Mogorrita, techo de Cuenca (Tragacete)

El cerro de la Mogorrita es el punto de mayor altitud de la Serranía de Cuenca y de la provincia. Se sitúa a 1864 msnm de altitud y a ella se puede acceder desde la población de Tragacete.

La ruta parte desde el núcleo urbano de Tragacete, y fuimos caminando hacia el norte hasta encontrar la primera de las muchas fuentes por las que pasamos durante la caminata, la fuente de la Toba. En apenas unos doscientos metros pasamos por la fuente de la Trinidad, lugar en el que tomamos un desvío hacia la derecha que marca el comienzo de la ascensión.

Durante aproximadamente un kilómetro caminamos por una campa en la que no se aprecia ningún sendero marcado hasta llegar a un robledal, a partir del cual el ascenso empieza a dejarse sentir. En dos kilómetros llegaremos a un corral y viramos a la derecha siguiendo una pista entre los campos. Pronto nos adentramos en un oscuro pinar que muchas veces nos exigirá que caminemos campo a través hasta llegar a una pista que nos regala unas vistas espectaculares de la zona. Sin embargo, de nuevo tendremos que volver a caminar por el bosque, ya que no encontramos sendero marcado. En estos metros finales antes de alcanzar el pico, entre pinos y sabinas rastreras, encontramos restos de nieve del último temporal.

Tras más de nueve kilómetros y casi 700 metros de desnivel desde el punto de partido, alcanzamos la Mogorrita, techo de Cuenca. Las vistas desde aquí son espectaculares y nos detuvimos aquí bastante tiempo descansando y haciendo fotografías.

Comenzamos el descenso por una pista que nos llevó hasta una sima, punto en el que nos desvíamos hacia la derecha. El paseo por la pista de bajada entre enormes pinos negros es agradable pero resulta monótono. Tan sólo he marcado como punto de interés el Pino del Ocejón, un enorme árbol monumental de 28 metros de altura.

Una vez finalizada la visita al Pino del Ocejón, regresamos a la dura pista y caminamos sobre ello durante cuatro kilómetros de caprichosas subidas y bajadas. El siguiente punto de interés de la ruta es el nacimiento del río Júcar y el manantial del estrecho de San Blas. Tras 19 kilómetros de ruta, resulta agradable observar aguas tan cristalinas brotar y correr por el incipiente cauce del Júcar. Aquí encontramos el área recreativa del estrecho de San Blas, donde paramos a descansar y a comer.

Al poco de retomar la marcha, pasamos por la fuente de San Blas y continuamos con nuestro descenso hacia Tragacete pasando por el Albergue de San Blas. A partir de este punto la pista está asfaltada y después de recorrer un kilómetro nos desviamos hacia el mirador sobre el molino, lugar en el que se podían admirar algunas chorreras del río Júcar que, desde su nacimiento, ya exhibe mayor caudal.

Retomamos la pista, paramos en la fuente el Tío Portero y llegamos a Tragacete, lugar desde el que iniciamos esta ruta.