Navezuelas (Las Villuercas) - Circular Pico Villuercas subida por el Almonte y regreso por Viejas

RESUMEN:
Distancia: 25 Kms.
Tiempo en movimiento: 5:00 horas
Tiempo total: 6:40 horas
Altura ganada: 933 mts.
Altitud máxima: 1600 mts.

En el corazón del Geoparque las Villuercas está la localidad de Navezuelas, a unos 950 metros de altura. Desde esta localidad tenemos unas 5 rutas que todo senderista no debería perderse, por su belleza y la naturaleza agreste que nos encontramos. Esta es una de ellas.

Partimos temprano desde Navezuelas (Cáceres) por la pista de las piscinas, que dejamos atrás hasta que a unos 400 o 500 mts. sale a la izquierda un camino amplio y despejado que podemos distinguir por tener a la derecha (ya en el inicio del camino) una amplia puerta metálica con dos columnas en ladrillo tosco que la sujetan. Tomamos ese camino que nos lleva hacia la Pasadera entre huertos de castaños, cerezos y otros frutales. Un trecho más allá cruzamos el río Almonte, iniciando entonces una corta subida para dar con otra pista amplia que tomamos a la izquierda, hacia el Collado del Brezo, yendo a desembocar junto a la ermita de San Cristóbal, en la carretera hacia Cañamero.

Al llegar a la carretera tomamos a la izquierda, durante unos 500 mts., tras los cuales, sale a la derecha una pista de cemento que debemos coger. A partir de ahí comienza una ascensión con pendiente continua que ronda los 14 -15% con momentos del 30%. El paisaje ahí es precioso, entre robledales, helechos, piedras cubiertas de musgo verde, canchos majestuosos, y acompañados todo el rato por el rumor del río Almonte, difícil de ver por lo agreste de la flora en ese lugar. Al cabo llegamos a la pista asfaltada que une la localidad de Guadalupe con el pico Villuercas, punto en el que giramos a la derecha para seguir dicha pista hasta la picota.

Tras alimentar un poco el cuerpo, iniciamos el descenso por el mismo camino, si bien, al llegar a la pista de cemento que viene del valle Almonte, continuamos recto por la pista asfaltada, hacia el collado de las arenas, ya en el valle de viejas. Eso sí, haciendo un alto en el pozo de las nieves, que utilizaban antaño los frailes del monasterio de Guadalupe para conservar las viandas todo el año. El pozo se encuentra en buenas condiciones para hacerte una idea de cómo se las arreglaban entonces, aunque las instalaciones anejas, donde vivirían los encargados de su mantenimiento y custodia, están derruidas.

Retomamos el camino hacia el collado de las Arenas, punto por el que pasa el camino alfonso onceno, de manera que hacia la derecha iríamos a Guadalupe, y a la izquierda hacia Navezuelas, que es lo que nosotros hacemos, iniciando un descenso por un sendero pedregoso, tipo torrentera de agua, hasta llegar al Horcajo, al río Viejas, que cruzamos para ascender nuevamente hacia el collado de los Ajos primero y de la Paridera después.

Al dejar atrás el río Viejas, a nada que ascendemos un poco, entramos en una pista ancha y amplia que tomamos a la derecha para, a los pocos metros, tomar un sendero estrecho que sale de su margen izquierdo, ya que, si continuáramos por la pista amplia seguiríamos el curso del río viejas, adentrándonos en el valle del mismo nombre.

En todo este tramo por el sendero, estrecho pero despejado y practicable, atravesamos robledales, con mucha sombra buen parte de él, aunque nuevamente el sendero es pedregoso. Vamos ascendiendo por el valle de Viejas, despoblado y agreste como pocos, hasta que, una vez en el collado de la Paridera bajamos ya por el valle Almonte, sin pérdida, hasta la localidad de Navezuelas.

Ruta preciosa como todas las que salen de Navezuelas. El paisaje, con su flora y fauna (sobre todo aves) es digno de saborear. Disfrútalo pero cuídalo al mismo tiempo; recuerda: cuando te vayas del lugar no debe quedar nada que indique que has estado en él salvo las fotos.