Nogueron--Almenara--Nogueron

Me atrevo a proponeros esta ruta tanto por la belleza de los parajes que atraviesa como por el atractivo reto que supone para cualquier amante de la montaña. Se trata de una ruta de una dureza considerable; aunque no transcurre por lugares peligrosos, si considero que la forma física de quienes la afronten debe estar a la altura de sus particulares exigencias (casi 1000 metros de desnivel acumulado y 17 kilómetros por sendero excavado en roca viva --la mayor parte--).
Llegaremos al punto de partida por la carretera de Riópar Viejo (AB-415). Pasado el desvío a dicha localidad, continuamos por la carretera un tramo corto, hasta pasar el km 196; a unos 300 metros, en la mitad de una pronunciada curva a la izquierda, sale una pista ancha también a la izquierda. La tomamos y seguimos por la pista hasta ver un sitio donde poder dejar el coche. Este lugar se conoce como "El Noguerón", se trata de una dispersa aldea compuesta por unas 15 ó 20 casas rurales.
Ha llegado la hora de patear. Seguimos la pista por terreno abierto hasta llegar a una explanada donde podemos ver un cortijo; a partir de aquí la pista se va convirtiendo en senda y paulatinamente comienza a subir paralela a un arroyo seco. Nos encontramos en un camino de herradura (el cordel de las almenaras) que debemos ascender atentamente sin perder la exigua senda que, sinuosa, va ganando altura entre pinos hasta llegar a un collado tras una fatigosa ascensión. Desde el collado podemos ver otra pista forestal a nuestros pies, pero no es éste nuestro destino; nosotros debemos tomar a mano derecha e ir ganando altura (la senda a veces se difumina entre la maleza) por la misma cresta. A unos diez minutos atravesaremos un precioso bosque de quejigos. Buen lugar para almorzar, sugiero. Desde aquí se trata de ir ganando altura por la cuerda hasta la cima del Almenarillas; las vistas a ambas vertientes de la sierra resultan espectaculares. Enfrente, la cima del Almenaras, con su vértice geodésico a la vista, nos incita a realizar un último esfuerzo: a por ella!!!
Una vez en la cima, realizado un merecido descanso y la hidratación preceptiva, nos dispondremos a descender. Os recomiendo bajar siguiendo la cuerda en dirección opuesta a la que traíamos; abajo podemos ver la "Fuente del Pino de los Muchachos", que es donde debemos dirigirnos, y puede servirnos de referencia perfecta para bajar sin el menor problema. Nos hallamos en la fuente donde muere una pista forestal, la seguimos apenas unos metros hasta dar -a mano derecha- con una senda marcada con hitos y señales rojas y blancas: se trata del GR-66 en una de sus variantes. Descendemos por la misma sin perder las marcas rojas y blancas hasta un cortijo abandonado (en algunos mapas viene como "Cortijo de Miguel Serrano"). En este punto la senda se pierde bastante, os recomiendo un poco de paciencia y, sobre todo, no perder las señales que nos van a acompañar CASI hasta el final de nuestra aventura.
Llegamos a la carretera AB- 415 y andamos por ella unos 200 metros, atentos siempre a nuestra izquierda, pues pasado el km 191 aproximadamente sale una senda señalada (el GR-66), que debemos retomar y seguir durante otro kilómetro más o menos hasta dar con otra pista forestal en buenísimo estado; se trata de la pista que une Fábricas con Riópar Viejo; la tomamos a mano derecha --olvidándonos ya de las marcas del GR- y pronto aparecerá la antigua aldea de Riópar con sus casillas encaramadas en el cerro. Ya únicamente os queda girar a la derecha al llegar a la bifurcación y enlazar con la carretera AB- 415 de nuevo, caminar por asfalto poco más de 500 metros hasta el coche. Estoy seguro que, en este instante, os diréis lo mismo que me dije yo: "Ha merecido la pena". Un saludo y ánimo.