Narvaez - Pico Santa Barbara - Prados del Rey - (Sierra de Baza)

El Parque Natural de la Sierra de Baza ocupa una superficie de 53.649 hectáreas, situada entre dos amplias planicies como son la Hoya de Guadix, al norte y los Llanos del Marquesado al sur. Estas altiplanicies que rodean la sierra tienen un clima mediterráneo semiárido, pero en la propia sierra, dada su altitud, las precipitaciones son bastante superiores y las temperaturas algo inferiores, lo que le dota de atractivos paisajes, hábitats y especies de indudable interés.

Entre los distintos parajes que nos podemos encontrar representados en la sierra están los calares que en algunos lugares pueden superar los 2.000 metros, complejos kársticos y profundos valles con arroyos permanentes, lo que facilita que se dé una amplia vegetación mediterránea, aunque no hay que olvidar que la inmensa mayoría de la superficie está ocupada por pinares de repoblación.

En cuanto a la fauna, dada su gran extensión y el amplio abanico de especies forestales que sustenta favorece el asentamiento de diversas aves, siendo las rapaces quizás las mejores representadas con varias especies de águilas y el búho real. En las pequeñas islas de bosque natural nos podemos encontrar pequeños mamíferos como la garduña, zorro, gato montés o el tejón. En las riberas de los ríos, a pesar de su escasez, abundan las ranas comunes, las culebras de agua y viperina, musarañas, ruiseñores, entre otros. No podemos olvidar los más grandes como el ciervo, cabra montés y el jabalí.

Hoy vamos a recorrer un tramo del sendero GR-7. Partiendo del Cortijo Narvaez (del que se terminaron los trabajos de acondicionamiento durante el año 1.996 y fue abierto al público en octubre del 1.999), de donde arrancan una multitud de posibles recorridos o lo atraviesan. También subiremos a la máxima altura de este Parque Natural de la Sierra de Baza que no es otra que el pico de Santa Barbara.


https://youtu.be/1Vxga6_bv4A






FICHA DE LA RUTA:



Hora Inicio: 05/18/2019 08:06
Hora Fin: 05/18/2019 16:07
Distancia recorrida: 21,8 km (08:01)
Tiempo en movimiento: 05:37
Velocidad media: 2,72 km/h
Vel. en Mov.: 3,88 km/h
Velocidad Máxima: 6,86 km/h
Altura Mínima: 1351 m
Altura Máxima: 2264 m
Velocidad Ascenso: 310,2 m/h
Velocidad Descenso: -358,8 m/h
Ganancia Altitud: 1326 m
Pérdida Altitud: -1334 m
Tiempo Ascenso: 04:16
Tiempo Descenso: 03:43



DESCRIPCION DE LA RUTA:




Iniciamos nuestra ruta en la parte de las cabañas del Centro de Visitantes Narváez y tomamos el sendero Fuente de la Taza. Este sendero permite descubrir un amplio abanico de los diferentes ecosistemas que posee el Parque, recogidos en el jardín botánico. Después de pasar un bosque de fresnos, se adentra en un claro del bosque de pinos donde se aprecian varios majuelos que le dan al paisaje un colorido especial cuando están en flor.
Este corto trayecto nos conducirá directamente a la Fuente de la Taza, un caño de piedra donde se entrecruzan el sonido del agua y el canto de los pájaros. El sendero recorre casi un kilómetro, catalogado de baja dificultad y se puede recorrer en una hora. Desde aquí nos dirigimos en dirección oeste por otro sendero, paralelo a la pista, hacia el Mirador de Narváez. Desde aquí apreciamos las vistas y seguidamente tomamos por el cortafuego que cruza la pista hasta enlazar con el GR-7. Avanzaremos un centenar de metros para volver a dejarlo por la vereda. A partir de ahora y siempre por el sendero GR-7 toca llanear e incluso descender, con alguna pequeña subida hasta desembocar de nuevo en una pista de tierra unos metros por debajo del área recreativa “Canaleja Alta” con múltiples bancos, algunas barbacoas e incluso servicios.





Dejamos el área a nuestra izquierda y retomamos el sendero en una curva de la pista, justo antes de un pequeño puente. A partir de ahora comienza de nuevo el ascenso bruscamente, sin descanso y a veces con tramos exageradamente empinados hasta alcanzar la cota 2.000. Seguimos serpenteando por entre pinares, casi todos de repoblación, las isletas de pino autóctono nos las vamos a encontrar bien arriba, casi en las cimas. A lo largo de la ascensión nos encontramos algún ejemplar de arce granadino, especie que sólo se da en suelos profundos y fértiles con humedad abundante (precipitaciones anuales superiores a los 600 mm), especie muy delicada ya que si se deteriora no consigue recuperarse.
Tras casi una hora de exigente subida accedemos de nuevo a la pista. En realidad el sendero nos llevaría al mismo sitio que la pista de tierra, sólo que sin el curveo característico, el ahorro de kilómetros se da a costa de ascender en mucho menos recorrido. De nuevo en la carretera, avanzamos por ella hasta encontrar el Mirador Collado del Toro, donde nos detendremos para apreciar las vistas. Orientado hacia el embalse del Negratín con el impresionante cerro Jabalcón delante, un monte aislado de considerable altura en la cabecera del embalse y conocido por sus manantiales de aguas termales, disfrutadas tradicionalmente por los zujareños, como elementos más destacables y todo el altiplano a nuestros pies.
Seguiremos carretera arriba nuevamente hasta visualizar a nuestra derecha los Prados del Rey, (luego nos pasaremos por allí). El terreno se suaviza, la vegetación se abre y aparecen unos extensos prados húmedos que ocupan una buena parte de la ladera, ya junto al collado. El terreno es de material impermeable lo que facilita la acumulación del agua durante más tiempo consiguiendo que los prados permanezcan verdes. Un poco más arriba coronaríamos ya al collado, estamos en la cota 2.000.





En un momento vamos a ver una pequeña vereda que nos aparece algo difusa a la izquierda y es por donde vamos a seguir avanzando hasta que desemboca en el camino que utilizaban los antiguos mineros, observando algunas zonas de minas por el entorno. Nos saldremos por entre los pinos por el Calar de Santa Barbara hasta llegar por un lapiaz que nos conduce al mismo vértice geodésico de esta impresionante montaña, que con sus 2269 metros constituye la 14ª montaña más prominente de la Península Ibérica, con una prominencia de 1155 metros, siendo la máxima elevación de toda la Sierra de Baza y obviando el macizo de Sierra Nevada y de La Sagra, estamos situados en el punto más elevado de toda la mitad sur de la Península, por lo que tomamos conciencia de haber coronado una montaña bastante especial, uno de los máximos exponentes de la Cordillera Bética. Las vistas desde esta cima son realmente espectaculares, en consonancia con su prominencia como era de esperar. Hacia el sur podemos apreciar el resto de cumbres de la Sierra de Baza, destacando el Calar de Rapa así como la continuidad de esta sierra en la provincia de Almería, la Sierra de los Filabres, donde tenemos el claro referente del Calar Alto y su observatorio astronómico como máxima elevación de dicha sierra. Hacia el oeste podemos disfrutar de las vistas sobre los Prados del rey flanqueados por el Calar de los Tejoletos y La Boleta. Al fondo destaca sobremanera la inmensa Sierra Nevada. Hacia el norte podemos disfrutar de las vistas sobre el Jabalcón y el Embalse del Negratín y más al fondo podemos contemplar Sierra Mágina, las Sierras de Cazorla, el Pozo, Castril y La Sagra. Hacia el este la Sierra de Lúcar y el Valle de Almanzora.
Iniciamos el descenso tras esta maravillosa panorámica y con dirección sur vamos atravesando este precioso calar donde se observan dispersos los vestigios de un pasado minero que hace varias décadas colmó de actividad estas alturas. Llegamos a una gran grieta donde se evidencian muestras de ese pasado y desde aquí seguimos descendiendo ahora hacia el oeste con la clara referencia de los Prados del Rey como objetivo. Pasaremos por los restos de una antigua mina y sus construcciones aledañas donde podemos sumergirnos en las entrañas de esta montaña penetrando por sus galerías.





Completamos el descenso tomando el viejo camino de estas minas que nos facilita el avance hasta el Collado de la Mina donde cruzamos la pista forestal y nos introducimos en los preciosos Prados del Rey, prados de alta montaña donde apreciamos un antiguo pluviómetro, inmutable testigo de los rigores de esta fría sierra.
Tomamos el camino que cruza estos prados hacia el oeste para llevarnos al Refugio de los Prados del Rey o Casa del Pozo de la Nieve, gestionado por el Ayuntamiento de Baza y enclavado a los pies de La Boleta, con su fuente junto al edificio. El refugio consta de dos pisos mas una buhardilla y debemos decir que el estado de este gran refugio en el piso bajo es lamentable, colchones tirados por cualquier lado, botellas de cerveza vacías por todo el piso, troncos quemados por los suelos....en fin, no se nos ocurre como existen todavía desalmados que van a divertirse sin advertir las consecuencias que ello pueda tener. El piso superior si esta en mejor estado y a la buhardilla ni llegamos a asomar , ósea que desconozco su estado. A 100 metros bajo el refugio, en plenos Prados del Rey y sobre el Barranco de las Riscas, desagüe de estos prados, podemos ver un pozo de la nieve totalmente recuperado al que llegamos para poder contemplar su construcción cupulada y dimensiones. Hay datos escritos que confirman la existencia de este pozo nevero en 1753 aunque se sospecha que incluso pueda tener un origen árabe y no se descarta que incluso romano.





Saldremos a la pista a continuación y desharemos el camino que hicimos en la subida. Haremos una pequeña variante en relacion con la subida. Al llegar al cortafuegos donde trascurre unos metros el GR-7, vamos a continuar por este sendero llegando a un punto donde está señalizado un corto sendero Cortijo Casimiro en donde se abre una amplia panorámica también de la sierra. Llegamos a la Fuente del Olvido (con algo de agua), en un idílico pasillo entre árboles con bancos de piedra para disfrutar del lugar al poco llegamos a la fuente “El Olvido” y un poco mas adelante un poste informativo nos dirá que a nuestra derecha por el sendero a 400 metros queda el Centro de visitantes Narvaez, pero seguimos en nuestro caso unos 300 metros mas adelante para poder observar entre pinos, sauces, enebros...unas cinco secuoyas de un magnifico porte. Aquí nos aparece un sendero paralelo a la Fuente de la Salud que nos va a conducir en unos 700 metros al Centro de Visitantes dando aquí la ruta por concluida.