Matamulillos - Puntal Matamulos - Cruz de la Chimba

Ruta de subida a los puntales de Matamulillos y Matamulos, pasando por la Cruz de la Chimba desde la Cañada de las Hazadillas (Parque Periurbano Monte La Sierra, en Jaén)

Tras un intento fallido en semanas anteriores, decidimos acometer esta ruta, que es una auténtica gozada, pues durante la misma disfrutaremos de vistas magníficas y estaremos rodeados de una frondosa vegetación, mucho más ahora en primavera.

La ruta comienza en la Cañada de las Hazadillas, junto al Aula de la Naturaleza, donde debemos tomar la pista que sale (y comienza la ascensión) a nuestra derecha. Desde este mismo momento no dejaremos de estar rodeados de bosque, esplendoroso en estos días por las lluvias caídas.

Seguiremos subiendo por la pista hasta que -unos metros más adelante de la cadena que sube a la Cruz de la Chimba- aparezca un pequeño camino a la derecha, que debemos seguir, el mismo enlaza con un cortafuegos (que he marcado) que es la subida más dura del trazado, pero ya comienzan a tenerse unas vistas increíbles.

El cortafuegos nos dejará prácticamente en el Matamulillos, donde ya divisaremos el Embalse del Quiebrajano a nuestros pies, dominando hasta las colas (si no hay nubes puede verse sin dificultad la piedra palo y el barranco de pitillos)

Desde este punto la ruta se torna sendero y continuando el mismo, llegamos al Puntal de Matamulos, donde nos llamará la atención la cueva existente (del montañés creo haber leído) que puede cruzarse.

Tras un breve descanso en la cima, hay que tomar un sendero que baja por el barranco que queda a espaldas del Quiebrajano (nos ha costado unos minutos dar con el mismo)

La bajada es bastante sencilla y me ha sorprendido la gran cantidad de romero en flor que hay en el mismo. Está convenientemente señalizado, por lo que no debe suponer problema alguno.

El sendero desemboca en una pista forestal, que debemos tomar hacia la izquierda, y nos llevará (con un pequeño desvío a la izquierda) a la Cruz de la Chimba, un refugio público, en un entorno de película, con vistas de Jaén, el Castillo de Otíñar, el valle del Quiebrajano, la Pandera... que seguro no te dejan indiferente.

Sólo queda volver al sendero e iniciar la bajada hasta la Cañada de las Hazadillas, con la satisfacción de una ruta que será difícil de olvidar.