Olano, Olano Txiki y Arbarrain desde Parking La Leze

Ruta circular desde Parking La Leze pasando por:
- Olano (2.0 km)
- Olano Txiki (2.5 km)
- Arbarrain (4.2 km)
- Collado Aginaran (5.4 km)
- Cueva de La Leze (10.1 km)
La ruta comienza en el aparcamiento de La cueva de Leze, al que se accede por la carretera que une las localidades de Egino e Ilarduia (Alava). Desde el propia aparcamiento se puede ver la enorme entrada a la cueva, la cual es inaccesible a pie ya que de ella emana un río (sólo es posible adentrarse con equipo de descenso de cañones y espeleología). Nosotros decidimos dejar la visita a la entrada de la cueva para después de la ruta.
Nada más dejar el Parking, veremos la baliza indicativa de la subida al monte Olano. La pista se convierte enseguida en sendero hasta llegar de lleno a la parte de los farallones calizos. Esta primera primera parte, algo empinada, está separada de una pequeña brecha que iremos dejando a nuestra izquierda. Si la piedra está mojada nos ayudaremos de un pasamanos en forma de cadena para evitar posibles caídas. A la bajada, también será necesario el uso de la misma como medida de precaución.
A partir de aquí , la estrecha senda zigzaguea hacia arriba, remontando poco a poco la falda de la montaña a la vez que contemplaremos bellas perspectivas de Urbasa, Andía o Entzia. Sin motivo de pérdida alguna y bien señalizado con mojones de piedra, llegaremos hasta la última pala que nos acercará a la cima del Olano o Aitzandia. (1.083 metros)
Un breve descenso nos lleva nuevamente a tener que afrontar la pequeña subida del Olano Txiki. De aquí observaremos la antena de Arbarain (1.121 metros), muy próxima a poco más de un cuarto de hora. Un recogido hayedo, nos conduce al punto de encuentro de las tres mugas, Guipúzcoa, Alava y Navarra junto a un pequeño vértice geodésico y a una gran antena que rompe la estética de tan silencioso y hermoso bosque.
Tomaremos a mano izquierda las marcas blancas y amarillas de un pequeño recorrido por medio de un frondoso bosque junto a unas cuantas palomeras.
En poco tiempo llegamos al collado de Aguinarán, donde, después de reponer fuerzas retornaremos por la pista hacia la cueva de Lece, punto inicial de nuestra ruta para visitar desde fuera la majestuosidad de la misma.
Ruta desconocida para muchos, pero pero nada carente de interés. Subida intensa a lo largo de una hora, unas vistas impresionantes sobre Aratz, Aizkorri, Beriain, Malloas y Urbasa entre otros. Punto estratégico a nivel geográfico y una impresionate cueva enclavada en medio de la fachada caliza. El merendero para acabar la jornada, tampoco desmerece. ¿Qué más se puede pedir?