Nacimiento del Cadagua y cimas cercanas: Portillejos, Cantonad y Canto Muriel

Descripción
Hoy nos acercamos al Nacimiento del Río Cadagua, situado en la provincia de Burgos pero muy cerca de la frontera con Bizkaia. Se trata de una de las surgencias kársticas más caudalosas de la provincia, emplazada en un entorno de gran atractivo paisajístico y medioambiental, incluido en el espacio de protección del Valle de Mena.
Su nacimiento se produce en el extremo Noroeste de los Montes de la Peña o Magdalena bajo las paredes verticales de la cima de Canto Muriel, que también visitaremos.
Además, las vistas del valle de Mena nos acompañarán durante gran parte del camino, lo que ya es aliciente suficiente para acercarse por la zona.

En esta ruta subimos a tres de las cimas de la sierra para luego descender al pueblo por el mismo camino y completar el recorrido con la visita al bonito nacimiento del río Cadagua.
La cima de Portillejos se puede omitir pero es la más recomendable con diferencia debido a las espectaculares panorámicas y cortados casi verticales. Indicar así mismo, que además de la fuerte pendiente, hay un pequeño paso algo estrecho en esta cima que con mala climatología podría ser algo delicado. En condiciones normales no supone ningún problema.

Itinerario
Madrugamos bastante y a las 7:45 ya estamos en marcha desde el pequeño pueblo de Cadagua con una temperatura de -1 Cº. Vamos cuesta arriba girando a la derecha hacia el cementerio y en menos de 1 km ya dejamos de pisar asfalto. La senda va dibujando zig-zags ganando altitud pausada pero constantemente sin tomar desvíos, siempre siguiendo las marcas de la etapa 1 del GR 85: Ruta de los Sentidos. Alcanzamos el plano superior donde sopla un viento frío lateral muy desagradable, y decidimos tomar el ascenso a Portillejos, marcado con un waypoint.

La senda gana altitud sin miramientos a medida que nos vamos acercando a las peñas superiores, que bordearemos por la izquierda. Este último tramo tiene una pendiente considerable, tal y como se puede ver en esta foto. Una vez arriba, tomamos un pisado y estrecho sendero a mano izquierda lo que nos cubija del viento durante un rato, además de permitirnos descansar al ser llano. Volvemos a subir de manera suave hasta alcanzar la cima de Portillejos, previo paso por un pequeño tramo de arista de apenas un par de metros. Como he comentado antes, con mala climatología puede ser bastante peligroso, aunque hoy incluso con viento no ha habido ningún problema.
Respecto a la cima, es la primera cima rocosa de la Sierra de la Magdalena por el Noroeste, y los cortados a ambos lados son espectaculares.

Retrocedemos por el mismo camino y continuamos el sendero anterior para tomar el desvío hacia la lobera, debidamente señalizado mediante postes. Entramos en un bonito pinar llaneando durante un rato por una pista para descender a la lobera de castrobarto entrando en un hayedo. El muro viene casi desde la misma cima de Cantonad, como luego veremos. Nosotros giramos a la derecha por una ancha pista y alcanzamos el cortado rocoso que recorremos hasta la cima de Cantonad. La cima como tal no tiene ni buzón, solo unas piedras a modo de hito, pero una vistas muy buenas de los Montes de Ordunte. Retrocedemos unos metros por el cordal y alcanzamos el muro de la lobera, que seguimos hasta que nos deja en el cruce anterior.

Volvemos por el mismo camino y tomamos el desvío hacia Canto Muriel por una pista. La cima se encuentra en medio del pinar, así que ninguna vista ni interés, ya que tampoco tiene buzón. Volvemos sin senda por el medio del pinar, que al estar limpio se anda bien hasta alcanzar la pista inicial. Desde este punto solo resta volver al pueblo por el mismo camino.

Seguimos por la calle que desciende al lado de la ermita saliendo de las casas e incorporándonos a un sendero que se dirige hacia la montaña siguiendo la linde de campos de labor por la derecha.
El sendero discurre entre árboles. A la derecha, las empinadas laderas de los Montes de la Peña nos cierran las vistas y originan grandes zonas en umbría. Es un paseo sencillo y agradable. En apenas 15 minutos desde la salida del pueblo, llegamos a un cruce señalizado el desvío hacia el nacimiento. Salimos por la izquierda y bajamos por unas campas tapizadas de verde hacia el río.
El silencio es casi total, solo interrumpido por el rumor del río Cadagua, ya cercano, que baja en fuerte descenso hacia el centro del valle. Pasamos las pradera y llegamos ya sin dilación hasta la orilla del río. Un primer salto de agua, muy caudaloso, ya nos avisa de que estamos en las proximidades del nacimiento. Continuamos ya por la orilla. El río lleva mucho agua, y por eso tenemos que saltar entre las piedras para llegar lo más arriba posible.
El caudal es fuerte por las últimas lluvias caídas y nivel del agua sobrepasa en muchos puntos la orilla.
Al final no pudimos llegar a la cueva debido a la cantidad de agua acumulada, así que tras unas fotos retrocedemos por el mismo camino para dar por finalizada esta agradable ruta.