Orbaneja del Castillo - Villaescusa del Ebro - Los Chozos - Orbaneja

Orbaneja del Castillo es uno de esos pueblos que no te debes perder y ya que lo vas a visitar, por qué no darse un paseo junto al Ebro, disfrutar de un tramo encañonado y lanzarse a la aventura por una senda inexistente?
Disponemos de 3 parkings a la entrada del pueblo, en mayo pudimos aparcar sin problema en el más cercano, en época estival igual está bastante lleno.
Después de asombrarnos ante la cascada que surge del medio del pueblo nos dirigimos hacia una de las entradas al GR 99, la ruta del Ebro, atravesamos el río, tomamos el camino de la derecha y comenzamos a darle a las piernas por un paisaje con una densa vegetación de ribera.
Antes de llegar a Villaescusa del Ebro, población en la que abandonaremos el GR, podemos apartarnos un poco del camino y visitar la cascada del Tobazo, en época de lluvias debe de ser muy bonita. Ya en este mes lo es.
En Villaescusa cruzamos el Ebro por el puente de la población y emprendemos un nuevo camino, ascendente, hacia el Páramo de Bricia, pueblo antiguo y las trincheras. Decir que en este punto tuvimos que pasar bajo un pastor eléctrico que cruzaba el camino .... hay cosas que cuesta entender.
El pueblo antiguo es un conjunto de ruinas de algo que debió de ser un pueblo en su día.
A las trincheras no nos acercamos, debíamos desviarnos y en este punto ya íbamos un poco a nuestra suerte, sin tener muy claro por dónde regresar a Orbaneja.
Es importante seguir el track con gps porque no se encuentran marcas en el camino, te puedes guiar por pequeños grupos de piedras amontonadas que indican que alguien pasó por allí previamente perosiguiendo el track y los waypoints indicando qué camino tomar .... no tiene pérdida.
Se atraviesa una finca privada por una especie de reja-puerta. Imprescindible dejarla como estaba. Luego atraviesas un río seco y caminas fuera de senda hasta que encuentras el camino que te llevan a los chozos. (Con el track no hay pérdida posible).
Vistos los chozos nos dirigimos nuevamente a Orbaneja, pueblo en el que entramos por la parte superior, descendiendo junto a la cascada para regresar al punto de inicio.
El pueblo tenía vidilla en fin de semana, bares junto al riachuelo que lo cruza y zona verde donde los niños jugaban y se refrescaban.