas y humedales asociados. Entre su flora se pueden apreciar palmeras, los baladres, los juncos y los cañaverales y el protegido taray. De la fauna asociada al entorno destaca el Fartet (Aphanius Iberus). Su longitud es de 54 kilómetros, aunque solo 22 mantienen agua de una forma temporal o permanente. Nace cerca de la pedanía de Macisvenda, tras un breve recorrido se encajona en un barranco muy estrecho llamado “Garganta de Cajer”, sigue su recorrido hasta una gran balsa donde el agua se canaliza para el riego y a partir de aquí, prácticamente desaparece su caudal. El desfiladero del Cajer, zona de sorprendente belleza geológica.
Iniciamos desde el parquin habilitado (un descampado que casi siempre hay coches aparcados), al cual llegamos desde Macisvenda tras dejar la carretera del Tollé a El Partidor y nos dirigimos hacia la pedanía de Chicamo y en unos metros vemos una explanada a la derecha que es el punto de arranque. Tomamos la pista de tierra que sale del aparcamiento y nos encontramos con varios carteles indicadores en el mismo rio nada mas bajar y una charca donde ya podemos ver al "Fartet", especie de pez en peligro de extinción, nos dirigimos por nuestra izquierda en busca del Nacimiento una zona muy bonita, limpia y cuidada con una replantación de arboles, vemos como el agua brolla de las bases de las paredes, algo poco común hoy día, este punto nos a gustado mucho, y un poco mas arriba tenemos una casa-Cueva en ruinas pero que se puede contemplar perfectamente todas las dependencias, visita fotos y volvemos sobre nuestros pasos. Seguimos por el camino y al poco debemos bajar un pequeño terraplén hasta llegar a andar casi por el lecho del río (pero aún no nos metemos dentro), primero visitamos el lago mas grande formado por un pequeño Azud, que en la caída desplega una pequeña cascada. Pasamos un centro de interpretación, donde se imparte formación medioambiental y se analiza la cultura del agua, ubicado en el antiguo molino hidráulico restaurado, anteriormente fue La Casa del Molinero, se construyó en el año 1844 por encargo de la Comunidad de Regantes de la Huerta de Abajo y Sahués, dejando de funcionar durante los años 60. A partir de aquí hay un pequeño tramo que la vegetación se va haciendo más densa y debemos cruzar el cauce en varias ocasiones, hay que seguir pegado al lecho del río. Al poco de pasar este tramo nos metemos de inmediato por el agua donde nos encontramos alguna pocita con agua hasta la cintura pero mayormente agua por los tobillos. Estamos llegando a la zona más impresionante del recorrido: la Garganta de Cajer. Un precioso cañón en el que el río se encajona de paso obligado, espectacular Cañon y garganta generado durante millones de años por este río en estado puro desde el inicio de su Nacimiento que brotan sus aguas cristalinas pero que por el paso de zona de arenas cogen un color marrón pero no es suciedad ni contaminación, sencillamente cambio de color. Esta es una zona para recrearse y disfrutar de lo lindo del agua, con sus pozas, pasos estrechos y pequeñas cascadas hacen que el tiempo no pase, el único problema es la acumulación de visitantes, donde todos queremos nuestro momento, aprovechamos para engordar el álbum de fotos. Seguimos bajando y al salir de este tramos el río se ensancha y estamos en una zona de ramblizo, con cañas, juncos, palmeras, etc. Continuamos poco mas por el lecho del río hasta llegar a la carretera que lleva a la pedanía de la Umbría. Ya nos toca volver por el mismo recorrido para disfrutar al máximo el lecho de Río Chicamo y su impresionante Garganta y paredes aunque hemos ido cambiando de vertiente de margen del Río en la subida siempre descubrimos algo que se nos había pasado, sin entretenernos tanto para llegar lo antes posible a los coches y cumplir con el horario
Una ruta que ya venimos repitiendo durante los últimos años y cada vez la encontramos mas atractiva, decir que en esta ocasión vimos bastante más agua que habitualmente en otras ocasiones, para nosotros es cita obligada, no entraña riesgos para la practica de la mayoría de andarines y familias con niños, siempre con el riesgo que conlleva sabiendo que vamos por el cauce de un rio por las piedras, el agua, las cañas y los juncos que en cualquier momento nos la juegan, con la precaución de la parte que va por dentro del rio y todo su barranco y cañón en todo su esplendor es muy aconsejable unos buenos escarpines o botas