Molina (Vía Verde) - S. de Guadalupe - Contraparada - Mota Segura - Mota Mula - Paraje

Interesante travesía moderada por su kilometraje pero de escasa dificultad técnica la realizada en el día de hoy. Partiendo de la Vía Verde en la zona urbana molinense (a la altura del antiguo apeadero del tren), la recorre en un tenue pero contínuo ascenso durante más de cinco kilómetro hasta llegar a la altura del Área de descanso de Agridulce. Allí, la abandonamos por la derecha para, por senda ascendente, llegar al punto más alto de la salida, donde se ubica el Vértice Geodésico "Cabezo Blanco 2" a 174 m.s.n.m. Tras bajar por el oeste, seguimos durante varios kilómetros el camino jalonado por múltiples señalizaciones verticales del gaseoducto de "Enagás"; en un contínuo " sube y baja" es el único tramo de nuestra travesía en el que (en zonas de bajada) hay que llevar una miajilla de cuidado por la presencia de piedra suelta. Salimos de la Sierra de Guadalupe por la Rambla del Talón y tras cruzar con cuidado la RM-560 accedemos, tras varios hectómetros pasando por debajo de la A7 a la Contraparada (Azud Mayor). Salimos de su Área Recreativa por la zona oeste atravesando puente sobre el Río Segura. Tras pasarlo, tomamos hacia la derecha siguiendo la Mota segureña en su margen derecha, que solo abandonaremos momentáneamente para atravesar (por asfalto) la Rambla Salada. Durante un prolongado kilometraje veremos a nuestra derecha las pedanías molinenses de la Ribera de Molina y la Torrealta; y a nuestro norte las preciosas Sierras de Ricote, la Pila, El Corqué. Llegaremos a la desembocadura del Mula en el Segura y nuestro caminar pasará a asfalto por la margen derecha del mentado río. Tras poco menos de un kilómetro cruzaremos por un puente hasta llegar a la "Torre del Obispo" (también llamada de Alguazas ó de los Moros). Tomamos el Camino de los Beltranes y la Calle del Paraje que atraviesan el núcleo poblacional del mismo nombre del municipio de Alguazas. Tras un kilómetro, llegamos al Puente sobre el Segura (olvido de foto) entrando por el Barrio de Santa Rita a Molina para, en pocos hectómetros, completar la circular. Dos comentarios para terminar: en primer lugar, salida nada recomendable con calor (nada de sombra) ; en segundo lugar, el estado de la Mota segureña puede ser muy variable dependiendo de la "altura" de la caña invasora (hoy ideal ya que estaba cercenada recientemente en todo el recorrido). Espero, si os decidís a senderearla, la disfrutéis.