Oiz y Zengotitagane desde el barrio de Osma (Mallabia)

Hoy el día no estaba para hacer una ruta que requiriese de muchas horas de caminata, ya que anunciaban lluvias para la tarde. Con esta previsión, mi amiga y yo decidimos hacer un recorrido muy conocido y transitado para mi, aunque no para ella, que es ascender a un monte bocinero como es Oiz, un clásico para los que vivimos en las inmediaciones de Ermua y Mallabia, entre otras zonas. Algún día tenía que ser la primera vez, y esta mañana era un buen momento para coronarlo.

Para ello, nos desplazamos hasta la parada de bus del barrio de Osma, perteneciente al municipio de Mallabia. Este es un punto de partida muy interesante, ya que nos permite hacer una circular de corta distancia, subiendo y bajando por 2 vías que son muy cómodas y sencillas.

La primera de ellas es la que parte del barrio de Zengotita. Diría que de los 3 itinerarios que hay en territorio mallabitarra, es el mas llevadero de todos, ya que las rampas son muy suaves en todo momento. El camino transcurre por senda natural, de fácil y cómodo andar.
Ya desde el principio tenemos a la vista la primera hilera de torres eólicas. Hacia allí tenemos que ir.

En menos de 1h, llegamos a una campa herbosa, donde se sitúa una ancha pista de piedras y la mencionada línea eólica. Las vistas son magistrales, aunque las haré mención mas adelante, cuando lleguemos al a cima del monte Oiz, que son mucho mas amplias.
Por la derecha, vemos en la distancia una minúscula elevación, que se trata de la cima secundaria de Zengotitagane. Por allí pasaremos al bajar, ahora toca subir hacia Oiz, así que giramos a la izquierda.

De aquí en adelante, podríamos avanzar constantemente por la pista, pero decidimos darle un toque diferente, y nos desviamos a la derecha, en un atajo que transcurre primero por una arboleda, y luego en campo abierto por un sendero natural.
Excelente elección, ya que aquí nos encontramos con el grupo de caballos mas grande de toda la ruta. Están muy acostumbrados al paso de gente, porque incluso se dejan tocar.

Unos metros mas adelante, volvemos a ver las torres eólicas, y un poco mas arriba, la gran pista. Pero para que caminar entre las molestas piedras, cuando podemos ir por una suave y bonita alfombra verde.
Ya tenemos a la vista las antenas y el geodésico cimero del monte Oiz, pero queda un último tramo por superar. Pasamos por una puerta de madera y ascendemos un repecho algo empinado pero sumamente sencillo por un sendero natural con alguna roca incrustada en el suelo.

Atajamos la pala final yendo por las rocas, y en 2h y 20min (yendo a un ritmo muy suave en todo momento, y con numerosas paradas para sacar fotos) alcanzamos así el hacha, buzón y geodésico cimero del monte Oiz (1026m). Magistral panorámica de casi 360º, empañada únicamente por la caseta y las enormes antenas de radio. Desde aquí se pueden ver sierras y montes como el Anboto, Gorbea, Itxina, Aramotz, Sierra Salvada, Untzueta, Ganekogorta, Montes de Triano, Kolitza, Sollube, Erlo, Hernio, Aralar, San Donato/Beriain, Urregarai, Bedartzandi, Urko, Karakate, Egoarbitza, Udalatx, Aizkorri, Aratz, Elgea, y muchos mas. Por abajo, hacia el Sur, la comarca del Duranguesado casi al completo, al norte, el parque natural de Urdaibai con su enorme ría, y por supuesto, el mar Cantábrico.

Tras las fotos de rigor, iniciamos el descenso vuelta al punto de partida. Además, empezaban a caer las primer gotas, aunque fue anecdótico, ya que luego no llovería mas (al menos durante la mañana, a la tarde si que cayó un buen chaparrón).
Podríamos descender por el mismo lugar donde subimos, pero para darle otro toque diferente a la ruta, fuimos primero a la mencionada cima de Zengotitagane (818m) y después, seguir recto para bajar por una empinadísima pista de cemento. Este camino es un poco rompepiernas, da igual en que sentido lo hagáis, no obstante es otra alternativa de llegar a Oiz sin tener dificultad alguna.

Al final de la pista, llegamos a la carretera que conecta el puerto de Trabakua, con el barrio de Osma y el municipio de Berriz. Giramos a la derecha, y enseguida, llegamos a la parada de bus de Osma, para finalizar así esta sencilla y bonita ruta, con un par de cumbres mas para la saca de mi amiga. MISIÓN CUMPLIDA!!