Minas de Mazarrón

******NOTA IMPORTANTE*****:
LA DIFICULTAD CON LA QUE CATALOGO MIS RUTAS ESTÁ REFERIDA PARA QUIENES ESTEN HABITUADOS A ESTE TIPO DE ACTIVIDADES Y QUE SE DESENVUELVEN CON SOLTURA POR TODO TIPO DE TERRENOS Y NO PARA AQUELLOS QUE LAS PRACTICAN OCASIONALMENTE. SI TIENES POCA EXPERIENCIA, AÑÁDELE UN GRADO MÁS A LA DIFICULTAD DE MIS RUTAS PARA NO LLEVARTE SORPRESAS. 👍

Iniciamos esta ruta desde el Jardín Adrián Adame de Mazarrón, nos vamos por el camino de las encinas en dirección a la fuente del minero, una vez cruzada tomamos la primera calle a la derecha, que nos va a llevar hasta el principio de la zona minera. cogemos un sendero a la izquierda que nos llevar a la zona alta del charco de la aguja con unos colores ocres fantásticos ya que en esta época del año, todavía tiene agua suficiente para tomarnos unas fotos jugando con los reflejos en el. seguimos adelante y ya nos vamos introduciendo en la parte mas bonita de las minas, con bonitas formaciones y colores mezcla de los minerales que explotaban y las solidificaciones de los mismos. pasamos ante otro charco, este seco ya que han metido maquinaria para sacar el agua, una pena porque le daban un encanto especial a las minas. mientras caminamos nos vamos asomando por algunos de los pozos, aunque algunos están protegidos hay que tener cuidado con ellos. ahora nos desviamos a la derecha donde quedan restos de las antiguas torres por las que accedían los mineros al fondo de los pozos. continuamos por un canal hasta y con un pequeño atajo subimos hasta la parte alta, donde están los restos de las construcciones y donde se han rodado algún que otro videoclip y película, aun queda algo de agua en la casa, con su típico color rojizo. tomamos un tentempié allí mismo y continuamos yéndonos a la zona donde estaba la central eléctrica y los antiguos talleres. subimos por unas escaleras casi inexistentes y a la izquierda visitamos otro pozo, también con su torres y dentro de ella quedar las antiguas ascensores para bajar a los mineros a los pozos, ahora solo habitados por palomas, que en mas de una ocasión al asomarte te dan un susto. a la derecha queda otro charco este de color amarillento, imagino que por el mineral de azufre, que en algunos pozos aun sale el típico olor. bajamos a la otra zona donde creo que estaban los lavaderos, allí tenemos ocasión de ver otro charco, este también con algo de agua, y con un color espectacular, te da la impresión de estar en otro planeta. recorremos estas ruinas entre ellas, para retomar la vuelta bajamos por un bajante de aguas, con algunas piedras, hay que bajar con cuidado y luego nos metemos en un canal que ha ido haciendo el agua de lluvia, salimos por la izquierda y enlazamos con el camino que hemos traído, volvemos a la parte alta del charco de la aguja y por el mismo sitio regresamos al punto inicial de esta ruta.