MONCAYO 2017 - Subida a la Cima del Moncayo y peña Negrilla

VIAJE AL MONCAYO los días 26 y 27 de agosto

Los días 26 y 27 de agosto nos hemos desplazado de Valencia hasta la zona del Moncayo y alrededores con el objetivo principal de hacer la subida al Moncayo. El sábado hemos hecho el desplazamiento desde Valencia y hemos aprovechado para hacer dos pequeñas rutas que están cerca del Moncayo, el Cañon del río Val y el Nacimiento del río Queiles y hemos dejado para el domingo la subida al Moncayo y el viaje de vuelta.

Domingo 27 de agosto – Subida a la cima del Moncayo y Peña Negrilla
Hemos pasado la noche en el Hotel Gomar de San Martín de la Virgen del Moncayo (609488360), donde nos han atendido muy bien, han tenido el detalle de dejarnos preparado un desayuno especial a las 6 de la mañana y también nos han permitido volver a ducharnos después de terminada la ruta. Es un lugar recomendable para hacer esta ruta.
Desde el hotel nos hemos desplazado hasta el parking de los hayedos (14,8 km), que es donde llega la senda de vuelta. Era casi de noche y ya estábamos preparados para iniciar la ruta.
Vamos subiendo observando el amanecer, con alguna nube, pasamos la primera fuente junto al camino y llegamos al Santuario de la Virgen del Moncayo. Justo a la salida del Santuario tenemos la fuente del Chorro, hay que aprovechar para coger agua, pues es la última fuente del recorrido.
Dejamos el GR-90 y nos desviamos a la derecha por una senda que empieza a entrar en una pinada, es un pequeño bosque de pinos, son las primeras rampas y el grupo empieza a estirarse.
Subimos 700 metros y hay un pequeño rellano, es donde empieza la subida fuerte, ahora el grupo se estira más, cada uno va subiendo a su ritmo, es todo un pedregal donde hay marcada una senda zigzagueante para suavizar la subida.
Mirando hacia arriba vemos los que van en cabeza cada vez más lejanos, los distinguimos por el color de la camiseta y si miramos hacia abajo vemos los últimos que aguantan la subida, nadie va forzado, es como se debe subir.
Las vistas son impresionantes, muy lejanas, el sol no termina de salir de las nubes y aprovechamos para hacer alguna panorámica combinando los rayos de sol y las nubes.
Llegamos a la parte final de la subida, donde la senda se empina un poco más, pero como falta poco, un esfuerzo final y ya estamos arriba. Llegamos al collado el paisaje ha cambiado totalmente, ahora es de color ocre, es todo lo que en gran parte del año está cubierto de nieve.
A nuestra derecha podemos ver dibujado el circo de San Miguel y en la parte superior del circo el cerro de San Miguel. Detrás del cerro vemos el pico Moncayo, creíamos que habíamos llegado, pero nos queda una pequeña subida suave hasta el cerro, una bajada y la última subida hasta el pico, todo suave, por un buen camino que atraviesa todo el lomo y al final la llegada al vértice. Los compañeros que iban delante se han refugiado en un pequeño círculo de piedras para evitar el fuerte viento y la baja temperatura. Hemos aprovechado esta parada en este lugar para tomar el almuerzo y reponer fuerzas después de conseguir el primer objetivo de la jornada.
Terminado el almuerzo y después de las fotos correspondientes iniciamos la bajada. Solamente hemos bajado unos metros y comienza un nuevo pedregal parecido al de la subida, ahora hay que ir con cuidado porque las piernas están más cansadas y una caída es un corte casi seguro.
El grupo empieza estirarse nuevamente y el nuevo punto de reencuentro es al final de la bajada, en el Collado de Pasalobos o de Castilla.
Cuando bajamos tenemos frente a nosotros la peña Negrilla de 2.112 metros, midiendo las fuerzas que quedan, unos deciden subir y el resto del grupo decide continuar por la senda hacia los coches.
La gente de la zona de Castilla le llama a esta peña el Moncayo Castellano, porque está en esa Comunidad y desde esa parte se ven los dos picos muy juntos y de altura parecen casi iguales, de esta forma tienen un Moncayo propio, porque el Moncayo auténtico está compartido con la comunidad de Aragón, ya que la línea divisoria de comunidades pasa por la misma cima.
Iniciamos la subida a la peña, es una subida fuerte pero corta, no llega a los 700 metros y un desnivel aproximado de 100 metros. Desde arriba las vistas vuelven a ser muy extensas y espectaculares, destacando en la parte oeste el Moncayo, en la parte sur los campos de Soria y en la parte norte el barranco e Agromonte, por donde discurre la senda de vuelta y las líneas divisorias de las distintas variedades de flora según la altura.
Bajamos de la peña en dirección al barranco de Agromonte, justo donde se desvía la senda, pero por campo a través, sin senda, por una pedrera que nos lleva directamente hasta la fita de desvío. En este punto el grupo que no había subido a la peña no cogió el desvío y bajo unos metros, luego tuvo que volver a la senda y en este tramo vieron los restos de una avioneta, que hace unos años se estrelló en esta zona.
Cogemos la senda, primero por una gran pinada y luego sale a una pedrera, pero siguiendo el sendero se camina bien. En todo el recorrido tenemos unas bonitas panorámicas de la parte norte. Vemos perfectamente los pueblos de San Martín, Tarazona, Ágreda y Vozmediano.
Llegamos a la peña Nariz, un promontorio con un mirador impresionante, que está junto a la senda, solamente son 10 metros.
Luego un nuevo pedregal, pero con senda marcada y al final nuevo bosque de pinos con bajada directamente al parking donde tenemos el coche.
Hemos vuelto al hotel, nos hemos duchado y hemos comido muy bien, luego el viaje de regreso, con la satisfacción de haber cumplido con os objetivos que cada uno se había marcado. Para algunos era su primer dosmil, otros era su segundo intento, ya que en la otra ocasión se lo impidió el tiempo, ya que en esta zona es muy importante, otros se marcaron 2 dosmiles y para todos que hemos disfrutado de unos días de una bonita convivencia y un ambiente muy bueno.