Oh!..toño en El Temblar y Las Lomas

El Temblar es una rareza botánica en esta zona. Es una mancha de álamos temblones (Populus trémula) en medio de un bosque de pinos albares, con un sotobosque de avellanos y algunos mostajos, que en otras latitudes mas norteñas estaría ocupado por un hayedo.
Justo debajo de la Cresta de las Lomas hay un ralo bosquete con diferentes especies de caducifólias que están coloreandose de diferentes tonos desde el amarillo al rojo: arces, espinos, guillomos, robles; junto a los siempre verdes pinos y carrascas.
Hoy pasaremos por ambos parajes para disfrutar de semejante paleta de ocres y rojos, y nos asomaremos a varios magníficos miradores.
Salimos desde la Pista a la Lomas y tras cruzar la carretera tomamos las señales de vía pecuaria para acercarnos a Casa Gorriz.
Bajaremos a la carretera por el camino de acceso a la Masía.
La cruzamos y tras vadear el barranco junto a una poza remontamos monte a través hasta llegar a las ruinas del Mas del Temblar.
A partir de este punto subimos pendiente arriba en dirección al Temblar para cruzarlo y salir al camino en la parte alta del mismo.
Hemos salido a una senda más arriba y hemos tenido que retroceder hasta la gran roca mirador.
Este bosque esta ocupado por pino silvestre, alamo temblón y grandes avellanos; en un ambiente bastante húmedo.
También hay grandes bloques de rocas cubiertos de musgo.
Tras asomarnos a este espolón rocoso, un gran mirador sobre el Temblar y la Cerrada tomamos una senda que nos lleva hasta la Negraliza.
Antes de pasar por la Masía recorremos la cresta por encima de la Cerrada pasando por varios puntos con grandes vistas.
Aquí tomaremos el viejo camino de las Lomas. Seguimos la traza por una zona con un amplio panorama hasta alcanzar el mirador al borde de las canteras. Ahora recorremos la Loma de la Negraliza, desde este alto disfrutamos de una bonitas vistas. A ratos hay hitos y en otros tramos se desdibuja, pero la dirección a seguir está clara.
Cruzamos el barranco de las Lomas y tras pasar una zona con algunos pinos destacables dejamos el camino y vamos a la derecha hasta el borde del acantilado.
Durante un largo trecho vamos a seguir la cresta que separa la planicie de las Lomas del Barranco de Valdepino sobrevolando el ahora multicolor valle.
A espaldas del Mas de la Loma de Abajo retomamos el tradicional Camino de las Lomas.
La senda en que ahora se convierte el camino serpentea entre los pinos antes de llegar al último mirador de la ruta.
Después de asomarnos a la gran peña seguimos bajando por la agradable senda hasta salir a la pista de las Lomas tras pasar por un gran pino.
Siguiendo la pista tras cruzar el barranco de las Lomas alcanzaremos la carretera donde concluye la ruta.
El día también ha sido plenamente otoñal, brumoso con ligera llovizna durante toda la ruta lo que en algunos puntos mediatizada las vistas.
La dificultad de la ruta estriba en los tramos realizados monte a través, en el caso del Temblar con una pendiente acusada.