Ontiñena - estepas - barranco de Valdecanales
near Ontiñena, Aragón (España)
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Trail photos
Itinerary description
Ruta por los caminos de Ontiñena, sin complicación ninguna.
A nivel cultural / histórico, es digna de mención la iglesia de Santa María, espectacular y robusta construcción en piedra caliza de la zona.
La ruta la comenzaremos estacionando en uno de los puntos de ensanche junto a la carretera A-2214 que atraviesa la localidad.
En primer lugar me dirigí a la propia Iglesia parroquial que hoy se encuentra cerrada, pero merece la pena de ver por fuera. A mi modesto parecer, es un edificio muy destacable por los gruesos muros de piedra caliza tan bien tallada. Sólo en algún punto de su basamento se observa que no todas las piedras fueron bien elegidas y alguna se esta comenzando a descomponer (por la baja calidad de algunos sillares principalmente).
A continuación recorrí las callejuelas de la localidad, donde nunca antes había entrado. Es un casco urbano de callejuelas estrechas, donde de vez en cuando podremos ver casas con bonitos arcos de piedra.
La Plaza mayor también es un hermoso lugar, el Ayuntamiento es muy chulo y destaca también un pórtico dentro del cual hay una curiosa escultura y una hermosa fuente.
Desde la Plaza Mayor, tomaré una callejuela de las varias que permiten acceder a la parte alta. Por una especie de camino se ascienden los últimos metros hasta una gran antena de telecomunicaciones que destaca en lo alto de la localidad. Desde este punto se obtiene una gran panorámica, aunque el punto es un poco feo ya que hay unos depósitos de agua y la tierra revuelta. Estaría bien una repoblación en este lugar para darle un toque mas amable.
Por el camino de acceso en vehículo a este cerro y los depósitos, me voy andando dirección Oeste. A partir de aquí hay que ir viendo los sucesivos cruces de caminos que surcan las fincas cultivadas, en las que es frecuente ver naves agrícolas o ganaderas.
Uno de los caminos conduce hacia en barranco de Valdecanales, en éste primero paré a ver la fuente de los Olivaretes de la que apenas queda rastro. Solamente con una cierta atención se puede adivinar el punto húmedo del cual debió manar, se visualiza en la margen del camino. Las grandes fincas dominan el lugar y es posible que al hacer alguna de las modernas conducciones de riegos, se haya roto la capa freática y por eso la fuente ya no sirve.
Seguimos por el camino y bajamos al ancho barranco de Valdecanales ó Valderrevés, en el cual hay una pequeña balsa de escorrentías. El camino cruza el cauce que se encuentra cegado de carrizos y tamarizos, lugar donde anidan o se resguardan un gran numero de pajarillos.
Ascendemos por la margen contraria atravesando nuevos campos de cultivo, ahora de secano. De vez en cuando se oyen los pajarillos cantar como si anunciasen la primavera, es una delas cosas que más destacaría de estos páramos. Si andamos con tranquilidad, el sonido ó canto de las aves es un auténtico deleite. Porque mucha otra cosa no se puede contar de estos lugares, como no sea que los caminos son muy anchos y bien pisados que permiten el paso de grandes camiones a alguna de las granjas que hay en el término municipal.
En el siguiente cruce tomamos el camino de la derecha para regresar hacia Ontiñena, pronto descenderemos por el camino de las Vianas Bajas hacia la Cañada Real de Sariñena a Ballobar.
Los últimos dos kilómetros son de una traza llana que bordea la fértil llanura, en la que el río Alcanadre divide en dos la zona de cultivos más productivos.
A nivel cultural / histórico, es digna de mención la iglesia de Santa María, espectacular y robusta construcción en piedra caliza de la zona.
La ruta la comenzaremos estacionando en uno de los puntos de ensanche junto a la carretera A-2214 que atraviesa la localidad.
En primer lugar me dirigí a la propia Iglesia parroquial que hoy se encuentra cerrada, pero merece la pena de ver por fuera. A mi modesto parecer, es un edificio muy destacable por los gruesos muros de piedra caliza tan bien tallada. Sólo en algún punto de su basamento se observa que no todas las piedras fueron bien elegidas y alguna se esta comenzando a descomponer (por la baja calidad de algunos sillares principalmente).
A continuación recorrí las callejuelas de la localidad, donde nunca antes había entrado. Es un casco urbano de callejuelas estrechas, donde de vez en cuando podremos ver casas con bonitos arcos de piedra.
La Plaza mayor también es un hermoso lugar, el Ayuntamiento es muy chulo y destaca también un pórtico dentro del cual hay una curiosa escultura y una hermosa fuente.
Desde la Plaza Mayor, tomaré una callejuela de las varias que permiten acceder a la parte alta. Por una especie de camino se ascienden los últimos metros hasta una gran antena de telecomunicaciones que destaca en lo alto de la localidad. Desde este punto se obtiene una gran panorámica, aunque el punto es un poco feo ya que hay unos depósitos de agua y la tierra revuelta. Estaría bien una repoblación en este lugar para darle un toque mas amable.
Por el camino de acceso en vehículo a este cerro y los depósitos, me voy andando dirección Oeste. A partir de aquí hay que ir viendo los sucesivos cruces de caminos que surcan las fincas cultivadas, en las que es frecuente ver naves agrícolas o ganaderas.
Uno de los caminos conduce hacia en barranco de Valdecanales, en éste primero paré a ver la fuente de los Olivaretes de la que apenas queda rastro. Solamente con una cierta atención se puede adivinar el punto húmedo del cual debió manar, se visualiza en la margen del camino. Las grandes fincas dominan el lugar y es posible que al hacer alguna de las modernas conducciones de riegos, se haya roto la capa freática y por eso la fuente ya no sirve.
Seguimos por el camino y bajamos al ancho barranco de Valdecanales ó Valderrevés, en el cual hay una pequeña balsa de escorrentías. El camino cruza el cauce que se encuentra cegado de carrizos y tamarizos, lugar donde anidan o se resguardan un gran numero de pajarillos.
Ascendemos por la margen contraria atravesando nuevos campos de cultivo, ahora de secano. De vez en cuando se oyen los pajarillos cantar como si anunciasen la primavera, es una delas cosas que más destacaría de estos páramos. Si andamos con tranquilidad, el sonido ó canto de las aves es un auténtico deleite. Porque mucha otra cosa no se puede contar de estos lugares, como no sea que los caminos son muy anchos y bien pisados que permiten el paso de grandes camiones a alguna de las granjas que hay en el término municipal.
En el siguiente cruce tomamos el camino de la derecha para regresar hacia Ontiñena, pronto descenderemos por el camino de las Vianas Bajas hacia la Cañada Real de Sariñena a Ballobar.
Los últimos dos kilómetros son de una traza llana que bordea la fértil llanura, en la que el río Alcanadre divide en dos la zona de cultivos más productivos.
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