Moratilla de los Meleros a Fuentelencina

Entre cerros y situada en un pequeño valle formado por los arroyos de Santa Ana y Carrajuadalajara se encuentra la pequeña localidad alcarreña de Moratilla de los Meleros. Con apenas un centenar de habitantes es de este pueblo desde donde partiremos para completar esta ruta circular de poco más o menos 4h30 de duración. Seguiremos la antigua senda local SL-7 de las Villas Alcarreñas que se encuentra pintada de blanco y verde y que nos llevara al pueblo de Fuentelencina.

Como su nombre indica en esta villa se hacia miel, una miel de calidad. Sólo hace falta oler a fondo el aire para percibir los aromas del espliego, del tomillo y del romero que abundan en los paisajes que rodean la villa. A tan sólo 36 kilómetros de Guadalajara y a 1 hora de Madrid, es el destino ideal para una salida al campo. Como siempre la Alcarria me sorprende y me seduce, no entiendo como no es más visitada.



El conjunto urbano es bastante atractivo. Destaca sobre todo la iglesia de nuestra señora de la Asunción desde donde partiremos. Seguimos callejeando para abandonar el pueblo dirección a Fuentelencina. Justo antes de abandonarlo nos encontramos con la picota plateresca del XVI, una de las más bonitas de Guadalajara.



Seguimos adelante a lo largo del valle hasta el desvío que a mano derecha sale en dirección Fuentelencina entre campos de cereal. En esta época del año, apenas comienza el mes de diciembre, aun falta mucho para que encañe el trigo. A lo lejos ya se divisa el campanario de la iglesia de la Asunción de Fuentelencina, como se aprecia en la foto inferior.



Tras visitar los restos de la muralla árabe y lo que queda del torreón nos dirijimos nuevamente por el camino marcado para visitar la ermita de la Soledad a la entrada del pueblo.



Seguimos ruta hasta encontrarnos la iglesia de la Asunción donde tomaremos un descanso merecido y algo de comida para reponer fuerzas.



En esa misma plaza hay una preciosa vista del valle que forma el Arroyo de la Vega. En el futuro quiero hacer la senda Fuentelencina a Alhóndiga por el camino de la Vega, promete ser muy bonita.



Una vez hemos terminado de comer y de disfrutar con las vistas del valle desde el mirador seguimos callejeando hasta desembocar en la bonita plaza del pueblo. Merece mucho la pena.



Salimos del pueblo por la Calle Mayor hasta llegar a la carretera que conduce al polideportivo. Unos metros más adelante dejamos el Camino del Molino girando a mano izquierda. Vamos andando por un camino escoltado por grandes quejigos con su ocre invernal. Los bosquecillos sirven de cobijo a los corzos que descubrimos en los campo recién arados. El paisaje es precioso.



Hay que estar atento, ya en las cercanías de Moratilla de los Meleros hay un desvío a la izquierda hacia las antenas. Es casi obligatorio hacer este camino si queremos disfrutar de una de las mejores vistas que proporciona esta ruta. Al llegar a la antenas veremos el pueblo a nuestros pies.



Volvemos sobre nuestros pasos para seguir la ruta principal y descender hacia Moratilla. La ruta pasa por campos recién arados que han borrado la senda. Se hace un poco difícil saber por donde sigue pero seguimos el arroyo y no hubo mayores complicaciones. La ermita de la Virgen de la Oliva es el primer edificio del pueblo que nos topamos. Ya hemos llegado. Bonita ruta incluso en pleno invierno. ¿Como será en primavera? Maravillosa, sin duda.