Mendizorrotz eta Kukuarri

Ruta circular desde Sariakola pasando por:
- Tumulo Tontortxiki (0.4 km)
- Dolmen Aitzazate (1.1 km)
- Mendizorrotz (3.4 km)
- Kukuarri (10.0 km)

Entre Orio e Igeldo se extiende un cordal con base de roca arenisca, cuya cúspide es el centenario Mendizorrotz. La cima catalogada, como tal, no es muy atractiva, ya que se encuentra copada por antenas y un manto de "otakas", bajo las cuales se esconden los restos de un fuerte de la Guerra Civil. Pero encontraremos otros atractivos en la ruta para pasar una agradable jornada.

El área recreativa de Lusarbe es el perfecto inicio para nuestro recorrido que, enseguida nos lleva a visitar los 4 túmulos de las edades del Cobre y del Bronce de Tontortxiki; por un sendero bañado de erizos en el que hacemos buen acopio de castañas.

De vuelta a la carretera, abriéndonos paso por el cerrado sendero, avanzamos hacia nuestro objetivo siguiendo el asfalto; dejando a un lado la cruz de Aitzasate.

Al encontrar la pista que sube a las antenas de Mendizorrotz, coronamos nuestro objetivo, que lo mejor que tiene son las vistas a Donosti, Getaria y los principales cordales gipuzkoarras.

Para el regreso iremos en busca del Camino del Norte, la idea era usar el sendero de Buztinzuri para ello, pero lo encontramos cerrado por la maleza. Así que retrocediendo unos metros, vamos en busca del camino que desciende directamente hacia la loma de Arrizorrotz (250 m).

Visitada la cima situada tras una charca, volvemos al camino jacobeo que nos llevará entre peregrinos de vuelta a Lusarbe y con ayuda del PR-GI 159, ascendemos directos a Kukuarri (377 m). Esta cima sí que resulta de interés con sus inmejorables vistas, una inmensa cruz blanca y la escultura de la Andra Mari de Kukuarri, obra de Oteiza.

Volviendo sobre nuestros pasos y siguiendo la carretera, retornamos a nuestro punto de partida; no sin antes llevarnos una agradable sorpresa al encontrarnos con una curiosa raza de vacuno.