Nacimiento del río Guaro y Baños de Vilo desde Periana (Málaga)

Ruta circular desde Periana pasando por:
- Nacimiento del río Guaro (4.6 km)
- Baños de Vilo (8.2 km)

Nuestra ruta de hoy la haremos por Periana, municipio de la Axarquía malagueña, donde iremos a ver el Nacimiento de río Guaro y los Baños de Vilo, por los que pasaremos a la vuelta.

El recorrido lo haremos tanto en coche, como caminando. Los tramos de carril, donde no hay nada que ver, los pasaremos en coche y, el resto, caminando.

Las abundantes precipitaciones registradas en la provincia de Málaga durante esta recién terminada Semana Santa, siguen ofreciendo imágenes históricas y para la esperanza, levemente, el monstruo de la extrema sequía y dando un auténtico balón de oxígeno a la economía malagueña en general, desde el turismo a la agricultura.

Una de las estampas más llamativas es la que se ha producido a primera hora de la mañana de este lunes en el nacimiento del río Guaro, en el término municipal de Periana.

Como dicen los perianenses: 'ha salido' el Guaro o 'ha reventado' el río.

Después de ocho años sin hacerlo, ya que el anterior precedente se registró en 2016. Se ha producido un 'reventón' del que está considerado el principal aporte al embalse de La Viñuela.

Gran parte de este agua acabará en el pantano de La Viñuela (por el que pasaremos a la vuelta). Le han entrado ya diez hectómetros en los ultimos días, y se espera que puedan entrarle otros diez más, en las próximas semanas.

El Nacimiento del río Guaro, un espectáculo digno de contemplar.

A partir de aquí comenzamos el camino de vuelta pasando antes por los Baños de Vilo.

Si queremos conocer un auténtico baño árabe, lo encontrarán a 2 Km y medio de Periana en la aldea de Baños de Vilo.

Ubicado en un lugar privilegiado, el Balneario de Baños de Vilo llegó a ser considerado en los siglos XVIII y XIX como uno de los más importantes de Andalucía.

No se caracteriza, este balneario, por una marmórea construcción, tan sólo una poza de brocal esculpido hace más de mil años y la sensación de retroceder en el tiempo. Medio oculto por la fuerte vegetación y las muy abundantes aguas de sus contornos, continúa la poza de Vilo, derramando aguas sulfhídricas, magnésico-cálcicas y nitrogenadas a la constante temperatura de 21º centígrados, específicas para males de la piel y el herpetismo.

Y, después de pasar un ratillo agradable contemplando sus aguas, nos dirigimos ya hasta el centro del pueblo, donde iniciamos la ruta de hoy, y donde la darémos por concluida.

Una rutita muy fácil, súper bonita y con imágenes que no podemos ver todos los días. Sin duda, en esta ocasión, mas que nunca, si que merece el pequeño esfuerzo.