Mendaro-Santa Kurutz-Gaintxipia-Arbil-Itziar

Vuelta al País Vasco desde Ermua. Etapa 193:

Ya hemos entrado en el año 2022, y por supuesto que tenía que comenzar la temporada haciendo una nueva ruta.
En este caso, me desplazo hasta la localidad guipuzcoana de Mendaro con el objetivo de llegar hasta el pueblo de Itziar.

Así pues, recorro una parte del municipio de Mendaro, hasta llegar hasta la iglesia del barrio de Garagartza. Aquí giro a la izquierda, y asciendo por una cómoda pista de cemento que me llevará casi hasta la cumbre del monte Gaintxipia.

Pero antes de ir allí, me desvío brevemente del camino para ascender a una pequeña cota conocida con el nombre de Santa Kurutz. La subida es muy corta pero algo cañera, por las elevadas rampas y por el terreno, una mezcla de tierra y rocas incrustadas, que en caso de estar mojado hay que ir atento para no patinar.

Rápidamente, alcanzo la cima del monte Santa Kurutz (204m). Las vistas no son amplias por culpa de la arboleda, pero aún así me permite observar el pueblo de Mendaro, y montes como Anboto, parte del Udalatx, y por atrás, camuflado por los árboles, el Arno.

Vuelvo sobre mis pasos hasta la pista, y luego, un poco más adelante, giro a la derecha.
Continuo ascendiendo rápida y cómodamente durante varios kilómetros, hasta que más adelante, cerca de llegar a la base del Gaintxipia, las rampas van aumentando poco a poco su inclinación.

Es justo al final de la pista cuando alcanzo la base del Gaintxipia. Ya solo me queda ascender un último repecho por hierba para llegar a la cima.
Pero no iba a resultar sencillo, ya que las rampas son absolutamente descomunales, aproximadamente del 40-45%.

Avanzo a paso de tortuga, deteniéndome a ratos para recuperar el aliento, pero finalmente consigo llegar a la cima del monte Gaintxipia (626m). Espléndidas vistas de 360° pudiendo observar sierras o montes como el Anboto, Gorbea, Urregarai, Bedartzandi, Illuntzar, Arno, Garaluz, Sosote, Arbil, Jaizkibel, Larrún, Peñas de Aia, Otaerre, Erlo, Aizkorri y muchos más. Por supuesto, hacia el Norte, se ve perfectamente el mar Cantábrico.

Tras las fotos de rigor, desciendo unos metros por el mismo sitio que en la subida, pero después me desvío a la izquierda para bajar otra ladera que conectará con un sendero señalizado con marcas PR amarilla y blanca, y marcas SL verde y blanco.

Dicho sendero alterna la tierra con la roca. Al principio va cuesta abajo, pero luego vuelve a ir hacia arriba.
Más adelante, me encuentro con una borda, y al lado, una fuente.
Sigo recto, atravesando una pequeña arboleda, hasta que conecto con una pista de cemento.
Giro a la izquierda y desciendo rápidamente por una pista, que alterna en numerosas ocasiones el cemento con la tierra.

Al final del mismo, llego hasta una carretera comarcal. Giro a la izquierda, y camino en el durante varios kilómetros, hasta tener a la vista mi próximo objetivo, el monte Arbil. Apenas tiene 400m de altitud, pero desde donde me encuentro parece que tiene mucho más. Para llegar a su cumbre, me va a tocar sudar de lo lindo.

Efectivamente, el ascenso no iba a ser ni mucho menos regalado. Al principio avanzo por pista de cemento, pero luego continúo por senda de tierra y piedras. Las rampas van aumentando de inclinación a medida que voy subiendo.

Más adelante, tras superar una puerta de madera, llego a un pequeño llano, donde tengo opción de atajar y encarar directamente un último repecho que me llevaría a la cima.

Sin pausa pero sin prisa, asciendo en fuerte pendiente el último tramo, esta vez por hierba, hasta llegar a la cima del monte Arbil (434m). Bonitas vistas también desde aquí, aunque no tan interesantes como las del Gaintxipia, por el hecho de ser una cumbre muy amplia y de perfil redondeado, sin tener apenas caída a los lados, osea, una especie de Gorbea.
No obstante, se puede divisar montes como el Arno, Oiz, Anboto, Gaintxipia, Garaluz, Sosote, Lizarreta, Erlo, y alguno que otro más, aparte del mar Cantábrico, y abajo, parte de la localidad costera de Deba.

Desciendo por la cara Norte hasta conectar de nuevo con el anterior sendero. Después, pasará a ser una pista de cemento, así hasta el final.
Bonitas vistas a los lados del espectacular entorno y paisaje de la zona, pudiendo observar el monte Andutz y mi destino, la localidad de Itziar.

Solo me queda adentrarme en él, recorrerlo en buena parte y llegar hasta la parada de bus situado a las afueras, y concluir así esta bonita ruta.