Mont Rebei-Montfalcó-La Masieta

Ruta con paisajes espectaculares, puentes colgantes, escaleras y pasarelas adosadas a paredes verticales, recorriendo el desfiladero formado por el río Noguera-Ribagorzana. Aunque moderada , la ruta es exigente, pero no os lo podeis perder.
Este desfiladero es la frontera natural entre Aragón y Catalunya, pasando de una a otra comunidad a lo largo del recorrido. Debido a las características orográficas, el track no refleja el recorrido real. Los rebotes y pérdidas de señal, hacen que en ocasiones invite a cruzar por encima del agua, evidentemente sólo debéis hacerlo por los dos puentes habilitados al efecto. Es más efectivo seguir el GR-1 con la marca blanca y roja, y usar los waypoints del track como referencia cuando os acerquéis a algún punto de interés.
Para llegar hasta el parquing de La Masieta, inicio del recorrido, debéis programar en el gps la población de Pont de Montañana, y antes de entrar al pueblo, tomad el desvío a la derecha hacia Tremp, unos 100 metros más allá, tomad de nuevo a la derecha el desvío que indica Congost de Mont Rebei. La carretera aunque asfaltada, está minada de baches a uno y otro lado, y después de recorrer unos 8 kms siguiendo siempre la indicación de Mont Rebei, encontrareis una caseta que indica la entrada a las tres zonas de parquing. El más próximo al inicio del sendero, dispone de lavabo en uno de sus extremos y una caseta de información que abren el fin de semana, donde cobran el pupilaje del coche y os darán todas las explicaciones pertinentes.
El primer tramo de la ruta transcurre por la orilla del embalse, y según la altura del agua deberemos subir más o menos, pero esta parte es muy suave.
Pronto llegamos al primer puente colgante y encontramos las primeras marcas del GR, iniciando una subida suave pero contínua, hasta llegar a la marca Congost Mont Rebei, donde el sendero se ha ganado a la montaña excavando sus paredes, y los primeros cables de acero habilitados como pasamanos nos proporcionan seguridad. Aquí tomaos unos momentos para ver la panorámica del desfiladero y sus alrededores, y jugad con el eco.
Después de sobrepasar el túnel, iniciamos una nueva subida hasta llegar a la marca "desvío" , girando a la derecha hacia el puente colgante nuevo. Inmediatamente después hay una fuerte subida por piedras lisas y resbaladizas, donde han instalado tablas a modo de freno y escalones para facilitar el agarre del calzado.
En la marca Congost Siegué, una nueva panorámica invita a extasiarse con el paisaje y justo hacia la derecha a unos 50 metros,vemos el primer tramo de escaleras clavadas a la roca. La bajada de las escaleras se debe realizar con precaución puesto que los peldaños son estrechos y pensados para subir. Desde el pie de las escaleras, un nuevo repecho nos lleva hasta las pasarelas, también de bajada nos impresiona estar colgados sobre una pared vertical. Desde su base, una fuerte y contínua subida nos lleva a la Font de Montfalcó, con zona de picnic pero seguramente sin agua. Nueva subida hasta el refugio, para alcanzar los 780 metros y disfrutar de impresionantes vistas. A la izquierda se abre un sendero que lleva hasta una ermita. El refugio que acepta reservas, dispone de alojamiento y bar-restaurante, y si lo necesitais se puede llamar a un servicio de taxis. Un cartel anuncia servicios de kayak y otros deportes acuáticos. Durante el camino vimos un barco repleto de gente surcar las aguas del desfiladero. Haced acopio de agua para el retorno.
El camino de vuelta es el mismo, aunque logicamente todo a la inversa, las subidas ahora son bajadas, y las pasarelas y escaleras se deben subir.
El día que hicimos la ruta, se alcanzaron los 30 grados, el calor era sofocante y la sensación térmica lo amplificaba debido al microclima que se crea en el desfiladero.
Durante el camino de vuelta, compartimos el agua con varias personas que la habían agotado y estaban a punto de sufrir un golpe de calor.